Por el infierno que tú puedes —dije en voz
alta sin dirigirme a nadie.
—No, no puedes —dijo Lissa, con una
expresión que hacía juego con mi propia incredulidad—. Sé que has
estado aprendiendo a luchar con fuego, pero no has hecho ningún
estaqueo.
La cara de Christian se mostraba inflexible. —Lo hice... un poco.
Y puedo aprender más. Mia tiene algunos amigos guardianes aquí
que le han estado enseñando combate físico, y he aprendido algo de
ello.
La mención de él y Mia trabajando juntos no hacía mucho para
mejorar la opinión de Lissa. —¡Apenas has estado aquí una semana!
Lo dices como si hubieras estado entrenando durante años con
algún maestro.
—Es mejor que nada —dijo—. ¿Y dónde más vas a aprender?
¿Rose?
—P
236
La indignación y la incredulidad de Lissa se vieron un poco
atenuadas. —No —admitió—. Nunca. De hecho, Rose me llevaría a
rastras si me cogiera haciendo esto.
Maldita sea que lo haría. De hecho, a pesar de los obstáculos y
el personal que me mantenía bloqueada, me sentí tentada a
marcharme a allí ahora mismo.
—Entonces, esta es tu oportunidad —dijo. Su voz se volvió
irónica—. Mira, sé que las cosas no están... muy bien entre nosotros,
pero eso es irrelevante si vas a aprender esto. Dile a Tatiana que
quieres traerme a Lehigh. A ella no le va a gustar, pero te dejará. Te
mostraré lo que sé en nuestro tiempo libre. Luego, cuando
regresemos, te llevaré con Mia y sus amigos.
Lissa frunció el ceño. —Si Rose lo supiese...
—Es por eso comenzaremos cuando estemos lejos de la Corte.
Ella va a estar muy lejos de ti para hacer cualquier cosa.
Oh, por el amor de Dios. Me gustaría darles a ellos algunas
lecciones de lucha, comenzando con un puñetazo en la cara de
Christian.
—¿Y cuando volvamos? —Preguntó Lissa—. Se dará cuenta. Es
inevitable con el vínculo.
Él se encogió de hombros. —Si ella todavía está en servicio de
tierra, seremos capaces de salirnos con la nuestra. Quiero decir, ella
sabrá, pero no podrá interferir. Mucho.
—Tal vez no sea suficiente —dijo Lissa con un suspiro—. Rose
tenía razón acerca de que no puedo esperar aprender en unas
semanas lo que le tomó a ella años.