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Ayer, cuando Lukas y Axel llegaron, estuvimos jugando a "prueba o Verdad" todo iba más o menos normal. Yo tuve que atarme la zapatilla alrededor de la cabeza, Lukas acabó sin camiseta (por una prueba de Axel), Astrid acabó con la cara llena de dibujos y Rebeca contestó todas las preguntas, hasta las más... En fin, algunas que no me esperaba que respondiera. Pero entonces, en el turno de Casy, la retaron para que besara a alguien del grupo. No tenia pensado hacerlo, claro, pero se puso tan nerviosa que la mano de la que se estaba mordiendo las uñas le empezó a desaparecer. Delante de Rebeca. Se asustó tanto que se desmayó, por lo que me habría resultado mucho más difícil borrarle la memoria. Para cuando los demás nos fuimos a dormir, seguía inconsciente, así que la dejé durmiendo en mi cama y yo me tumbé en el suelo, aunque no pegué ojo. Pensando que le iba a decir cuando se despertara, como iba a reaccionar ella... Pensando en todo lo que ha pasado desde que me la encontré en los vestuarios, en lo bien que me he sentido a su lado... No quiero perderla, bajo ningún concepto. Daría mi vida por ella si fuera necesario.

El reloj marca las 03:57 cuando Rebeca empieza a respirar más entrecortada mente y en seguida pega un brinco asustada. Me levanto tan deprisa como puedo a calmarla.

-Hey, tranquila-digo lo más dulcemente que puedo- soy yo, preciosa. Soy Alex.

-Alex...-susurra y me estrecha entre sus brazos- ¿Qué...? ¿Qué narices...?

Mira a Casy, que también se a levantado y nos mira sentada en el borde de su cama. Parece preocupada.

-Tranquilizate, preciosa-le repito, porque lo es- todo tiene explicación, pero será mejor que primero descanses-estaba temblando.

-Tengo miedo- está a punto de llorar.

-No tienes porque, te lo prometo -y le doy un abrazo para después besarla- Puedes quedarte a dormir aquí si quieres, mañana te contaremos absolutamente todo-decido.

-No te ofendas-le dice a Casy- pero prefiero ir a mi cuarto.

-Claro-le digo- yo acompaño.

Casy está sin palabras, cree que es por su culpa, aunque en realidad yo soy la responsable de esto. No debí ocultárselo en ningún momento. Salimos del cuarto y Casy sigue sin decir palabra.

En la puerta de su dormitorio, Rebeca me dice, todavía asustada y con la voz rota:

-No voy a poder dormir sola, estoy asustada. ¿Te importa quedarte?- Entiendo que para ella ha sido algo demasiado repentino y brusco que no se esperaba e intento ponerme en su piel, no debe ser fácil de asimilar. Para mi es algo normal, llevo toda mi vida con esto viviendo conmigo día a día, no sabría vivir sin ello.

-Por su puesto que no. Anda vamos.

Nos metemos en su cuarto y ella se pone un pijama, yo no me lo había puesto en casa, así que me quedo con la ropa. Ella se mete en su cama y me pide que la acompañe, así que me meto también y la abrazo.

-Alex, ¿Todos... Sois como ella?

-Ahm- no sé que decirle- algo así. Estamos intentando descubrir porque somos así.

-No sé... No se si quiero saber esto. -Se da la vuelta- Te quiero -me derrito al escucharlo- pero no quiero escuchar que me has mentido, que no me has dicho quien eres...

-Yo también te quiero-Solo alcanzo a decir- Rebeca... Esto es peligroso. No lo parecía al principio, pero en los últimos días nos estamos dando cuenta de que hay mucho más de lo que creíamos. Si no te he dicho nada a sido para protegerte. Si quieres dejarme olvidarte de esto y seguir tu vida sin preocuparte por un problema que en realidad no tienes, lo entenderé. Pero yo estoy dispuesta a hacer las cosas bien, explicarte todo y hacer que formes parte de esto.

Mis Amigos Y YoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora