Más De Un Camino

Capítulo 29

Janette era la chica buena de la casa, sí, pero toda chica buena tiene al menos un secreto y yo sabia el de Janette, no era la gran cosa pero dañaría su imagen con nuestros padres lo suficiente.
Una vez Janette se había drogado, y yo tenia todo en vídeo y fotos, siempre que podía la chantajeaba con eso, pero al parecer lo olvidó.

Arreglé un poco mi habitación y me acosté a tomar una siesta, dos días para irse... La noche era el tiempo para disfrutarlos y la tarde el tiempo para dormir.

7:30 pm.

Desperté a causa de que ya tenia hambre y me dirigí a la cafetería. Al entrar muchos se pusieron a susurrar cosas, pero eran esas típicas personas que exageran todo y se creen esas exageraciones, capaz decían que ataqué a Pía con una sierra eléctrica.

Tomé mi comida y me senté en una mesa vacía a disfrutar de mi alimento.

Esta noche pensaba dar una vuelta por el río. Me encantaba ir ahí de noche y darme un tiempo a solas, para pensar con claridad, para buscar nuevos puntos de vista, era maravilloso.

Terminé mi comida, fui a mi cabaña nuevamente y me recoste en mi cama.

Esperé a que el reloj marcara las 11:00 pm y salí de la cabaña sigilosamente.

Me dirigí al río haciendo el menor ruido posible. Al llegar me senté a la orilla abrazando mis piernas y cerré los ojos.

El agua correr y el viento los arboles mover, eran los únicos ruidos que habían ¿Que más se podía querer para relajarse? Probablemente más nada.

Respire profundamente inhalando el aire puro de la naturaleza.

Entonces me hizo una pregunta que hace mucho no me hacia. "¿Sigues siendo la misma Clarisse Polifeme que solo ella era misma? ¿Sigues siendo quien eras un par de años atrás?"

Lo estoy perdiendo, sí esa fue mi respuesta, sabia que debía volver a mis raíces. A lo que alguna vez cambio mi vida y abrió mi mente, la música, la buena música. ¿Una guitarra acústica? ¿Que podría ser mejor? No importaba si no tenia letra. No importaba si las personas no te oían. No importaba como luciera al tocarla. Esa era la base sobre la cual había construido su personalidad ¿y que será de su personalidad si su base desaparece?

Todos tenemos algo que nos ha inspirado, que nos ha llevado a nuestro paraíso mental. Todos tenemos eso que descubrimos y pensamos "Wow, esto es lo mio, esto es a lo que me quiero apegar"

Una frase de un libro, una estrofa en una canción, un acorde de una guitarra, una película increíble... La inspiración viene de diferentes formas para cada persona, pero cuando la encontramos hay algo que nos dice, algo que nos grita, que no debemos dejarla ir. Que eso es lo que eres.

Suspire y me recoste a la orilla del lago en el suelo.

- I wanna live while we're young ... - tarareé vagamente. Sí esa pedazo de canción me llevaba al pasado y me hacia sentirme renovada nuevamente.

"Quiero vivir mientras somos jóvenes". Uno de sus miedos era eso, envejecer, tener que madurar, deber cuidar de una familia, de un hogar, dejar de tener tiempo para ella misma. ¿Que pasaría si no consigo un trabajo que le gustase? ¿Si no consego trabajo? ¿Si no logro todas sus metas? ¿Si dejaba de tomarme un respiro para considerar mi propia existencia?

No, no quería ni imaginarme una vida así, por eso tenia miedo a crecer, probablemente tenia miedo de tener responsabilidades con las cuales no podría cargar. 

Le gustaba tomar riesgos, si decidía tener una familia probablemente ya no podría darse los lujos de amanecer un día con ganas de saltar de un avión y hacerlo.

Abrí mis ojos lentamente y me quedé observando las estrellas.

A veces los pensamientos se iban de mis manos y me abrumaban.

- Linda noche ¿eh? - dijo Kevin sentándose a mi lado haciendo que volteara a verlo.

- ¿Que haces despierto a estas horas? - pregunte en un tono de voz sereno.

Él se encogió de hombros.

- No lo sé - respondió - solo no podía dormir.

- Uh, interesante - Murmuré volviendo mi vista a las estrellas y él hizo lo mismo.

Unos minutos después lo observe de reojo y pude notar que parecía estar debatiéndose con él mismo. Decidí no preguntar, de cualquier forma tal vez él también vino a pensar.

- Clarisse, ¿Puedo pedirte un consejo? - dijo y soltó un suspiro.

- Claro ¿Cual es el problema? - respondí tranquilamente.

Él se aclaró la garganta.

- Me gusta una chica, pero ella gusta de otro chico y a mí no me pone tanta atención como a él - dijo algo triste.

- Ah... Pues... Deberías intentar llamar más su atención, ya sabes, invitándola a hacer cosas que a ambos les gusten. - respondí no muy segura.

Esto de estar enamorados no era mi punto fuerte.

Él asintió y luego se levantó.

- Buenas noches, Clarisse - dijo antes de darse la vuelta e irse.

"Puede que seas tú de quién habla"  dijo algo en mi mente. Pero yo sabía que no era así, no era lógico, ni posible, al menos no para mí.

Cerré los ojos y me deje llevar por el sonido de la tranquilidad.

Entonces alguien a quien no veía hace mucho llegó. ¿Ahora todos vienen al río a medianoche?

Sentí como alguien se sentaba a mi lado y abrí un ojo encontrándome con Mandy.

- ¿Como estas, Clarisse? - dijo sonriendo de lado.

- Muy bien ¿y tú? - respondí observándola.

Ella rió vagamente y se recostó de una roca.

- Mira, seré sincera, vine porque el idiota de Logan lleva desanimado todo el asqueroso día y ya no me lo aguanto, ha estado toda la tarde lloriqueando por ti y sobre cómo pedirte perdón - dijo en un tono de queja y desesperación.

No pude retener la risa.

- Si tanto le importa vendría a decirmelo él mismo - dije encogiéndome de hombros.

Mandy rodó los ojos sonriendo.

- Ese asqueroso ser viviente es un cobarde, no se atreverá a nada si sabe que puede ser rechazado.