¿Quien es mi padre?

XII. Intentar, intentar.

N/A: Contenido Lemmon en este capitulo :D

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—Rehacer la boda. —decía en voz alta, podría lograr terminar "ese algo", que les faltaba a ellos dos. —Saori y Rin quieren que nos reconciliemos.

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[Actualidad]

~I~

—Buen día— oía una voz masculina, adentro de su habitación, también se podía escuchar los pequeños ruidos que hacían los cubiertos al chocarse con la taza de porcelana, los diminutos sonidos metálicos que causaba la charola. Las cortinas no estaban abiertas, pero las luces estaban encendidas dentro de estas paredes, donde anterior mente predominaba la oscuridad. —Sesshomaru, son las nueve de la mañana—le decía ella, al bostezar pesadamente.

—Lo sé, deberías acostumbrarte—contradecía este, al dejarle la charola sobre una mesa, que estaba al lado de la cama, se aseguraba de apagar la luz, para que después abriera las cortinas, dejando entrar los rayos del sol. —Yo me levanto siempre a este horario, o sino un poco antes.

—Pero yo no. —contradijo ella, al darle un sorbo a su café. — ¿Por qué me despertaste a esta hora?

—Para que desayunes. —Contestaba con voz serena, — Además quería proponerte algo...

— ¿Eh? ¿Qué cosa? —preguntaba ella, estando curiosa, comió algunos panqueques y luego, saboreaba el dulce café, que le habían preparado. — ¿Desayunaste?

—Sí, no te preocupes por eso, y sobre la propuesta es...—se tomo una pausa para decirlo, —Salir a pasear por la ciudad ¿Qué te parece?

—Hmmm...De acuerdo—acepto, al terminar de desayunar. —Estuvo delicioso.

Vio como su mujer se había quedado sonrojada por el delicioso desayuno que él le preparo. —De nada, amor—le decía Sesshomaru, al guiñarle el ojo derecho. —Te espero abajo.

Kagome no se sonrojo por eso solo, sino también porque Sesshomaru andaba por la mansión estando en bóxers, como que lo estaba haciendo apropósito. Y ella, bueno, tenía un atuendo parecido a un vestido delicado y de color blanco, era transparente: por lo que su conjunto de ropa interior negro, resaltaba mucho. —Seguramente lo habrá notado. —pensó, quedando ruborizada. —Bueno, llego la hora de cambiarme.

Pasaron unos quince minutos, él la esperaba en la sala del living, al oír unos pasos que provenían de las escaleras, se giro ligeramente hacia atrás y todo para encontrarse con ella, su tierno vestido de color amarillo suave (limón), con un conjunto de tacones del mismo color, una chaqueta y un sombrero pequeño de color blanco, dándole un toque como "primavera", quedando anonadado por su vestimenta. Kagome no tenía mucho que decir, respecto al atuendo de su marido, que solo era una camisa blanca, unos jeans negros y zapatos del mismo color.

—Te ves preciosa. —musito este, con voz suave. Se acercaba hacia ella para ofrecerle su mano.

—L-Lo mismo digo por ti, Sesshomaru. Eres hermoso—agregaba Kagome, desviando su mirada para esconder su rubor. Aceptaba la mano de su esposo. — ¿A dónde iremos?

—Caminar, no sé, no planee mucho. —respondió al mirarla de reojo.

—Jeje, seguro que planeaste algo, no mientas.

—No, esta vez no.

Saliendo de la mansión, sin agarrar ningún vehículo que estaba estacionado dentro de la cochera, tomados de las manos, estuvieron caminando por la ciudad de Osaka Tokyo, obviamente, saben porque hacen todo esto, y es para volver a intentar algo que perdieron hace mucho...La confianza, el amor que se tenían.