MI VECINO 2

Capitulo 26

12:30am

Era de madrugada, yo estaba durmiendo, pero me desperté desesperado al oír mi celular sonar.

Llamada

- ¿Aló? -conteste.

- ¡Cameron ayúdame! -gritó Emma.

Apenas la oí decir "ayúdame" desesperada y llorando me levante de la cama corriendo y salí del departamento para comenzar a tocar su puerta.

- ¿que te pasa? ¡Abre la puerta Emma! -grite aun hablándole por el celular.

- ¡No puedo Cam, me caí de la cama y me lastime la muñeca y el pie! ¡haz algo me duele muchísimo! -gritó mientras lloraba.

- ¡cálmate!

Fin de llamada

Corte la llamada, guarde mi celular y decidí empujar la puerta así que me aleje, puse fuerza y corrí para luego golpear con mi hombro la puerta hasta que abrió.

Apenas entre me dirigí rápidamente al cuarto de Emma y ahí estaba, tirada en el piso mientras lloraba y sostenía su muñeca.

- por Dios -dije ayudándola a montarse en la cama otra vez- ¿estas mejor? ¿Te llevo al medico?

Entonces ella en ves de responderme, solo me miro con sus ojos totalmente llenos de lagrimas y me impulso hacia ella para abrazarla.

Comenzó a llorar en mi hombro mientras me apretaba fuertemente, ella es magnifica.

- Emma...

- Cameron -interrumpió soltándome y mirándome fijamente- no se si pueda soportar esto.

Entonces la mire con el ceño fruncido.

- ¿esto qué?.

- esto, no ser tu novia -respondió- necesito de tus labios, de tu mano, de sentir tu corazón latir por mi cuando te abrazo.

- aun late por ti cuando me abrazas -dije mirándola.

Entonces acaricie su hermosa cara con mis manos, seque sus lagrimas con mis pulgares, me acerque a ella y le di un beso.

Lento y suave para poder disfrutar su sabor.

Luego de separarme, ella permaneció con sus ojitos cerrados para luego mirar sus manos y jugar con ellas.

- necesitas dormir -dije poniéndome de pie.

- no quiero estar sola -dijo antes de que me fuera- ¿te quedas conmigo?.

Entonces la mire y sonreí.

- siempre -dije.

Entonces ella se acomodo, y yo me senté en una silla que había a su lado para mirarla mientras dormía.

- ten lindos sueños princesa -dije.

Ella cerró sus ojos y se durmió.

Al día siguiente
Narra Emma

Desperté cuando sentí los rayos calientes del sol que entraban por la ventana en mi brazo.

Cuando mire a mi lado, Cameron no estaba, así que supuse que se había ido, no lo deje dormir.

Tenía hambre, y la silla de ruedas estaba lejos como para tomarla e ir a la cocina, así que cuando recosté mi cabeza de la almohada oí que abrieron la puerta y cuando levante la mirada, ahí venia Cameron.

Así que sonreí.

- ¿que haces? -dije con una sonrisa.

- tu desayuno -respondió- buenos días.

- eres el mejor hombre -dije tomando la comida.

- tu me haces serlo -comento sentándose en el pie de la cama mientras me miraba.

Sonreí.

- ¿no deberías de estar en la Universidad? -pregunte.

-....

El permaneció en silencio e incomodo bajo la cabeza.

- ¿que paso? Se cuando ocultas algo, dímelo -dije asustada.

-... No quería decírtelo porque, imagino como te pondrás pero, es necesario...

- ¡Ya dime!

- me echaron de la Universidad -respondí.

- ¿que te qué? -grite.

No podía creerlo.

- lo siento, ¿bien? No fue mi maldita intención -gritó poniéndose de pie.

- ¿que hiciste ahora? -pregunte mirándolo.

- ¿para qué importa?

- ¡dímelo!

- ¡bien! -gritó- bien... -repitió mas calmado- fue por el imbécil de "Alan". Lo oí hablado con Isa, el tenía  tu numero y pretendía llamarte entonces lo ataque ¿bien? Forme un escándalo quizás. -dijo.

- Cameron... -dije negando mientras lo miraba- ¿desde cuando te volviste tan celoso?.

- ¡No lo sé! -respondió haciendo que las venas de su cuello se hincharan- lamento que, esta parte de mi no la conocieras y que tal vez te decepcione, pero cuando vivíamos por allá, supongo que no había nadie de quien yo poder celarte, y aquí no estoy acostumbrado a que otros chicos te busquen y no puedo soportar eso.

No sabia que decir, era comprensible pero... Gracias a su actitud, ya no podrá asistir mas a la Universidad.

- Cameron, lo de Alan es lo de menos. ¿Te das cuenta de que ya no podrás asistir a la Universidad? -pregunte.

- no, para mi es al revés. Lo de la Universidad es lo de menos,  yo jamás quise estudiar Emma eso es lo tuyo. Lo mío era, salir, tener aventuras, meterme en problemas aunque no quisiera. Y lo mas importante eres tu, siempre has sido tu... Y, el hecho de que Alan te llamara, me hacía pensar mil cosas....

- ¿como sabes que me llamo?

- ... Ayer vine, te oí hablando con el así que me fui -respondió.

- ...

Me quede en silencio, hasta que el dijo:

- Emma, ya ni se que hago aquí.

No sabia a que se refería, fue inevitable no fruncir el ceño.

- no comprendo

- Ya no te tengo a ti, eras la razón principal por la que vine. Tampoco tengo a la Universidad, que era solo como un hobbie para no aburrirme, ¿entonces que hago aquí? -se preguntó.

- puedes decirme a donde vas a llegar con esto?

- a que, lo pensé, y... Lo mejor, es que regrese a casa.

-¿estas demente? -grite- no puedes hacer eso, no me puedes hacer eso -dije mientras mis ojos se llenaban de lágrimas otra vez.

- es lo que debo hacer ¿bien? Tu estas aquí, y tienes todo. Tienes la oportunidad de jugar nuevas cartas, hazlo porque yo solo te hago daño.

Entonces se dio la vuelta, y se fue cerrando la puerta de un golpe.