Él & Ella | Z.M. (Editando)

DOS

ELLA

- Niall no me contesta, Florence - le digo a mi amiga. Me muevo de un lado a otro en la sala con mi celular en la mano.

- A lo mejor ya está dormido, Anne - me dice.

- ¿Pero por qué no me llamó cuando llegó a su casa?.

- Tal vez estaba cansado - se encoge en hombros.

Vuelvo a marcar a su celular y me manda al buzón. Maldigo por lo bajo.

- Mejor ve a dormir, ya es tarde.

- Solo quiero saber si él está bien.

- Bien, yo me iré a dormir.- Me da un beso en la frente.- Descansa.

Asiento y se va a su cuarto.

Me siento en el sofá con las piernas cruzadas en el.

¿Le abra pasado algo?. Ojalá no.

El teléfono de la casa suena y contesto lo más rápido posible.

- ¿Si?... ¡Niall!, me alegro de que estes bien...¿por qué no contestas tu celular?...¿Qué? ¿En donde te asaltaron?... Pero estas bien ¿verdad?... Me alegro... No había ido a dormir porque quería saber que estuvieras bien... Me preocupo por ti... Está bien, iré a dormir... También descansa... También te amo.- Lo dije en susurro. Colgué el teléfono y me fui a mi habitación.

Me meté entre las sabanas e iba cerrando poco a poco los ojos hasta ir a la deriva.

       * * *

- Me alegro de que no te hayan hecho algo malo - tomé su mano y la apreté.

- Tranquila, estoy bien - acaricia mi cabello y me besa la frente.

Lo abrazo mas fuerte.

- Ten mas cuidado la próxima vez, y no andes a esas horas por la calle.

- Sí, mamá - dice Niall poniendo los ojos en blanco y sonriendo de oreja a oreja.

- Oye... No me pongas los ojos en blanco - le digo divertidamente. Le golpeo el hombro levemente, haciendo que él retrocediera.

- Bien bien... ¿Quieres una malteada?

- Mmmm... Sí.

Sonrío y pasa su brazo por mis hombros y yo por su cintura mientras nos encaminamos para comprar nuestras malteadas.

     * * *

- En unos días comprare otro celular, no te preocupes, Anne - dice Niall.

- Ok. Pero en verdad Niall, ten cuidado.

- Que si Anne, voy a tener cuidado. También me preocupo por ti, tus padres confian en mi.

- Lo sé y estan felices de que me cuides y preocupes por mi.

- Aunque vivas sola con Florence no significa que ya sepas cuidarte totalmente sola ¿he?

- Lo sé Niall, lo sé - beso su mejilla.

- Bien - le da un sorbo a su malteada de chocolate y yo le doy un sorbo también a mi malteada de fresa.

- Anne..

- Dime - lo volteo a ver.

- En dos o tres meses me iré de viaje, de regreso a Irlanda, mi papá necesita que esté con él.

- Oh, está bien - sonrío devilmente.- ¿Por cuanto tiempo estaras fuera?.

- Por ocho meses, casi nueve. Pero estaré presente para tu cumpleaños veinti dos.

- Eso espero... Cuando cumplí veinti uno no estuviste.

- Pero sabes el porque.- Levanta mi mirada con su mano en mi barbilla.

- Sí, lo sé - lo miro a los ojos-. ¿Me lo prometes? - pregunto.

- Lo prometo. - trata de sonreir.

Sonrío al saber esa respuesta, se acerca a mi y besa mis labios con su ternura de siempre.

Con dos años y medio de relación con éste chico me doy cuenta de que estoy cada día mas enamorada de él.

Niall me abraza y acaricia mi cabello.

- Te amo, Anne - me susurra al oido.

Yo no contesto nada.

      * * *

Niall me acompaña a mi casa, dijo que tenía que hacer algo asi que no se quedó conmigo.

Florence había salido con un chico, según ella lo conoció en un karaoke, quien sabe. Se han visto por varios días, y ella aun no me dice el nombre de él.

Me meto al cuarto de baño y abro la regadera, necesito darme un baño.

Veinte minutos despues salgo.

Paso mi playera holgada de piyama por mi cabeza, me pongo mis shorts y mis pantuflas. Una vez que mi pelo estaba seco lo agarré en un chongo ingles.

Daban las diez y media de la noche y Florence aun no llegaba.

Diez minutos después sonó el timbre de la casa, fui a abrir y era ella.

- Era hora de que llegaras - le digo mientras ella entra a la casa.

- Lo lamento.

- Me imagino con quien estabas - me cruzo de brazos.

- No te imaginas. Creo que me estoy enamorando - Suelta un gran suspiro y se sienta en el sofá dejando su bolsa y abrigo a un lado de ella.

Me siento a un lado de Florence.

- ¿Desde cuando lo conoces?

- La semana pasada.

- ¿Y crees que ya te estas enamorando de él?

- Supongo - sube sus hombros y ruedo los ojos.

 -No porque te lleve a la cama es amor, Florence - le digo.

- ¿Y qué te hace pensar que me he acostado con él?

- No te hagas la que no sabe porque no te sale.

- Bueno... Pero es que...- Suelta un gran suspiro.

- Al menos dime su nombre.

- Se llama Louis, Louis Tomlinson - y en sus labios sale una sonrisa de oreja a oreja.

Definitivamente ésta chica se está enamorando y me pone feliz, ya que nunca la había visto así por un hombre al que apenas conoce desde hace unos pocos días.

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NOTA: ¡HOLA! Espero en verdad que les guste ésta novela.

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