Él & Ella | Z.M. (Editando)

DIECISEIS

ELLA

- Pensé que te quedarías a dormir con Louis.
Le digo a Florence mientras me levanto del sofá, me quedé dormida toda la noche ahí y no me di cuenta.
- Le dije que no.
- ¿Por qué?.
- Por ti.
- ¿Por mi?.
- Sí, ve como estas amiga.- se sienta a un lado de mi. Y la miro algo confundida - ¿Es por Niall?.
- Supongo - subo mis hombros. Pero no me siento tan triste por él.
- Hace una semana que se fue y no te he visto salir de aqui.
- Estoy bien, se me pasara.
- Eso espero amiga.
- Ya veras que si.
- ¿Y por qué te quedaste a dormir aqui en el sofá?.
- La verdad es que no se.
- Zayn vino, ¿verdad?.
- Sí, ¿por qué?. - aparece una mirada rara en ella. 
- Me cae muy bien Zayn - dice. No se a que viene ese comentario de su parte.
- Pues, es un chico... genial - le digo.
- Sí, y Louis me ha dicho que Zayn se preocupa por ti. - Frunzo las cejas.
- ¿Cómo?.
- Sí, Anne. A Zayn le preocupas, se ha encariñado mucho contigo, solo que Louis me ha dicho que él no lo ha aceptado, no quiere aceptar que se preocupa por ti. - veo que sube sus dos hombros.
- ¿Y por qué me dices esto?.
- Solamente quería que lo supieras.
- Tú estas tramando algo. - muevo mi dedo indice.
Sube sus hombros.
- No quiero que intentes nada, ¿si?. - le digo.
- No estoy haciendo nada.
- Eso espero.
- Zayn no es de esos chicos que no soportas, Anne.
- ¿Cómo cuales?. - cruzo mis brazos en mi pecho.
- De esos chicos que piensas que son malos y criminales, tal vez Zayn parezca eso, pero Louis me ha dicho que no son criminales ni nada de eso.
- Apuestan en carreras de motocicletas.- le reclamo.
- No tiene nada de malo.
Ruedo los ojos.
- Yo sé que Zayn te cae bien y también le haz tomado cariño.
- Puede ser.
- Aceptalo.
- Sí, acepto que le tomé cariño, pero hasta allí. Y si piensas "juntarme" con él o lo que sea, ni lo intentes, por favor.
- Está bien.
- Además, estoy con Niall.
- ¿Y eso qué?. Aún no le has dicho que si te vas a casar con él o no.
- No, pero...
- Está bien, te dejaré. Yo solo te diré por última vez. Quizá sí extrañes a Niall, pero no creo que lo ames tanto como para casarte con él, al menos te dió tiempo de pensarlo. Y creo que deberías de pensarlo de una vez si quieres pasar el resto de tu vida junto a él.
- Y creeme que lo aré. Y sí lo amo.
- No lo suficiente. Las veces que te he visto con él no hay nada en tu mirada.
- Pero sí lo amo.
- Anne...- pone una mano en mi hombro.- Creo que estas confundiendo el amor con el cariño. Suele pasar.
- Yo estoy segura de mis sentimientos. Parece que no me conocieras, Florence - me pongo de pie muy enojada y ella hace lo mismo.
- Te conozco muy bien Anne.
- No lo parece.
- ¿A dónde vas?- me pregunta.
- A mi habitación. Tengo que ir a trabajar - suelto un gran portazo.
No puedo creer que me haya dicho eso Florence, en verdad parece que no me conociera. Si ella en verdad me conociera, supiera lo que siento por Niall.

      * * *

Estoy sentada en frente de mi escritorio. Son las seis de la tarde y sigo trabajando. Me han dejado que diseñara la sala-comedor de una casa muy grande, yo solo daría ideas mas bien y ya las tengo listas, en unos minutos más tendremos una reunión para juntar las ideas en general de todo el equipo. En verdad espero poder abrir mi propia compañia de diseño de interiores. Solo tengo que esperar un poco más.

*

Las ideas de los demás eran buenas, me gustó lo que dijo Louisa - compañera de trabajo-, sus ideas son buenas en verdad. Y creo que la mía quedaría en las peores o quizá ni la tomen en cuenta.
- Señorita, Underwood - dice Charlie, el jefe.
Trago saliva y me pongo de pie, todas las miradas se dirijen a mi.
- Leí la idea que tiene la pareja Mikesmall, y me inspiré más o menos en eso. Sería entre un estilo clásico y moderno. El comedor sería de madera...- Louisa había dicho que la mesa podría ser de metal las patas y el vidrio como mesa.- y las sillas de igual forma serían se madera. Tomé algunas muestras.- Le extendí un trozo de madera a Charlie.- Los sillones de la sala podrían ser color vino - también le extendí el diseño que hice de los sillones.- Y estos serían el resto de los muebles. Asi como una mesa de centro para la sala, un pequeño librero. Los detalles serían cuadros o fotografías de la familia.. también se me ocurrió que...
- Solo era una pequeña idea, Underwood, no era todo el diseño - me interrumpe Louisa cuando estoy a punto de entregarle el diseño completo a Charlie.
- No, dejala que termine Louisa.
- No señor Lewis, ella tiene razon, me emocioné con esto. - acepto algo apenada.
- ¿Segura? - se dirije a mi y yo asiento. - Bien - se pone de pie y me entrega las cosas. Me siento en mi lugar. - La idea de todos me han gustado, en este caso me han gustado mas las ideas de la señorita Edwards..- que es Louisa. -... y la señorita Underwood.
Esperen, a Charlie le ha gustado mi idea. Sonrío von victoria pero Louisa me fulmina con la mirada.

      * * *

  Oigo que tocan a mi puerta que es la de mi oficina, le digo que pase y Louisa aparece.
- Hola, Underwood.
- Hola. - contesto.
Dejo de dibujar los diseños que estoy haciendo para ponerle atencion. Se sienta en frente de mi.
- Tus ideas son buenas. - dice.
- Ammm... Gracias. -  mi respuesta sonó como pregunta.
- Pero... No voy a dejar que una mocosa como tu...- ¿acaso cree que tengo 18 años?.-... arruine la confianza que tengo con Charlie. El ama mis diseños, y solo dijo que le gustaban tus diseños por lástima.
¿Qué se cree?, no puede venir a mi oficina y hablarme asi.
- Asi que... mejor vete por donde veniste, porque aqui sobras.
- Te pediré que te retires, Louisa.
Me pongo de pie y apunto la puerta. Se pone de pie sin dejarme de ver.
- Como sea, yo sé que terminaras por irte de aqui, asi les pasa a todas - me guiña el ojo y sale por la puerta.
Maldita, nunca pensé que ella fuera asi, entonces se comportaba como toda una hipocrita conmigo cuando empecé, es una maldita.

      * * *

Me despido de Angelica, la chica que esta en la entrada, atendiendo llamadas y citas.
Bajo el acensor a planta baja y salgo del edificio.
Siempre salgo a las siete, pero hoy salí a las nueve y veinte.
Levanto mi vista y veo a Zayn recargado en su carro negro fumando un cigarro, ruedo los ojos y en cuanto me ve lo tira y lo pisa.
- Lo lamento, pensé que tardarías más. - Suelta el humo a un lado.
- No importa - me di la vuelta y  comencé a caminar.
- Hey, ¿pasa algo? - me jala del brazo y quedo en frente de él.- ¿Qué tienes?.
- Es que...- bajo la mirada. Suspiro.- No pasa nada, no es nada importante.
- ¿Segura?, sabes que puedes contarme lo que sea.
- Lo sé, no me pasa nada, en verdad. - Trato de convencerlo.
- ¿Quieres qué te lleve?.
Tuvo la molestía de venir hasta aqui por mi y decirle que no sería de mala educacion. Asiento con la cabeza y sonríe.
Se pone a lado de mi y pone su mano izquierda en mi espalda baja, y me estremezco. Pongo mi cabeza en su hombro mientras nos guía a su coche.

- ¿Te gusta ese trabajo? - me pregunta Zayn sin quitar la vista de la calle en la que maneja.
- Sí, no aporto todas las ideas, pero es algo que me gusta.
- Me parece bien, mientras te sientas comoda y te gusta lo que haces está bien. Pero, ¿aún quieres abrir tu propia compañia de diseño?.
- Sí, y en cuanto pueda la abriré, solo es cuestion de esperar.
- Claro que podras, y más rápido de lo que tú piensas. Porque cuando te propones a hacer algo siempre lo haces.
Me voltea a ver, nos detubimos en un semaforo en rojo.
- ¿Y tú no haces lo que te propones? - le pregunto.
- Sí, pero... Hay cosas que no las logro hacer.
- Por ejemplo...
Se queda pensando y luego me responde.
- Son varias cosas.
Asiento.
- ¿Te digo algo?. - veo que se muerde el labio inferior.
- Dime - le digo.
- Solo te diré a lo que siempre me he propuesto a hacer.
- Te escucho.
- Siempre me a gustado dibujar...- vaya, no esperaba eso de él.-...no te lo había dicho, por miedo. Solo Louis, Harry y ahora tú lo saben.
- ¿Y qué dibujas?.
- Muchas cosas. No me vayas a regañar...
- ¿Por qué?.
- Hago murales en las calles.
- ¿Haces grafitis?.
- Más que eso, hago murales. Louis y Harry a veces me ayudan. Los hago de lo que siento, pero hace mucho que no he hecho uno, pero nunca he dejado de dibujar. Y de niño he querido ser un famoso pintor. Uno muy reconocido. No creo lograrlo porque mis dibujos no son tan buenos.
El semaforo se pone en verde y arranca.
- Pues debes de enseñarme tus dibujos.
- ¿Quieres verlos?.
- Claro.
- Está bien.
Y gira bruscamente en una esquina, haciendo que me recargara en la puerta.
- ¿Adónde vamos? - le pregunto.
- Iremos a mi casa.
- ¿A que?.
- A enseñarte mis dibujos.
- Tengo que trabajar.
- Entras en la tarde.
- A la una.
- Mmmm... te quedaras a dormir conmigo.
- Estás loco - le digo y me voltea a ver.
Está hablando en serio.

° ~ ° ~ ° ~ ° ~ ° ~

que lendos *-*

mmm.. al menos comenten de donde son o algo :(

siento que no les gusta mi fanfic :/

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