Capítulo 14

974 85 14
                                    

 Mi cuerpo se encontraba en el piso y algunas ramas en mi cabello. No tenía ni idea de cómo había llegado a la casa de los chicos y tampoco como ellos se reían de mi por haberme caído en su patio a la mitad del camino, pero aun así me reí junto con ellos.

-¿Estas bien Kagome?—Me pregunto Sesshomaru, su mano se extendió y me ayudo a levantarme.

Cada uno de ellos se comenzaron a reír más y Koga fue el que me quito las ramas de mi cabello, Bankotsu me insulto por ser tan tonta para haberme caído pero su rostro estaba aliviada, Miroku me aseguro un café delicioso para despertarme y me mostro su hermosa sonrisa. Pero ninguno menciono nada sobre Inuyasha y eso me hizo más fáciles las cosas.

-Me he encontrado con Inuyasha. —Me dijo Koga, sus ojos se me quedaron viendo, pero sabía que me apoyaba en todos los sentidos.

-¿Qué tiene que ver conmigo?—Dije con frialdad, lo que sorprendió a Koga.

-Me conto sobre lo de tu cuarto, después de que te deje en tu casa. —Su voz se hizo más fuerte, pero no paro de contarme más sobre el encuentro de Inuyasha. —Me ha dicho que te contara sobre la historia de él y kikyo. Después de que leyeras esta carta. —Me dio una hoja doblada que tenía escrito mi nombre.

"Es necesario que sepas desde un principio como se conocieron Kikyo e Inuyasha, también creo que debes saber por qué Inuyasha se quedó completamente enamorado de ella. La verdad sobre todo esto es que Inuyasha estaba emocionalmente dañado de muchas formas, hasta el punto de quererse matarse ¿Por qué? Bueno un adolecente que ha sido pisoteado muchas veces, tanto como su hermano mayor que amo, como la chica que hubiera dado la vida por ella, cuando no ves que alguien vendrá a tu ayuda, piensas ¡Oh! ¿Para qué vivir? Hace dos años Inuyasha, se enamoró de una chica de nuestra aula y como solía ser tímido y nada respetado en nuestra escuela, no podía confesarle su amor a aquella chica. Hasta que un día, ella le hablo con naturalidad y comenzaron a salir juntos, si la vida era hermosa pero también las envidias de las personas se hacían más grandes que nada. El 2 de julio, Inuyasha encontró a su amada teniendo relaciones sexuales con alguien más, bueno esa otra persona era Sesshomaru."

-Espera ¿Qué?—Lo interrumpí en la mitad del relato— ¿Cómo es posible que Sesshomaru fue capaz?—No lo podía creer, menos cuando ha sido tan amable conmigo.

-Aunque no lo creas, Sesshomaru le hacia la vida imposible a Inuyasha. No puedo creer que en el presente se dirijan la palabra. —Dijo Koga, al ver sus manos pude notar que cerro los puños, al parecer a él también le dolía contármelo. —Seguimos.

"Al descubrirlo, Inuyasha se volvió lo que ahora es, o como lo recuerdan. Comenzó a meterse en peleas sin sentido y aunque siempre salía victorioso, cada noche se le oí llorar. Cada día era una chica diferente, tenían relaciones y al día siguiente las botaba como si fueran basura, comenzó a fumar y amenazar a la gente. Desde aquellos días todos le tomaron "respeto", le cumplían cada orden que pedía y con cuidado que no lo hicieras, todos se iban en tu contra. Por eso al convertirte en su novia todos se olvidaron de sus reglas y comenzaron a respetarte. A los 2 meses una maestra preocupada por él, comenzó a acercarse para poder evitar que se metiera en más paleas o se intentara suicidar. Así es Kikyo era la maestra que se acercó a él, no puedo saber muchos los detalles, pero comenzaron una relación que duro lo suficiente para que Inuyasha quisiera vivir lo suficiente y cuando lo dejo, se prometió esperarla. Lo motivo seguir vivo."

Koga suspiro. —Por eso Inuyasha cree que le debe la vida, o más bien no sabe cómo pagar su deuda. Kagome, si no puede soltarse de la mano de Kikyo ahora, nunca lo podrá hacer.

Me quede callada, en cierto punto tenía razón, si ahora no la dejaba jamás en su vida lo lograría. Le agradecí y me despide de los chicos para irme a mi casa, necesitaba tiempo a solas para poder procesar toda la información que apenas me habían dado.

Al llegar, lo primero que hice fue subirme rápido a mi cuarto y abrir la carta que Inuyasha me dejo con Koga. Mi corazón comenzó a latir rápido y mis manos temblorosas agarraron bien el papel para que no cayera.

"Querida Kagome.

Te he decido escribir una carta, por el hecho de que me bloqueaste de Facebook y otras cosas más, bueno me lo merezco, al parecer eres igual que las otras personas que al pensar que al hacerlo me has borrado de tu vida y de tu corazón, pero déjame decirte algo, no es así, apuesto que todavía sigues suspirando por mí y me extrañas en estos momentos. Nunca quise que te sintieras usada o la segunda opción, no lo eres. Creo que ahora en adelante puedo ver hacia el futuro, Kikyo me ha dicho que se comprometió con alguien más es chistoso ¿no? Cuando decidí que no podía olvidarla y hasta dejaría a mi nuevo amor, ella me ha dicho que no me ama y se casara con alguien más ¿karma? Tal vez.

Kagome al leer esto, podrás notar que mis sentimientos son sinceros y que mis disculpas igual, pero ahora yo no puedo verte. No merezco verte, ni siquiera oírte, por esa causa he roto mi celular con el fin de no hablarte y arrepentirme de la decisión que he tomado.

Gracias por todo, he decidido que debo ser un mejor hombre para que un día me aceptes de nuevo.

Con amor Inuyasha."

Solté la carta y salí corriendo de mi casa. Inuyasha estaba dispuesto a irse para convertirse en alguien mejor por mí, pero no estaba segura que yo estaba dispuesta a dejarlo ir. Tome el primer taxi que vi y le indique que me llevara a la estación de camiones, si todavía estaba a tiempo lo podía ver una vez más, y si lo lograba, le iba ir muy caro.

Baje del taxi, pensé primero a donde iría Inuyasha, pero obvio era que la sala de espera estaría. Le agradecí al señor y fui a preguntar dónde quedaba la sala, la mujer que vendía los boletos me dijo que solo los que tenían boletos podían entrar, suspire, le indique que me diera el boleto más barato que tuviera. Me apresure a ir a la sala, le entregue mi boleto al guardia que se encontraba e inmediato comencé a buscarlo.

-¿Disculpe?—Le dije a unos ancianos que se encontraban sentados. — ¿Han visto a un muchacho alto, de cabellos plateados y ojos miel?

-Oh el joven amable, fue al baño. ¿Su cabello es realmente así?—Me sonrió igual que su esposo, les devolvió la sonrisa, les agradecí y fui a los baños.

Le pregunte lo mismo al guardia de los baños, lo que me respondió que se encontraba adentro. Al querer meterme a la fuerza, reconocí un perfume que paso a mi lado, al voltear pude ver los ojos miel que tanto amaba mirándome una vez más.

-¿Kagome?—Pregunto Inuyasha, al notar su rostro, podías decir que estaba muy sorprendido.

-Oh, hola Inuyasha. —Me zafe del brazo del guardia. —Sabes podías hablarme hablado en persona. Tonto. —Me lance a él, correspondía y me dio un gran abrazo. —No vuelvas a irte.

-Perdón.

Me beso.


Yes or no?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora