XXI- Hazlo por mi.

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El timbre de la casa sonó y yo, corrí hacia la puerta para abrirla.

Abrí la puerta y de inmediato vi a mamá y a papá con los brazos abiertos.

Los abrace de inmediato y ellos me recibieron en sus brazos.

Nathan se nos unió al abrazo.

-Los extrañamos. -dijo mama separándose de nosotros.

-Nosotros también. -dijimos Nath y yo al unísono.

-Bueno chicos, menos charla y mas ayuda que me muero del hambre. -papa siempre tiene que desencajar.

Reí interiormente.

Mamá y papá vieron hacia dentro de la casa y allí se encontraba Jake sonriente.

-Bienvenidos a casa señores Blake. -dijo con una sonrisa en su cara.

-Ven acá. -dijo mamá abriendo sus brazos para abrazarlo.

Mamá quiere a Jake como su propio hijo ya que él prácticamente a vivido desde siempre junto a nosotros y nuestros padres son los mejor amigos de los suyos.

Jake se acercó a mamá y la abrazo.

Al separarse, saludo a papá con un apretón de manos.

Nathan y él ayudaron a entrar las maletas y luego mamá y papá entraron.

-Vamos a comer. -dije acercándome a la mesa.

Todos nos acercamos a la mesa y nos sentamos a comer.

Papá sirvió el plato de todos y por último el suyo.

-Esto esta riquisimo. -dijo probando el pollo.

-Tía ¿sabes cuando vuelven mis padres?- pregunto Jake a mi madre.

-Los siento pero no tengo la menor idea. -dijo mi madre para luego llevarse un pesado de papa a la boca.

Jake asintió un poco desilusionado.

(...)

Al terminar de comer mamá y papá fueron a dormir pues estaban muy cansados.

Nathan busco a Blue y aquí estabamos Jake y yo jugando con la pequeña Blue, en mi habitación, antes de que él se fuera.

Jake miro la hora y vio que eran las 7:30pm así que miro a Blue quien bostezaba.

-Bueno enana, ya es hora. -dijo tomándola en sus brazos.

-¿A donde la llevas?- pregunté confundida.

-Necesito que se duerma para que cuando llegue se acueste rápido. -explico saliendo de mi habitación.

Me levanté de el suelo y decidí darme una ducha de agua caliente de esos largos.

Cuando salí, me coloque una camisa de pijama larga, negra, que me cubría los muslos y unos shorts, negros también, los que se cubrían gracias a la camisa.

Me tiré sobre mi cama y al minuto oigo alguien abrir mi puerta.

Me quedé igual ya que sabía que se trataba de Jake quien se tiró a mi lado.

-Voy a extrañar no poder venir aquí cuando quiera. -dijo creo que volteando hacia mi.

Voltee hacía él y lo bese.

-¿Quieres que te pase a buscar mañana para ir al colegio?- pregunto tomando mi cintura.

-Gracias pero no, no quiero que sea muy obvio, puedo irme con Nathan. -dije sonriendo.

Jake me acerco a él y depósito un corto beso en mis labios.

-¿Cuando le diremos a Nathan?- sus palabras me dejaron atónita.

-Yo... Yo no lo se. -dije tartamudeando.

-Tenemos que decirle tarde o temprano. -dijo a lo que asentí.

Iba a decir algo pero mis palabras fueron interrumpidas por el celular de Jake que estaba soñando.

-Los siento. -dijo y tomó el celular.

Salió de mi habitación al tomarlo.

Luego de unos minutos Jake volvió a entrar.

-¿Quien era?- pregunté al ver su cara, no se veía tan feliz.

-Mamá. -dijo sentándose a mi lado.

-¿Y porque tienes esa cara?- me levanté y me senté como indio a su lado.

-No lo se, no me siento bien. -dijo apoyando su cabeza en mis piernas.

-¿Que te pasa?- pregunté colocando mi mano en su cabello.

-No lo se, me duele la cabeza. -dijo apagado.

-¿Quieres alguna pastilla?- pregunté colocando mi cabeza encima de la suya.

-No, estoy bien. Gracias. -no me gusta verlo así. -Mamá dijo que vienen mañana. -hizo una pausa. -Y quiere que lleve al estúpido ese a la casa para que esté con ellos. -¿de quien habla?

-¿De quien hablas?- pregunté confundida.

-Alex. -escupió como si fuera veneno saliendo de su boca.

-Jake. - dije levantando mi cabeza y mirándolo.

No es justo que lo llame así, sin saber cómo él se siente.

-No vallas a defenderlo. -dijo levantando su cabeza también.

-No lo defiendo, es sólo que no sabes cómo el se siente. -Jake me miro incrédulo.

-¿Y tu si?- pregunto molesto.

-Si, si lo se y me molesta que lo trates así. Jake, él se siente rechazado, no tiene a nadie y no es justo. -dije cruzándome de brazos.

-Alice no te metas en esto. -dijo levantándose.

-Si lo voy a hacer porque él es mi amigo y no es justo que viva con tanto dolor. -Jake cada vez me miraba mas enojado.

-Alice... -dijo apretando sus puños.

-¡No! ¡Callate y escuchame!- hice una pausa respirando. -¡Él te ama Jake! ¡Eres su hermano! ¡Por Dios!- los ojos de Jake se volvieron cristalinos. -¡Él no tiene la culpa de que tus padres ya no se soporten! ¡Por Dios, Jake!- me detuve para poder respirar.

Una lágrima cayó por la mejilla de Jake y no pude contenerme.

Me levanté y lo abrace lo mas fuerte que pude.

Jake enterró su cabeza en mi pecho y me abrazo también.

Lágrimas salían de mis ojos y no sabía ni siquiera el porque.

Unos minutos después me separé de él y lo mire.

-Jake. -dije captando su atención. -Pídele perdón. -hice una pausa. -Hazlo por mi. -Jake me miro y luego estampó sus labios contra los míos.

-Los siento. -dijo juntando nuestras frentes.

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Aquí se lo dejo.

Besos, las quiero.

My Brother's Best Friend (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora