Perdedor {Skydragon}

16.

CL ya llevaba alrededor de un mes trabajando para Mario López, si bien era muy raro que una empresa contratara a un corredor tan seguido, hicieron excepciones con CL, tanto que ya tenían establecido un contrato. En él se dictaban ciertas cláusulas que ella debía cumplir, pero no era nada del otro mundo considerando el tipo de trabajo que es y la única petición que CL realizó fue el viajar sin escoltas —a menos que ya fuera una ocasión de fuerzas mayores y ella no lo pudiera manejar—. Iba de ciudad en ciudad, de estado en estado, tanto así que las carreras eran sumamente reducidas, máximo 2 cada mitad de mes, inconscientemente se alejó tan rápido como había vuelto y a eso sumandole que casi ni veía a Taeyang era peor.

Harin se preocupaba por ella, aunque lógicamente CL no especificó el tipo de trabajo que la tendría tan ocupada. Ya era la tercera vez que debía entregarle el producto a Ji, pero a diferencia de las dos primeras la dirección cambió, el GPS dictaba otra ruta un poco más lejana que la "habitual", CL sabía que mientras siguiera la ruta denominada, todo estaría bien. Llegó a lo que interpretó que era la casa de Ji, hizo sonar la bocina como demente —no vaya a ser que Ji se lleve a Hyuna hasta su casa—. Una vez que el portón se abriera gracias a la autorización de Ji, CL entró y estacionó. Una vez dentro de la casa le dio una ojeada, era amplia y lujosa, la impresionó pero lo disimuló.

—Toma asiento, bruja. ¿Quieres algo de tomar?

—Un ron está bien.

Ji fue en busca de la petición de CL.

—Ten —Ji le extendió el ron y se sentó junto a ella—.

— ¿Dónde descargó?

—Hey, tómalo con calma.

—Que manía la tuya de decirme que hacer.

—Tanto como la tuya de siempre venir con escotes.

— ¿Qué? —CL casi se ahoga con el ron al oír ese comentario —.

—Por favor, bruja. Sabes el efecto que tienes sobre mí.

—No sé de qué hablas. No me visto para ti, no te creas importante.

—CL, cada vez que entras a mi oficina he deseado hacerlo contigo.

—Idiota.

—Y sé que tú también. ¿O me dirás que la vez en el club no la disfrutaste?

—No lo negaré puesto que no tiene sentido. ¿Para eso querías que viniera hasta aquí?

Ji dejó sus vasos de lado y empezó a repartir a besos en el cuello de CL, la piel de ella se estremecía con cada beso que Ji le daba pero lo disfrutaba demasiado como para resistirse. CL sabía que no sería como la primera vez, no, ahora era ella quien debía dominar. De un giro, CL quedó sobre Ji, quitó la camisa de él y repartió besos desde su oreja hasta su clavícula, luego volvió a subir hasta sus labios. Entre besos se deshicieron de la ropa, CL le daba placer al miembro de Ji con su hábil boca, Ji le gemía a CL para que siguiera, una vez que Ji llegó a la cima ella sólo lo dejó tomar aire por unos segundos antes de subirse sobre él y empezar las embestidas salvajes. CL dejaba marcas en todo el torso de Ji con su sus besos y uñas, Ji acariciaba los senos de CL. Una vez que Ji llegó al clímax, CL lo siguió. Ambos recuperaron el aire al lado del otro, una vez que sus respiraciones se normalizaron, Ji habló.

—Creo que lo que acaba de pasar contesta tu pregunta.

—Lo hace y a la misma vez no —CL empezó a vestirse tan rápido como se desvistió—.

Ji imitó a CL y una vez ya vestidos, Ji fue a buscar la paga de CL.

—Toma —Ji le extendió la normal suma de dinero por la carga—.

CL la tomó y salió para descargar lo que sea que Ji haya pedido, su sorpresa no fue muy grata al darse cuenta que su Hummer había sido abierta —por alguien que lógicamente no había sido ella— le pareció oír algo y al acercarse más, vio como una delgada figura rompía sus asientos de cuero con una navaja.

—¡Perra! ¡Te mataré! —CL tomó por los cabellos a la delgada mujer y la arremetió contra el concreto—.

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Damn!🔥

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Tenía que poner algo más que porno.

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