Buscando él monasterio
A toda velocidad, se condujo con su descapotable hasta el corazón de la ciudad, dirigiéndose directamente a la agencia de viajes más cercana, para preguntar por el dichoso monasterio Taihei-hi que le había dicho el anciano Myoga. Sin embargo, no supieron darle información. Algo extrañado fue a otra agencia y sucedió exactamente lo mismo. Visitó como cuatro sucursales diferentes y siempre obtenía la misma respuesta: 'Lo sentimos, desconocemos el lugar que busca'.
No podía creer que nadie supiera el paradero de ese templo. Le habían dicho que al no tratarse de un sitio turístico, era natural omitir su existencia en las guías. Más que nada porque aún habían algunos monjes que preferían vivir apartados de la comunidad para llevar una vida enteramente dedicada a la meditación y convivencia con la naturaleza, por lo que nadie llegaba a encontrar sus 'refugios' realmente. Era muy probable que el monasterio Taihei-hi se encontrara dentro de esa categoría.
Con los nervios algo alterados y sin muchas ideas de qué hacer, miró a su reloj. Había perdido casi una hora de su valioso tiempo y ya eran las 8:20 de la mañana. ¡¿En dónde rayos se encontraba ese maldito monasterio?
— Myoga... —pronunció su nombre despacio, tratando de contener su ira, mientras apretaba sus puños entorno al volante.
Con una mueca de fastidio, volvió a intentar con su celular, pero para colmo, ¡el anciano continuaba sin señal! Frustrado, se pasó la mano por el flequillo y se recostó en el asiento. ¿Qué hacer ahora?
Ladeó distraídamente su rostro hacia su izquierda y su mirada se fijó en una valla publicitaria que exponía una línea de buses privada. En el centro del anuncio se podía apreciar claramente una cartografía de Tokyo y el dibujo de varios medios de transporte a su alrededor. Lo observó vacíamente, sin fijarse en los detalles hasta que de pronto, pareció reaccionar y parpadeó sorprendido.
— ¡Eso es! —exclamó para sí mismo con entusiasmo.
¿Cómo no se le ocurrió antes? Cuando estuvo en la casa del anciano Myoga, había visto aquel mapa en el estudio. Ashikaga... Sí, ése era el lugar que estaba marcado, según recordaba. Aunque no tuviera la certeza exacta que el monasterio se encontrara precisamente allí, había grandes posibilidades que así fuera. Además, ¿qué otra alternativa tenía? Si no hubiese sido por la culpa de ese anciano, él no se encontraría en esos apuros y ya hubiera llegado a su encuentro. De lo único que estaba seguro, era que el templo no se encontraba demasiado alejado como para tener que abordar un avión o un helicóptero... al menos esa impresión había tenido al escuchar su voz por el celular...
Se removió en su asiento y estiró su mano derecha hacia el tablero, junto al volante. Oprimió los diversos botones de la pequeña pantalla de su avanzado sistema de navegación MMI plus, y un mapa de Tokyo se mostró en él. Exploró un poco, moviendo la trayectoria hacia las afueras de la ciudad, dirigiéndose al norte. Varios datos se proyectaron, indicándole que había una distancia de 80 km para llegar a Ashikaga. Trató de recordar el punto marcado en el mapa del anciano Myoga y lo relacionó con el suyo. Aunque la ciudad parecía amplia, quizás no resultaría muy difícil localizar el lugar exacto.
Sin más pérdidas de tiempo, encendió el carro y lo puso en marcha a toda velocidad, esquivando el tráfico que ya había aumentado considerablemente para esas horas. Con suerte, lograría llegar en menos de una hora, claro, eso siempre y cuando consiguiera acelerar a 130 km/h. No obstante, no tardó demasiado para descartar ese pensamiento y resoplar frustrado al tener que detenerse en un semáforo que mostraba su luz roja. De acuerdo... tal vez se tardaría un poco más hasta salir de la ciudad y lograr avanzar por la carretera.
ESTÁS LEYENDO
Marcados por el Destino
RomanceEsta historia no me pertenece es de Peachilein de fanfiction.net y los personajes pertenecen a la increíble historia de Inuyasha. esta historia es para cualquier fan de este increíble anime y que quiera experimentar otro giro de los acontecimientos...