Capítulo 37: No sentía la pasión.

69 12 5
                                    

POV Brithanny

Ya estaba en casa hacia dos días, y no había visto a Robert, Amelía y Steven decidieron quedarse en casa conmigo al igual que Patricia. No se que era lo que pasaba con estas personas, creo que ya me sabia defender lo suficiente y aunque si estaba algo disgustada con todo esto, no podía echarlos después de todo lo que hicieron por mi durante todo este tiempo. Pero Dios! Un poco de aire fresco sin ellos y sus locuras no estaría mal.

Fatima iba y me visitaba diario era un primor, aun nadie volvía a su trabajo, era como si tuvieran para vivir toda la vida.

-¿No piensan ir a trabajar? -dije irritada, todos querían que comiera, que descansara (No se de que) y otras cosas, ya me estaban fastidiando. -Y por cierto! No tengo hambre! -Dije enojada.

-Tengo personas que trabajan para mi. -dijo Steven relajado en el sofá. Podía ser un fastidio de verdad.

-Igual yo! -Exclamaron patricia y Fatima.

-Yo trabajo para usted. -Dijo Anthony con el pequeño Adrián en brazos. La verdad era el que menos me fastidiaba. Solo me molestaba para que comiera, ya que era la única forma de estar fuerte para amamantar a los bebes.

-Steven me mantiene. -dijo Amelía con Bettanny en Brazos.

-Excelente. -dije sarcástica blanqueando los ojos.

-¿Cual es tu problema? -Me pregunto Steven al ver mi fastidio.

-Que la sobre protegemos -dijo Patricia obvia.

-¿Y si lo sabes. Para que molestas? -dije blanqueando los ojos una vez mas.

-Sabes que no me agrada que vivas en esta casa. -Dijo tomando a Nathalia, rodé los ojos, ya me había dicho eso unas mil veces. Me dispuse a decir algo pero fui interrumpida al ponerme de pie.

-Buenas!

Al escuchar esa voz, todos los ceños se fruncieron, menos el mio, prometía ser la mejor esposa del mundo y la madre mas amorosa. Siempre y cuando no se metiera con mis hijos, todo estaría bien. Creo que después de todas esas llamadas y correos, quería que este tonto matrimonio funcionara enserio.

-Hola querido. -Dije cuando me beso en la frente.

-¿Así vas a saludar a tu esposo, después de tanto tiempo?. -dijo abriendo sus brazos, me pare y lo abrace, de buenas a primeras me dio un beso con algo de lujuria. Respondí a su beso sin dudar, pero me sentí apenada con los espectadores una vez no se despegaba.

-Ya! -dije despengandolo. -déjalo para después. -Susurré con la misma pena ya expresada.

-Te vez preciosa! -dijo mientras me giraba para ver todo mi cuerpo. -Esto  de ser madre... -Me pego a su cuerpo con la lujuria que daba a notar sin ningún disimulo. (Que fastidio) -Te ha sentado muy bien. -dijo con ganas de desnudarme en aquel lugar. Podía sentirlo en sus palabras.

-Gracias. -dije algo avergonzada. Note que nadie en aquella sala miraba a Robert de buena manera. (Obvio) Al parecer no sabían disimular.

-¿Donde están mis hijos? -Exclamo.

-Aquí están! -Señale al niño en brazos de Anthony y a la nena en brazos de Patricia.

-Cargare a mi primogénito primero. -Fue y lo tomo en sus brazos. Es obvio que no tomo a la nena, pues la tenia Patricia, y esos dos se odiaban. Cuando lo vio puso cara de asombro. -Wuao! Es igual... -Estaba como constipado y era como si confirmara alguna duda. (Que estupidez). -Es igual de hermoso que su madre! -Exclamo mientras lo cargaba mas tiernamente, sentí como Patricia respiro de alivio. (Mas raro aun para mi)

Los Williams.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora