Él & Ella | Z.M. (Editando)

UNO

ÉL

- Tranquilo amigo. Toma un cigarrillo -dijo mi amigo Harry.

Le arrebaté el cigarro de sus manos. Louis extendió en su mano un encendedor, también se lo arrebaté.

- ¿Qué pasa contigo, Zayn?. Has tenido un genio desde hace semanas - dice Louis.

Enciendo el cigarro y le regreso el encendedor.

- Ya sé lo que le pasa...- dijo Harry. Lo fulminé con la mirada.

- Entonces habla, Styles - dije.

- ¿Acaso no es obvio?

- No para mí - digo.

Harry y Louis intercambiaban miradas.

- Hablen con un demonio - me estaban desesperando.

- No ha tenido a una chica en su cama, por eso esta así. Con un genio que ni él mismo se soporta - dijo el chico de pelo rizado, Harry.

Pongo los ojos en blanco.- ¿O vas a decir que no? - se cruza de brazos y levanta una ceja.

Tal vez tenga razón, no me he acostado con nadie últimamente.

Hace semanas.

Con las chicas que he estado solo paso una noche con ellas y adiós. Sí, me vuelven a buscar pero trato de dejarles en claro que no me interesan mas que solo pasar una noche con ellas, aunque les duela. Pero no creo que ese sea el problema que esté en mi.

Chupé otra vez el cigarro y sonreí.

- ¿Ahora qué pasa? -pregunta Louis.

- Sí, tienen razón. Me hace falta una muy buena... - dije. Pero era para que se callaran los dos de una buena vez.

- Yo te la busco -dice Harry sacando su celular. Me pongo de pie y tiro el cigarro. Le quito el celular. - Hey, hey... Dámelo.

- Yo puedo buscármelas solo.

- Está bien, está bien. Como quieras - me quita su celular y lo guarda en sus jeans negros.

- Miren... - nos dice Louis a ambos. Los dos giramos para ver detrás de nosotros.

Iba un chico por la banqueta a estas horas de la noche. Iba solo.

Y claro, se veía que tenia dinero.

- Es mío... - digo.

- Hey, amigo, yo lo vi primero. - dice Louis.

- Déjamelo a mí -le guiño un ojo.

Atravieso la calle y voy a unos cuantos pasos detrás del chico.

Con mucho cuidado saco mi navaja de mi chaqueta de cuero negra. Me aproximo mas a ese chico.

Le llego por detrás, con mi brazo derecho le rodeo el cuello y con la izquierda en donde llevo la navaja la pongo en su cuello.

Siento como se pone nervioso.

- No te voy a hacer daño. Así que saca todo.

-S-sí...- dice. Le tiembla la voz.

Sonrío torcidamente.

Lo suelto por un momento en frente de mi, veo que nadie venga y pues claro que no es así, son las doce de la media noche.

Extiende su celular moderno, unos cuantos billetes de sus jeans.

¿Acaso me ve que soy un estúpido?

Lo acorralo contra la pared, mi ante brazo apretándole el cuello.

Tiene las manos levantadas.

Con mi mano izquierda me pongo a buscar en sus bolsillos de sus pantalones costosos. Pongo la navaja en mi boca, mordiéndola con mis dientes.

Encuentro su billetera.

Me acerco a su oído.

- Gracias por cooperar - le sonrío por última vez, lo suelto y salgo corriendo.

Escucho que me grita algo, no lo escucho bien.

* * *

- Éste chico sí que traía dinero - Harry sacaba los billetes de la cartera.

Nos encontrábamos en nuestra pequeña casa.

- ¿Quien lleva mas de mil euros en efectivo en su cartera?

- Hubieran visto su atuendo - les digo mientras apago mi cigarrillo. Me siento a un lado de Louis.

- ¿Nos vamos a repartir?

-Si quieren... - subo mis hombros.

- Oigan, el celular está sonando - Louis me pasa el celular.

En la pantalla se ve una foto de una chica.

Pelo en un tono semi castaño, ojos azules casi iguales a los de Louis. Estaba sonriendo, muy hermosa su sonrisa. Iba maquillada en tonos naturales, sus labios en un tono rosado.

Y decía "Anne llamando", muy bonito nombre de esa chica.

El celular no dejaba de sonar.

- ¿Qué tanto ves? - pregunta Louis quitándome el celular de las manos.- Wow - levantó las cejas, que casi podían tocar el techo.

- Déjame ver -dice Harry. Le quita celular.- Vaya, ésta chica no está mal.

- Tranquilos, chicos... - Le quito el celular.

- Una de esas te hace falta para coger, amigo - dice Louis. Y Harry ríe.

Ruedo los ojos. Como joden estos dos.

Lo asesino con una mirada y deja de reír.

- Mejor me voy a dormir - tiro el celular en la mesa y voy a mi habitación

- Necesitamos a una mujer urgente para éste hombre - comenta Louis.

- Y muy urgente. - agrega Harry.

Doy un portazo, me aviento a mi cama quedando boca arriba. Tapo mis ojos con mis manos. Suelto un gran suspiro.

Me siento en la cama y me quito la chaqueta de cuero.

Siento que me saque la lotería al haber asaltado a ese tipo, mil euros, nunca me había tocado algo así.

* * *

- ¡Harry! ¡Harry! - tocaba a su puerta.

No puede ser posible que se escuchen sus gritos de él y quien sea que este ahí cogiéndolo.-¡Maldita sea, guarden un poco de silencio!

Veo que Louis sale de su cuarto.

- Están así desde las dos de la mañana.

- ¿Qué hora es?- pregunto.

- Casi son las cinco.

- Maldita sea - pateo la puerta y me voy a mi cuarto.

Me acuesto en mi cama y pongo la almohada en mi cara.

Cuando por fin los gritos sesaron un poco me acosté bien en mi cama.

Cerré mis ojos y caí en un profundo sueño.