Un día menos para mi cumpleaños. Notaba como mi mano estaba dormida, eché un vistazo y pude ver como Joe estaba agarrado de ella. Me pareció súper tierno durante un segundo, después recapacité y deslicé mi mano de la suya. Me giré hacia el otro lado de la cama y tantee la mesita, cogí mi móvil y miré la hora; 10:30, temprano. Al volver a dejar el móvil en la mesa no calculé bastante bien las distancias y el móvil cayó al suelo.
-Mierda!- Me levante para cogerlo cuando me topé con unos pies. Fui subiendo lentamente la cabeza, estaba en calzoncillos y parecía que contento.
-Toma- Joe tenía mi móvil en sus manos.
-Gracias.- Dije mirándole por fin a la cara.- ¿Podrías taparte?
-No estoy enseñando nada que no hayas visto antes.- Dijo mientras entraba en el baño.
¿Qué pretende paseándose por mi habitación así? ¿Provocarme? Pues sí, lo hacía. En mi vida había visto a un chico así, tan perfecto en todos los sentidos. La puerta del baño volvía a abrirse, y la cabecita de Joe asomaba.
-¿Podrías darme los calzoncillos limpios?-
-¿Te has duchado?-
-Claro, recuerda que es tu baño pero es mi casa.- Me guiñó un ojo.
Fui a cogerlos a un montón de ropa que tenía encima de mi mesa.
-¿Cuál quieres?-
-Te dejo elegir, seguro que tienes buen gusto para eso.-
No me podía creer que estuviera rebuscando entre la ropa interior de Joe, eso es algo ¿Intimo? Cogí unos negros y blancos y se los di.
-Gracias.- Dijo cerrando la puerta.-
'Que cara tiene este chico' pensé. Abrí las ventanas hasta arriba y me volví a tumbar en la cama. Miré mi móvil y tenía un mensaje de una de mis mejores amigas que decía; 'TENEMOS QUE HABLAR URGENTE. AVISAME.' Desbloquee el teléfono para hablar con ella pero para mi sorpresa este no tenía batería, estaba a 30 segundos de apagarse. Lo puse a cargar y lo dejé en la mesa. Sabía cómo era mi amiga, solía hacer de un granito de arena una montaña. Así que seguro que era una estupidez que podía esperar. Joe salía del baño, en calzoncillos de nuevo y secándose el pelo con una toalla. Era la cosa más sexy que había visto jamás, me quedé con la boca abierta. Me pareció verle sonreír e ir a por su ropa. Aproveché y entré corriendo al baño. Me peiné un poco y me lave la cara, tenía mucho calor. Para cuando decidí salir del baño Joe ya no estaba y vi que había dejado mi cama hecha, que mono.
En la cocina estaban todos bastante revueltos, Nick y Kevin en el jardín rondando por la piscina. Joe jugaba con Buffy y Dylan estaba sentado en la cocina con el móvil. Me acerqué a él sigilosamente y lo asusté.
-Oh joder.- Dylan se puso bastante nervioso y bloqueó el móvil enseguida.- Me has asustado.
-Era el plan. ¿Qué pasa?- Me senté a su lado.
-Emm nada, sólo hablaba con los chicos.- Sonreía.- Denisse te ha hecho zumo.-
-La adoro.- Dije acercándome a la cocina.
Joe entraba en la cocina.
-Oye, ________, esta noche quizá traiga a una chica. Mamá y Denisse no estarán así que...-
¿Qué? Definitivamente estaba loco. ¿Quería que le dejase mi habitación de picadero? ¿Qué coño se ha creído? Qué asco en mi cama, con mis sábanas. De eso nada. Me giré con el zumo en la mano y cerraba con el culo la nevera.
-Joe, no sé.-
-Venga, es la habitación con la cama más grande. Hazlo por mí.- Joe me suplicaba con las manos y me ponía esa carita irresistible de pena.
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Un verano para recordar- Joe Jonas.
FanfictionMetí las maletas en el coche. No me podía creer que mi madre me estuviera haciendo eso, y menos en mi último verano en la ciudad antes de marcharme a la universidad. Estaba convencida de que el mundo estaba en mi contra. Todos mis planes desaparecie...