Nicolás, April y yo terminamos de contarle a Hanna los planes que teníamos.
Hoy era el miércoles, el día en que ellas vendrían. El día anterior habíamos terminado de preparar todo para hoy. Nicolás había cortado toda forma de comunicarse con cualquier parte de este mundo y Hanna no había hecho nada sospechoso hasta el momento.
Era ya la mañana. En unas cuatro horas ambas llegarían. Ya teníamos todo preparado desde ayer y las esperábamos ansiosamente desde temprano. Queríamos que todo fuese perfecto y que nunca llegaran a sospechar de cualquier cosa que tuviésemos planeada. Hasta ahora todo marchaba como nosotros queríamos y esperábamos. En solo unas horas llegarían.
-¿Estás lista? -le pregunto a April al notarla nerviosa.
-Estoy muy nerviosa. No sé si todo salga como queremos. Tal vez todos nuestros planes se dañen y todo termine peor. -dice preocupada mirándome.
-Tranquila. Funcione o no, lo que cuenta es que lo intentamos y que lo hicimos por todos. -es lo último que le digo para luego darle un beso.
-¿Por qué siento que esta puede ser la última vez que nos veamos? -dice ella con melancolía en sus palabras.
-No será así. Ten fe, lo digo de verdad. Eres fuerte y nos irá bien pero hay que mantenernos positivos. -digo para luego abrazarla. -Te amo April, sea como sea, pase lo que pase, estés donde estés, te amaré siempre, no importa que. -noto cómo hay un brillo en sus ojos y me besa.
-Yo igual te amo sin importar que. -dice y la abrazo.
Luego de eso pasaron unas horas y ya estaban casi por llegar ambas. Así que decidimos ir a encontrarnos en la oficina de Nicolás. Ya todos arriba estábamos terminando con los últimos detalles.
-Chicos, solo puedo decir gracias por apoyarnos en esto a ambos, y por permitirnos ayudarlos a pesar de saber que cualquier de nosotros podría morir. -digo con tristeza. -Ya todos sabemos qué haremos. Hanna y yo estaremos en el armario con las armas en caso de alguna emergencia y tu -dice señalando a Nicolás -estarás con April aquí. Cuídala, por favor. -digo tomándola de la mano y dándole un beso en la palma de su mano.
Sube una de las chicas que trabaja para Nicolás y dice que ya llegaron. Nicolás sale por la puerta y April me mira nerviosa con ganas de llorar. Hanna le da un abrazo a April y va al armario.
-Recuerda que te amo a pesar de lo que sea. -le digo y la beso.
-Tu igual recuérdalo siempre. -dice con los ojos aguados y le doy un último beso para ir al armario con Hanna y ella se sienta en un sofá que hay en una parte escondida de la oficina. Camino hacia el armario, tomo el arma qué hay en el suelo y sierro la puerta.
-Se que no es el momento pero si muriera quisiera que antes superas que lamento cómo fui antes contigo y qué tú y April son perfectos juntos. -dice ella mientras baja la cabeza y queda en silencio.
-Gracias. -sonrió - Yo lamento haberte juzgado. -es lo último que digo y ella me sonríe.
No dijimos más y un momento más tarde escuchamos la puerta de la oficina abrirse, ya estaban aquí.
-Como ya dije, lamento esta reunión inesperada pero tengo noticias. -habla Nicolás con ambas mientras se escucha la puerta serrarse y unos pasos hasta sentarse, se escuchó el chillido de la silla del escritorio de Nicolás. Miraba a Hanna y notaba el terror que había en sus ojos.
-No te preocupes. -dice Kenia. Se escuchaba su voz con mucha dulzura lo que me hizo pensar que estaba sonriendo.
-Dejemos no de rodeaos y hable rápido. -se escucha la voz de Elizabeth como si tuviese prisa.
-Lo has dicho, dejémonos de rodeos. -se escucha la voz de April. No tenía que verlas para saber que estaban sorprendidas. -Si, fueron citadas aquí para encontrarse conmigo y para que demuestren quien en realidad son. -se escuchaba la voz de April en tono fuerte y decidido.
-Me dijiste que estaba muerta. -habla Kenia sorprendida y molesta al mismo tiempo.
-Pensé que lo estaba. -contesta Elizabeth alterada.
-No es momento de que se peleen entre ustedes, es momento que peleen contra mi. Lo sé todo. Sé el por qué quisiste matarme desde el principio Kenia, porque sabías que te descubriría y que sería un peligro para ustedes, porque intentaría irme en su contra, costara lo que costara o que acabaría con todo esto. -se escuchaba molesta la voz de April. -También sé que ustedes mataron a mi padre y que ustedes me trajeron aquí. Ustedes hicieron todo esto, ustedes mataron a demasiadas personas. ¿Por qué?
-No había opción. -dice Elizabeth -No la hay. Es esto o nada.
-Todo fue por su culpa y por su ambición. Por culpa de ustedes ya no podemos vivir como antes. Sé que ustedes son las únicas que se pueden desconectar sin ningún problema, porque ustedes fueron quienes crearon todo esto. Así que les pido que nos salgamos las tres de aquí al mundo real, a resolver esto como debería ser.
-Si tu lo pides. -son las últimas palabras que se escuchan antes de escuchar un fuerte ruido como si se hubiese caído alguien al suelo y en pocos segundo otro.
-Hanna, Matt, salgan. -se escucha la voz de April. Cuando ambos abrimos rápidamente la puerta y salimos, vemos a Kenia y a Elizabeth en el suelo, para luego ver cómo April pierde fuerzas y cae al suelo al igual que Kenia y Elizabeth.
Tiro mi arma al suelo para correr hacia dónde está April en el suelo mientras que Nicolás y Hanna están detrás de mi pensando que hacer. Tal vez si se desconectaron de verdad. April aún seguía respirando lo que era señal de que estaba viva.
-Tal vez ya se desconectaron. -dice Hanna.
-Está respirando. -digo mientras la tango en mis brazos. -Puede ser señal de que esté viva. -digo preocupado.
-Pienso lo mismo. -dice Nicolás.
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Origen
General FictionMi nombre es Matt Grimes, tengo 19 años y vivo una vida como muchas personas pero la mía es muy diferente en muchos sentidos. Nadie sabe que se siente vivir al límite sin tener nada importante que hacer o una vida como todos quieren por otras perso...