-Tienes razón. -dijo ella, para luego acomodarse a mi lado en la camilla.
-¿Qué te hicieron? -preguntó con tono de preocupación.
Le conté lo que había pasado y no dejaba de decir cuanto odiaba a Kenia y que tenía razón sobre Elizabeth.
-Tengo que hablar contigo. -dijo ella cambiado su estado de ánimo inmediatamente a uno serio.
-¿Afuera hay algún lugar donde podamos hablar y tomar aire?
-Claro. -me contestó y rápidamente salimos a un balcón con una vista muy bonita y con un día muy soleado.
-Ahora dime. ¿Qué pasó? Sin rodeos por favor. -le dije.
-De acuerdo. -suspiró. -Cuando desperté luego de toda aquella guerra, me encontré con Nicolás en este lugar. Me desperté gritando como una demente diciendo todo lo que pasó antes de estar aquí.
-¿Cómo? -la interrumpí.
-La verdad no tengo idea de cómo pasó. Nicolás dice que parece que fue el golpe que me di en la cabeza. Parece que cuando llegue aquí o mejor dicho me mandaron por accidente o pensando que yo había olvidado todo. Pero al verdad es que recuerdo todo. -suspira -Soy parte de todo esto. -la observó detenidamente sin entender que me quiere decir. -Todo comenzó cuando había comenzado a estudiar medicina, mi papá era el presidente de la organización de doctores y científicos más importante del mundo, pues allí investigaban sobre enfermedades, hacían experimentos, creaban medicinas y probaban todo tipo de cosas peligrosas allí. Resulta que estaban haciendo experimentos durante muchos años buscando la cura para el Cancer y pues supuestamente la habían conseguido. Probaron en muchas personas y funcionó de una manera exitosa se curaban de una manera milagrosa, hasta que quisieron alterarla para que la medicina funcionará instantáneamente. Como sabían que mi padre se podría en contra de eso comenzaron hacer experimentos a escondidas hasta que crearon una fórmula que según ellos funcionaria perfectamente, pero esa fórmula resultó peligrosa y dañina, mató a millones de personas en el mundo. -toma una pausa y me mira -En cuanto mi padre se enteró de lo que estaba pasando ya era demasiado tarde, habían matado demasiadas personas y lo peor fue que se regó como una enfermedad. Matt por eso estamos aquí, allá todo está dañado, el aire la comida, todo. -dice tocándose el cabello. -Mataron a mi padre en cuanto se enteró de todo y yo no sabía nada, solo supe que mi padre había muerto, no tenía idea de nada y trabajé con ellos todos estos años mandándolos aquí hasta que me enteré de todo y me quise poner en su contra y me golpearon fuertemente y quedé inconsciente, cuando desperté ya estaba aquí. -dice con los ojos aguados.
Yo no se como reaccionar ni que decir solo quedó observándola y me atrevo a decir unas palabras unos segundos más tarde. -¿Cómo fue que hicieron para tratarnos aquí?
Ella lame sus labios buscando las palabras correctas para explicarme. -Hay un laboratorio subterráneo que había preparado la ONU para cualquier tipo de catástrofe o destrucción de la humanidad. Ahí hay unas cápsulas, en las que ponían a las personas a dormir. Cada cápsula tiene una computadora que nos trae acá es como si fuera un sueño y la computadora está conectada a nuestro cerebro, todo está aquí -dice tocando una de sus sienes -Por eso es que todo parece real pero es creación de la computadora y nuestra mente. -me toma de los hombros. -Necesito salir de aquí, necesito saber que más ha pasado o qué pasará con todos nosotros.
-Pero sería muy arriesgado. Además no sabemos cómo salir. -le digo
-Por eso hay que investigar más. -dice mientras me observa toma mis manos. -Me siento culpable de todo esto. Yo estuve todo el tiempo ahí y nunca me di cuenta, además trabajé con ellos para traer a todos aquí. Tal vez fui yo quien te registró en esa computadora y quien te puso a dormir. -dice mientras comienzan a salírsele las lágrimas. Me acerco rápidamente y la abrazo fuertemente sin soltarla. -Matt también es mi culpa que haya muerto tanta gente aquí y antes de venir. -dice entre lágrimas.
-Tranquila, no es tu culpa, también fuiste víctima de ellos. -digo mientras nos separamos y le limpió las lágrimas. -Te ayudaré con lo que sea y haré todo lo que esté a mi alcance para ayudarte. -termino de hablar y la abrazo.
-Matt, hay otra cosa. -la miro preguntándome qué pasará. -No hay salida. No podemos salir de aquí a menos que alguien apague nuestra computadora desde afuera. Si morimos acá morimos para siempre, así que no podemos morir. -dice mientras toma y aprieta mis manos.
-Prometo no morir. -digo sonriendo mientras ella suelta una pequeña risa.
-Vamos adentro se supone que no estemos acá afuera. -dice mientras le hace señas a Nicolás que está a lo lejos para que venga.
Nicolás ya había llegado y nos ayudó a regresarme a mí cuarto.
-Matt qué bueno que ya estás aquí. -ríe. -esta niña no paraba a de hablar de ti. - dice riendo mientras ambos miramos a April quien se ríe sonrojada.
-Matt estaba hablando con Nicolás sobre lo que hablamos afuera y estuvimos pensando todo este tiempo y pues tenemos una idea pero primero queríamos encontrarte para que nos ayudaras con todo esto. -dice April.
-Pues creemos que podemos hacer que salgamos de aquí sin necesidad de morir. Creemos que si April logra salir podría desconectarnos a todos desde afuera y nadie tendría que morir. -los miro perplejo analizando las palabras de Nicolás.
-¿Ustedes se volvieron locos o qué? ¿Tienen idea de lo que están diciendo? -tomo una pausa y me relajo. -En cuanto ella ponga un pie en el pueblo de Kenia la asesinaran. -digo un poco alterado. -
-Lo sabemos. -dicen riendo -por eso pensamos que si traemos a Kenia y a Elizabeth acá no subirán con sus guarda espaldas ni nada. Solo serán ellas dos con April. -dice Nicolás mientras April me mira esperando una respuesta
-De verdad que están locos. ¿Cómo piensas que será así de sencillo que vengan y ya?
-Ellas siempre vienen por medicamentos y cosas así. Así que vendrán y Nicolás les dirá que quiere hablar con ellas de algo sumamente importante por lo que subirán a su oficina a hablar con él, pero ahí estaré yo. -ella ve mi cara de preocupado y se acerca y toma mi mano. -Tranquilo cariño. Todo saldrá bien. -dice para luego dejarme un beso en al frente.
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Origen
General FictionMi nombre es Matt Grimes, tengo 19 años y vivo una vida como muchas personas pero la mía es muy diferente en muchos sentidos. Nadie sabe que se siente vivir al límite sin tener nada importante que hacer o una vida como todos quieren por otras perso...