Mis Amigos Y Yo

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Los recuerdos de Axel y de Astrid estaban bastante borrosos, pero pude llegar a distinguir el camino de vuelta, por lo que ahora nos encontramos justo en la entrada, y sinceramente, no me puedo creer que jamas me hubiera dado cuenta de la existencia de esta. La salida pegaba justo a la parte trasera de uno de los bloques que formaban el instituto, tras unos cuantos arbustos que lo escondían. Nadie solía aparecer por allí, excepto por los que se escondían allí para fumar, pero hoy como en todo el instituto, no había nadie.

-Entonces, ¿no sabes quién puede haber sido el causante de esto? ¿No has visto ha nadie? -me preguntaba Astrid, que tras el largo tiempo que llevábamos ahí dentro, había resultado ser más simpática de lo que parecía.

-No, pero en cambio... La sensación cuando estaba recordando lo ocurrido me es familiar... -trago saliva. No tengo ni idea de en lo que estamos metidos- Es como lo que sentí antes, en el despacho de Percival, cuando no pude leerle la mente.

-¿Crees qué tendrá algo que ver con esto?, ¿O con la desaparición de Jack?

-No lo sé, quiz...

-¿Alex? -Una voz que reconozco a la perfección y que me causa un pequeño acelero de mis pulsaciones, me interrumpe -¿Qué estáis haciendo aquí?

-Ah hola... Rebeca -sonrío como una boba.

-¿No estaréis... Fumando?

-Ah no, no -me pongo roja y veo a Axel de reojo reirse de mi y comentando algo con Casy que parece divertida- Simplemente... Le estábamos enseñando todo el internado a Astrid- digo lo primero que se me ocurre y ella abre los ojos como diciendo "¿qué narices estás diciendo?. Pero en escasos segundos, ella reacciona y completa la mentira.

-Si, mi primo-al decir esto coloca su mano sobre el hombro de Lukas que desde luego no sabe disimular tan bien- me ha recomendado el centro, y sus amigos se han ofrecido a enseñármelo. Cuando hemos llegado aquí nos hemos quedado hablando y se nos ha hecho tarde.

-Valla, yo que os iba a pedir un cigarro...

Ahora soy yo la que abro mucho los ojos y pestañeo muy rápido incrédula. Entonces ella se ríe y me relajo más.

-¡Era broma mujer!

-Ah ya... Ya lo sabía... -me pongo roja y cambio de tema rápidamente- bueno, ¿y tu que haces por aquí?

-Acaban de volver los del partido, y claro, con la celebración han ensuciado todo. Nos ha tocado limpiar a los novatos.

-¿Quieres que te ayude? Con el tour resulta que me he librado, pero si necesitas ayuda...

-No hace falta... ¿Astrid? -esta asiente- ya estoy acabando- dice elevando un poco unas bolsas de basura que lleva en las manos- Por cierto, ¿ya sabes en que cuarto estás? Yo por ahora no comparto habitación, ¡Podrías venir te conmigo!

-Bueno, ha decir verdad, todavía no es oficial que vaya estudiar aquí, todavía tengo que hacer el papeleo. Ya sabes, la matricula y todo el lío. Si quieres puedo pedirles que me pongan contigo.

- No creo que te dejen, deja que me ocupe yo- "Claro, ella tiene enchufe" pienso y me río para mi. Otros años siempre me decían que estaba enchufada... No lo estaba. Por supuesto, pero algo de ventaja si que tenía.

Durante un rato charlamos con ella y con Astrid, que parecen buenas amigas, y parecerá estúpido, me da algo de celos... Si, celos. Como he dicho, es bastante estúpido. No mucho más tarde a a anochecer y nos despedimos de ella y de los chicos.

-¿Entonces qué vas ha hacer?-pregunta Casy- ¿estudiaás aquí?

-Tendré que hacer algunas llamadas, claro... Pero si, no me queda otra. Además yo también quiero saber que está pasando.

-Genial. Será mejor que mañana temprano te inscribas en el centro-hablo yo- Puedes dormir esta noche con nosotras, tenemos una cama libre.

Cuando ya vamos volviendo a la habitación, sin tener que ver con la conversación que manteníamos, Astrid me dice:

-Oye, Rebeca es muy maja. Parece que os lleváis bien... Igual me equivoco pero, ¿te gusta?

Casy me mira y se ríe, yo me pongo roja y no contesto nada. Ellas dos se miran con caras cómplices y puedo leer los labios de mi amiga que dicen "luego te cuento", y ambas se ríen.