Capitulo 19

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- oye -oí la voz de Isabella.

Voltee a mi costado y la vi venir hacia mi.

- ¿qué quieres? -pregunte.

- solo hablar -respondió.

- ¿sobre? Creí que no teníamos nada de que hablar -dije.

- pues, fíjate que, me entere de que Camerón estará  en clases de Verano y, yo también lo haré. Así que, no creas que lo alejaste por completo de mi -hablo.

- Isabella que asco me das, ¿por qué no me dijiste jamás como te sentías? Para ti fue más fácil traicionarme y además buscar algo con mi novio -dije.

- ¡No hubiese servido de nada! Porque la única forma de la que me harías sentir bien es yéndote, alejándote, dejándome ser quien era, era mucho mejor cuando estabas a miles de kilómetros, cuando allá no podías opacar a nadie -dijo con una voz tenebrosa y desafiadora.

Entonces asentí, baje la mirada y me aleje de ella.

- Camerón no te prestara atención, suerte con el -dije despreocupada para luego darme la vuelta con la intención de irme.

- bueno, el es hombre -la oí decir- no conozco ni a uno que se resista a los encantos de una mujer, por muy fiel que suponga ser, la carne es débil Emma.

Entonces me detuve por segundo, con un nudo en la garganta de mil palabras por gritarle, pero continúe caminado.

Horas después.

Ya tenía que irme pero continuaba caminando de un lado al otro al esperar a que Camerón saliera de dirección, así es, ha durado mucho.

Entonces salió el director, y al verme comento...

- ¿que hace usted aun aquí Srta.Emma?.

- lo siento esperaba a Camerón, ¿donde esta? -pregunte confundida.

- el ya salió, hace una hora mas o menos -dijo mirándo su reloj.

- pero quedamos en que el me buscaría si salía antes -dije frunciendo el ceño-. Le mande un mensaje durante clases.

- quizá no lo recibió, o lo hizo pero lo ignoro. Mire Srta.Emma, usted imagino que esta al tanto del comportamiento tan agresivo que tiene su novio y tan ilegal -comento.

- no diga eso usted no lo conoce el no es así -interrumpí- el solo actúa así por impulsos y usted siempre aparece cuando esta teniendo uno de sus malditos impulsos.

- Srta no estoy ofendiendola.

- pero lo ofende a el -dije.

- el se ha metido en muchos problemas últimamente...

- ¡estoy al tanto de ellos! -grite pasándole por el costado con la intención de irme.

- ¿si? -lo oí decir- entonces usted ya sabe que el tiene problemas fiscales no?, y que al policía busca protegerlo porque la banda de amigos del chico que el jura no haber golpeado lo esta buscando porque creen que fue él quien le hizo daño a su amigo.

Entonces me detuve, y quede en blanco.

Como es posible que, me haya ocultado algo así.

- usted miente -dije volteando mi cabeza hasta mirarlo mientras negaba.

- no lo hago -afirmo- la policía vino a advertirme que, le comentara a Camerón sobre que debe cuidarse las espaldas, al policía está de su lado porque no tienen pruebas de que el fue quien lo goleó, y aunque, el grandulón aseguró que fue Camerón, la policía no se lleva a Camerón detenido porque, saben que son enemigos y creen que el puede estar culpando a Camerón solo para perjudicarlo, además, la constancia de estudios de Camerón, lo protege mucho y además no tienen pruebas.

-... ¿Donde esta Camerón ahora? -pregunte asustada.

- no lo se, después de que le comente que se cuidara, se fue -dijo encogiendo sus hombros.

- maldita sea -dije saliendo corriendo.

Corrí por todo el jardín, hasta llegar a las calles, no había nadie, más que Universitarios. No se veían bandas, ellos no estaban aquí.

Así que camine en dirección al departamento pero a su vez marque a Camerón. Pero el no contestaba así que comencé a desesperarme.

Por un minuto creí que le había ocurrido algo terrible pero, una vez que llegue al departamento lo vi entrando a su departamento.

- ¡Cameron! -grite al verlo, me emocione.

El volteo y me miro.

Entonces salte en sus brazos abrazándolo pero, no sentí sus manos abrazándome a mi.

Así que me separe de el con el ceño fruncido y lo mire a los ojos...

- ¿pasa algo? -pregunte.

- ....

- ¿por qué no me contaste lo de la policía? -pregunte haciendo que el abra su departamento y entrara a el dándome la espalda. Así que lo seguí.- ¡Cameron!.-grite.

- ¡Basta Emma! ¿Qué no ves que todo lo hago por protegerte a ti? -gritó asustándome- no quería que lo supieras porque, además de que me entere hace poco, sabia que enloquecerías.

- ¡Pero es peligroso!, soy tu novia debiste...

- Emma basta -interrumpió- si no te dije fue porque no quiero tenerte a mi lado si me atacan, podrías salir lastimada, ¿comprendes? -dijo acercándose a mi.

- ¡No! -grite empujándolo hacia atrás muy molesta- jamás quieres que te ayude a solucionar nada, crees que tu solo puedes, pero soy tu novia y debo estar contigo...

- ¿quieres decirme que no te doy el lugar de novia que mereces? -preguntó frunciendo el ceño- Emma me conoces, sabes que soy un chico de problemas, me pareció extraño que apenas llegara no me haya ganado uno hasta ahora. Y es gracias a ti, porque me cuidas y aconsejas. Pero esta vez, fue mi culpa. Me descontrole golpeando a ese idioma pero no me arrepiento porque él puso sus manos encima de ti, y jamás me lo perdonaré.

- actúas tan posesivo -dije dándome la vuelta.

- ¿posesivo? ¡Maldita sea Emma! ¿No ves que lo doy todo por ti? -preguntó gritando- tu nunca escuchas lo que digo.

- ¿que nunca te escucho dijiste? -fruncí el ceño- Camerón, parece que ya no me conocieras.

- ¡Quizás ya no nos conocemos Emma! -gritó- quizás, ya no deberíamos estar juntos si no podemos lidiar juntos como antes.

Entonces sentí como mi corazón se rompió.

MI VECINO 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora