CAPITULO 7- No soy tu novio.

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Eran las 11 de la mañana. El día era precioso. El sol entraba por los pequeños rincones de la ventana e iba directo a mi cara. Quité la sábana y me levanté con ánimo. Abrí la ventana y dejé que mi habitación se inundara de luz. Entré en el pequeño baño que había en mi habitación, me lavé la cara, los dientes y me peiné un poco. Decidí afrontar ese día con valentía y positivismo. Me sentía fatal por aquel beso, cada vez que lo pensaba me daba dolor de barriga. Pero, no fue culpa mía. Fue Nick. Y apenas fueron 20 segundos de beso. Dylan no se enteraría, y yo haría como si eso jamás hubiera pasado. No había nada que temer. ¿A quién pretendía engañar? Estaba más preocupada en lo que Joe pudiera pensar. Pero me convencí. Que piense lo que quiera, no es nada mío.

Me miré al espejo por última vez, me dediqué una sonrisa y salí de allí. Puse una mano en el pomo de la puerta.

-Vamos allá.- Tomé aire y salí.

Nadie. Baje sigilosamente y entre en la cocina. Joe, Nick y Kevin estaban allí desayunando. Mi cara se cambió por completo. Me miraban.

-Buenos días.-Dije mientras me sentaba cerca de Kevin. Él me dedicó una sonrisa.

Nick seguía desayunando y Joe salió de la cocina. La tensión se notaba en el ambiente, pero no dejaría que me afectara.

-¿Dónde están las fiesteras?- Pregunté con una sonrisa.

-Siguen dormidas, anoche llegaron bastante tarde.- Kevin me contestó.- Y ustedes, ¿lo pasasteis bien?

Nick tosió, casi se atraganta con la galleta que se estaba comiendo.

-¿Estás bien?- Kevin le daba golpecitos en la espalda.

-Si si.- Dijo mientas tosía.

-Nosotros, si, lo pasamos bien. ¿Verdad Nick?-

Nick me miró, estuvo como unos 10 segundos mirándome, sin decir nada.

-Bueno, si.- Nick se bebió la leche de un buche y se fue de la cocina.

Kevin se quedó mirando cómo se iba.

-Están muy raros los dos. ¿Sabes algo?-

-Ni idea.- Me acerqué a la nevera y cogí un zumo.

No me podía creer que estuviera actuando de esa forma. Por dentro estaba rota. No sabía qué le podía pasar a Joe. ¿Estaría enfadado con Nick? Pero, ¿Por qué? Es decir, por qué le iba a molestar lo de anoche. Y por otra parte Nick, sin duda le estaba dando más importancia que yo. No sé si estaba enfadado o qué. Pero no iba a preocuparme. Ya se solucionará. Hoy no tenía ganas de echar a perder mi día pensando en hombres.

-¿Zumo?- Dije a Kevin mientras agitaba la jarra.

-No, gracias. Voy a subir a cumplir mi función de hermano mayor.- Kevin se levantó de la silla y subió decidido.

Me senté y empecé a beber. Me puse a darle vueltas al vaso. Moría de curiosidad por saber qué estaba pasando arriba. Me terminé el zumo de un trago y subí. Las puertas de las habitaciones estaban cerradas. Escuché la voz de Kevin salir de la habitación de Joe. No escuchaba mucho y deseaba escuchar todo lo que allí pasaba. Quería saber qué le pasaba a Joe y no sería yo la que le preguntaría. Estuve delante de la puerta durante unos segundos y decidí poner la oreja. Me sentía fatal por espiar pero, lo necesitaba. Escuchaba a Kevin preguntar una y otra vez 'Que te pasa, dímelo.' Joe le repetía que no le pasaba nada que lo dejara en paz. Y Kevin volvía a preguntar 'Me lo vas a terminar contando y lo sabes'. En el peor de los momentos empezó a sonar mi móvil. Me aparté de la puerta rápido y corrí a mi puerta.

-Mierda, mierda, mierda.- Saqué el móvil de mi bolsillo mientras me alejaba corriendo de la puerta, Dylan. Entré en mi habitación y cerré rápido.

Un verano para recordar- Joe Jonas. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora