Capítulo 3

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 Me senté alado de Sango, mi nueva amiga, quien estaba escribiendo en su cuaderno los últimos apuntes de la anterior clase. Desde ayer, los alumnos de la maldita escuela, me miraban demasiado y aunque eso me incomodaba y hasta me daba miedo, trataba de verme segura.

-¿Estas bien, Kagome?—Me pregunto Sango, quien ya había terminado de apuntar todo.

-Todo genial, descartando que todos me miran desde ayer. —Le dije con enojo. No me gustaba la nueva moda de los locos.

Mi amiga rio pero no dijo nada, agarro sus cosas y me indico que era la hora del almuerzo. Entramos al gran comedor que la escuela nos ofrecía, todos tenían su almuerzo del día, pero aun así no apartaban su mirada. Sango noto mi incomodidad, me agarro del brazo y me llevo directo con su novio Miroku, él era el único que no me observaba como un acosador. Nos saludó y nos invitó a sentarnos, alado de él estaba su amigo Koga.

-Parece que eres toda una estrella, Kagome. —Me dijo con una sonrisa Koga. Yo me sonroje de inmediato.

-Es gracias a su amigo Inuyasha y los retrasados de mi salón. —Le dije con una sonrisa en mi rostro, él me devolvió la sonrisa.

-O tan solo están sorprendidos de tu gran personalidad.

Comencé a reír y así es como todo el almuerzo Koga y yo platicamos sobre los idiotas. Termino el descanso y con tristeza me despedí de Koga, él era mayor que yo, así que estaba en otra clase.

Sango me agarro del brazo y nos dirigimos a nuestro salón. Al entrar todas las miradas se pusieron en mí, nada extraño, pero esta vez no eran discretos como solían hacerlo.

-¿Qué pasa aquí?—Me pregunto Sango. Era lo que también me preguntaba ¿Qué rayos pasaba aquí?

Nos acercamos a nuestros asientos, estaban llenos de chicas alrededor de alguien, suspire y comencé a apartar a las chicas. Pero cuando llegue a mi destino, ahí sentado como si fuera el rey de la escuela se encontraba Inuyasha Taisho.

-Taisho. —Pronuncie con enojo y él lo noto.

-Chica que insulta aun cuando le salvan el trasero.

-Pensé que eras mayor que yo... Así nunca tendría que verte de nuevo. —Le dije mirándolo a los ojos y eso hizo molestar a los demás.

-También pensé lo mismo, pero desgraciadamente me llego un rumor. —Me dijo con indiferencia.

Suspire y le di una sonrisa.

-Bien, ¿Qué rumor?

-Sobre nosotros. —Todos miraban con atención cada movimiento de nosotros.

-¿Sobre?—Trate de sonar calmada, pero por dentro me moría de nervios.

-Sobre que eres mi nueva amante, novia, con la que me acuesto, etc.

Uggg no, esto no debe estar pasándome.

Inuyasha miro a mis compañeros y con tan solo una señal los hizo salir del aula, era claro quien mandaba aquí.

-Esto no lo quería decir enfrente de ellos. —Me dijo, tomo una respiración y me miro de nuevo. —Mis amigos piensan que debo llevarte a nuestra casa.

¿Amigos? Pensé que no tenía amigos, bueno aparte de Miroku... Espera, ¿¡LLEVARME A SU CASA!?, no, esperen, tal vez escuche mal y estaba en una pesadilla.

Negué con la cabeza, Inuyasha sonrió pero no tenía aquella luz de diversión en sus ojos. Me aleje de él, sus ojos miel me miraban, vacile un poco pero pude escabullirme a la puerta.

-¿Dónde vas?—Me pregunto con diversión, era un idiota.

Solté el aire que estaba reteniendo desde hace unos segundos.

Yes or no?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora