Embarazada de mellizos ~ Harry Styles

Capítulo 2: La noticia

   Comencé a llorar, tenía miedo. Los brazos de Taylor rodearon mis hombros y sentía las manos de Edward en mi espalda.

   El test no podía dar positivo, ¿Qué haría yo con un bebé? ¿Qué haría con mi sueño de ser diseñadora? El bebé crecerá sin un padre, Harry está al otro lado del mundo y  jamás sabrá que tendrá un hijo ¿Y mis padres? Ellos van a matarme, nunca me volverán a hablar en la vida. ¿Y Luke? él si que no me va a querer ver nunca mas, su pequeña hermana embarazada, le dará un ataque al corazón.

-No te dejaremos sola Diana- Me limpié las lagrimas y levanté la cabeza para ver los claros ojos de Ed, que ahora estaban rojos por contener las lagrimas.

-Gracias chicos- Abracé a mis amigos sabiendo que con eso no se me pasaría el dolor que tenía en el pecho. Había sido una irresponsable, una maldita irresponsable, si tan solo no me hubiese emborrachado ese día o hubiese usado protección nada de esto estaría pasando, pero ¡Claro! Tenía que actuar antes de pensar y ahora estoy pagando las consecuencias.

-¿Cómo se lo diré a mis padres?, ¿Cómo les diré que el padre de mi hijo se fue a vivir a Inglaterra y nunca volverá?- 

   Esa era la pregunta que estaba atormentándome la cabeza en estos momentos, ¿Cómo iba a decirles la noticia? Mis lagrimas no paraban de salir y mi cuerpo estaba temblando, sentía que en cualquier minuto iba a caer al piso.

   Taylor debió haberme sentido, porque con ayuda de Edward me llevaron a un sillón de la sala y se sentaron junto a mi.

-Vamos a pensar en algo, pero por favor cálmate, te puede hacer mal- No podía verles la cara, pero sentía como ellos estaban igual de bloqueados que yo.

   Quería gritarle a Taylor que como era posible que me pidiera que me calmara si este era el peor momento que me había tocado vivir en la vida, pero guardé silencio porque sabía que tenía razón y que no lograría nada llorando.

   Pasamos la tarde entera pensando y ensayando lo que les diría a mis padres y a mi hermano, pero mientras mas pasaban los minutos, yo me iba poniendo mas nerviosa y estaba considerando seriamente la idea de escaparme al otro extremo del planeta.

-Entonces...¿Qué les dirás?- Me preguntó por novena vez Edward.

   Volví a repetir mis palabras ya memorizadas y al terminar de decirlas, mis amigos me miraban con una sonrisa que no llegaba hasta sus ojos.

-Bien, es hora- 

   Saqué mi móvil de mi bolso y marqué el número de Luke.

llamada telefónica.

-¿Diana?-

-Luke, estoy en casa de Taylor ¿Podrías venir a recogerme ahora por favor?-

-¿Sucedió algo? ¿Estas bien?- Suspiré profundamente intentando controlar mis fuertes ganas de llorar.

-Si, lo estoy. Solo...apúrate-

-En cinco minutos estoy allá-

fin de la llamada telefónica.

   Tal como mi hermano dijo, en cinco minutos un auto tocaba la bocina afuera de la casa de mi amiga.

-Bien, ya llegó- Avisé a mis amigos.

-¿Estas preparada?-

-No- Miré a Ed como si estuviese diciendo la cosa mas estúpida de la vida, ¿Cómo voy a estar preparada para decirle a mis padre que estoy embarazada de un chico que se mudó a Inglaterra y posiblemente nunca vuelva a ver, sin contar que tengo 17 años y esto probablemente arruine mi vida? Tengo la sensación de que ninguna chica está preparada para algo como esto.

-Bueno, al menos sabes que cuentas con nuestro apoyo y que no te dejaremos sola en esto- Agradecí con una sonrisa a mi amiga de cabello rosado y después de despedirme, salí fuera de la casa de Taylor y entré en el auto de mi hermano.

     Al entrar intenté no mirar a Luke a los ojos y fijé mi vista en el parabrisas. No pude evitar mirarlo cuando pasamos unos minutos parados sin siquiera prender el auto. Los ojos de Luke estaban fijos en los míos y tenía una expresión de preocupación en su rostro que me fue difícil contener mis lagrimas.

-Dime la verdad, ¿Qué te sucede?- Rompí a llorar y me lancé a los brazos de mi hermano, a pesar de que me costó trabajo por la incomodidad de estar dentro de un auto. 

-Estoy embarazada- Le susurré en su pecho. 

   Luke tomo mis brazos y bruscamente me separó de su cuerpo. Mi corazón se rompió al ver su cara de decepción, creo que nunca la olvidaré.

   El chico no me gritó ni me insulto, simplemente me tiro para que me sentara bien en el asiento de copiloto y abrochó su cinturón para hacer partir el auto y manejar a la velocidad de la luz hacia nuestra casa.

   Luke no me dijo absolutamente nada, su mirada iba fija en la carretera y tenía la mandíbula jodidamente apretada, y pude ver como una lagrima salía de su ojo y caía por su mejilla. Tenía miedo, mucho miedo de perderle, de perder a mis padres y de morir por un accidente automovilístico.

   Tenía mucha adrenalina contenida en el estomago, Luke estaba manejando muy rápido y sentía que en cualquier momento nos estrellaríamos contra otro auto. Gracias a Dios eso no sucedió y aparcó el auto a un lado de la vereda sin siquiera apagarlo. Aún tenia la vista fija al frente y supuse que no se bajaría, así que me bajé yo y tal como supuse, Luke se esfumó en un mili segundo con su auto por la calle.

   Ese día Luke llegó a casa borracho un gran golpe en la mejilla y la polera manchada con un poco de sangre.

   Entré a casa y reuní a papá y a mamá en el salón principal.

-¿Qué sucede Diana?- Preguntó mi madre preocupada.

   Respiré ondo y me llené de valor para decir lo que había estado practicando toda la tarde en casa de Taylor.

-Mamá, papá se que esta podría ser la peor noticia que podrían recibir y créanme que para mi también lo es- Me largué a llorar y olvidé todo lo que había practicado, mi lengua estaba trabada y no había forma de que saliera una palabra por mi garganta.

-Nos estas asustando Diana, dinos que pasa ahora-

-Papá...yo... estoy embarazada-

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Hola! espero que les haya gustado este segundo capítulo, es bastante triste pero ya mas adelante se volverá muy...interesante, espero sus votos y comentarios. Muchos besos.

          Ana:*