Capítulo 15

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Ha pasado dos semanas desde que Alex descubrió mi verdad, mi secreto pense que solo estaba conmigo por lastima y pena pero simplemente el no se aleja de mi, cuida de mi. Quizás no me quiere como yo a él pero el poco de cariño que me da lo recibo con mucho gusto, después que dijo que éramos novios (obvio de mentira, solo para aparentar) todos los días me va a buscar a mi casa a veces pasa unos minutos dentro de casa o lo invitó a comer y intentamos aparentar ser una pareja normal, mi madre anda feliz ya que no me ando metiendo en su relación, David el se  alejo completamente de mi, no cruza palabra conmigo, siempre que estamos en el mismo lugar siento su mirada puesta en mi.
Ya no intenta ir a mi habitación y  de todo eso estoy muy agradecida con Alex.

Desde que desperté sentí esa necesidad de huir pero ignore eso, después cuando llegue al trabajo hice a un lado ese sentimiento y me olvidé de ello.

Me despido de todos mis compañeros; son las nueve de la noche ya es hora de la salida. Tomo mi mochila y salgo de la tienda. Hoy Alex no me hará compañía ya que el tiene que hacer unas llamadas al jefe.
Camino con paso lento, no quiero ni llegar a casa.
Siento nuevamente esa extraña necesidad de salir corriendo; tengo un mal presentimiento.
Observó a mi alrededor y me percato que hay una auto, café oscuro con vidrios polarizados ese auto a estado allí desde la mañana y a penas me doy cuenta de eso. Lo extraño de todo es que dentro esta alguien, la luz de la luna hace reflejo y dentro del auto se ve una persona.
Intento caminar un poco más rápido, el auto es encendido y me llenó de temor, soy la única persona que anda por la maldita calle con manos temblorosas tomo mi celular.

–Que sucede, Beatríz– la voz de Alex me hace calmarme.

–Alex, creo que me estan siguiendo– dejo escapar un sollozo cuando escucho el auto detrás de mi.

–Como que te siguen, ¿donde estás? - escucho como se sube a un auto y este hace el ruido del motor, acelerando.

–Estoy por llegar a la cafetería Intense– suelto otro sollozo, el carro ahora está a lado mío.

–Mierda– es lo último que escucho decir de Álex ya que yo me atreví a correr lo más rápido que puedo, mi vista está nublada y ruego por escapar de todo esto..

Todo pasa tan rápido escucho como acelera el auto que me sigue pero segundos después escucho otro auto mucho más potente que el primero. Por un instante me puse a pensar  y como es que mi vida quede aqui, tengo tanto miedo dos contra una ¿que podía hacer?, sólo ponerme a llorar.

El primer auto va atrás de mi; mientras que el segundo acelera y me alcanza dejo de corre se interpone en mi camino dejándome encerrada veo como abren la puerta rápidamente y me jalan dentro.

Empiezo a moverme, gritar como loca, no quiero mirar quién es el que me ha capturado. Sigo luchando.

–Beatríz, soy yo Alex, por favor mirame estoy aquí, tranquila – me toma de la mano y empieza besarla mientras acelera.

–Alex– siento un gran alivio al verlo.

–Pequeña, todo estará bien– me sonrie tratando de tranquilizarme pero su mirada está llena de preocupación.

–Alex, aún nos siguen.

Mira al retrovisor y me regala una sonrisa que me intimida hasta la medula..

–Vamos a jugar– lo miro aturdida, esta loco se pondrá a jugar carreras, tomo el cinturón de seguridad y cierro los ojos.

Veo como Alex, acelera al pequeño auto (noten mi sarcasmo), que trae y me doy cuenta que es un Mercedes y este da vida cada vez que acelera.
Me empiezo hacer preguntas ¿como Alex tiene semejante auto?, ¿como es que siempre anda caminando? y la ropa que trae no es para nada barata, su celular es tan impresionante que el mio se queda atrás hasta ahora me doy cuenta que Alex se ve demasiado rico para que trabaje en una simple tienda.
Salgo de mis preguntas sin contestar cuando el auto que nos persigue esta justamente a lado de nosotros Alex tira maldiciones y acelera, da vuelta en la curva y entra aún callejón este se dirige a otra calle y pasa otra curva el auto está ahora atras de nosotros, Alex acelera mas y se mete debajo de un puente, nos quedamos unos segundos dentro de la oscuridad escuchamos el chirrido de un auto acelerar lejos de nosotros. Nos ha perdido es donde Alex vuelve acelerar y salimos de ese puente para entrar a un camino de terracería este camino se dirige a un enorme portón están se abren una vez que el auto este a frente a estas. Entramos y seguimos el camino que una lámparas iluminan,  es de noche así que no distingo el lugar en el que estamos, el auto para y es cuando dirigí mi vista al frente una enorme casa, con grandes arbustos alrededor de esta, una puerta de madera brillante a la luz de la luna nos da la bienvenida.
Cuando Alex baja del auto yo lo hago. Alex saca unas llaves de su bolsillo y la introduce en la cerradura esta se abre y Alex me toma de la mano para entrar dentro de esa enorme casa o mansión.
Cuando estamos adentro lo que veo es la cosa mas hermosa que he visto en una casa; esta bien iluminada con ventanales grandes, su sala simple vista se ve que es de los más rústica puedo distinguir aún lado lo que es la cocina y comedor, al fondo se ven más puertas que no tengo ni la menos idea que es lo que haya dentro. Es demasiado grande para una sola persona ¿como Alex puede tener todo esto?

Me sacan de mis pensamientos cuando Alex toma la llaves y las avienta en la mesita que se encuentra en la sala estas hacen un sonido al caer y pego un brinco, se pasa las manos por las cara y luego en el cabello, me mira con una mirada oscura.

Mierda, en donde me he metido.

Con esa mirada que Alex me da me doy cuenta que desconozco a este Alex, el no es quien creía que era y lo peor de todo es que ya no quiero saber su secreto aunque se que ya es demasiado tarde.

Mi jefe Donde viven las historias. Descúbrelo ahora