Más De Un Camino

Capítulo 30

Observé a Mandy brevemente en silencio, ella parecía tener la única intención de informarme que Logan estaba tomando mal lo que pasó con nosotros... Aunque nunca hubo un "Nosotros", supongo.

- ¿Te puedo contar algo? - pregunté tranquilamente.

Ella ladeó un poco su cabeza y luego asintió.

- Logan me gustaba, mucho, pero hay algo que no me deja superar lo que hizo y al no superarlo no puedo perdonarlo ¿Sabes que es? Creo que hay una pizca de realidad en todo lo que dicen las personas cuando están molestas y yo no estaré con alguien que saca mi corazón por mi garganta cada vez que se molesta. - no hice pausas, pero tampoco hablé con rapidez y firmeza como lo solía hacer, mi confianza se había desmoronado por un momento.

Yo había dejado que algunas palabras de Logan me afectarán llevándome a dudar de mis propias cualidades, esas que me llevaron tiempo encontrar, esas que me habían dado la personalidad que siempre aspire... Él me había hecho dudar de mí misma, y eso no es algo que yo acepté con agrado.

Ella estaba analizando por un momento todo, pero de una forma superficial, ella no quería internarse mucho en mi cerebro, lo podías sentir al mirarla. Ella podía averiguar lo que quisiera pero prefería no hacerlo, eso era algo admirable de su parte.

Asintió levemente.

- No te puedo quitar esos argumentos, sí, él la ha regado mucho. Eso siempre nos pasa con las personas a las que más queremos. Mientras más ganas más aumenta el miedo a perder, el miedo te hace cometer errores... Grandes errores - murmuró la última frase escondiendo cierta historia en sus palabras.

Se levantó dando un suspiro. Probablemente el miedo alguna vez la llevó a cometer un error del que se sigue arrepintiendo, no estaba en mi derecho de preguntarle qué fue lo que le pasó. Escuchar sus problemas me haría olvidarme de los míos pero la haría a ella recordar los suyos y mi objetivo nunca era estar feliz con la tristeza del otro.

Mientras observaba el nublado cielo pensé en coincidencias sobre mis fracasos amorosos, sí de algo estaba segura es de que había un patrón de error.

"Un patrón que comienza con el hecho de enamorarse sin notarlo" sugirió mi subconsciente.

No podría quitarle la razón, yo actuaba muy diferente cuando me enamoraba, era la otra Clarisse con ese chico, más tranquila, más graciosa y más tolerante.

Suspire al por fin desatar el nudo de la soga que había en mi cerebro.

"Eres tan diferente al enamorarte que cuando ven a la Clarisse real se alejan, muchos quieren algo frágil y no son capaces de cuidar algo que es tan fuerte como ellos, se sienten amenazados o decepcionados de que no seas la chica perfecta". Esa era la explicación que me había conseguido y aunque en el fondo no tuviera mucho sentido, aún así, quería tragarmela.

De alguna forma cada vez que me enamoraba no se sentía lo mismo, siempre había algún factor diferente...

" ¿Desde cuando estás con esas cursilerías?" reclamó mi subconsciente, suspire agotada de tener que soportar mis propios comentarios. Genial, ahora resulta que también me estreso a mí misma.

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5:30 pm

Había llegado a las 6:15 am a la cabaña y no había descansado nada en ese tiempo. Fui directamente a desayunar para luego poder recuperar mi descanso perdido.

Cuando por fin estuve entre la abrigadora sabana de mi cama ya eran las 7:30 am. No me costó caer en un profundo sueño el cual no fue interrumpido hasta las 4:00 pm. Janette me despertó con gritos, como era su costumbre, diciendo algo sobre una fogata de despedida ya que mañana por la mañana partiríamos a casa.

Ordene mi cama y me bañé como pude, sería un descaro de mi parte decir que aún tenía sueño, lo que me hacía querer volver a la cama era que al dormir mis preocupaciones desaparecían casi por completo.

El único rastro que había de ellas era en mis pesadillas, las cuales consideraba fáciles de ahuyentar y cambiar por imágenes más agradables de mi imaginación.

Mire el reloj de la pared después de alimentar a la serpiente, que quería llevarme a casa, y note que ya eran casi las 6 pm. Salí de la cabaña y me dirigí al lugar donde harían la fogata.

Mi ropa reflejaba mi humor, algo neutro. Llevaba jeans negros junto con una blusa de igual color y una cazadora gris más botas de semi-cuero negro.

Estaba bastante abrigada y llegué a tiempo para tomar asiento con gente que no conociera, además de que estábamos cerca del fuego, en las primeras filas.

Mientras encendían la fogata un chico llegó corriendo hasta mí y me entregó un pequeño papel sin decir nada al respecto.

Abrí el papel sin darle mucha importancia y comencé a leerlo mentalmente.

"Hay cosas de las que debemos hablar, no servirá de nada que admita lo estúpido que he sido, eso ya tú lo sabes. De verdad, necesito estar a solas contigo antes de tener que despedirnos. Esto llegó más rápido para mí de lo que esperaba. Te espero a las 8 pm en el bosque, en el punto donde nos conocimos gracias a Mandy ¿lo recuerdas? Que buen comienzo.
\\Logan\\"

No pude evitar sentir un escalofrío.

"Aún puedes caer en sus palabras" me dije a mí misma en un murmuro recordándome lo débil que era mentalmente en ese momento. Recordándome que mis sentimientos seguían a flor de piel.

¿Darle otra oportunidad? Esa pregunta llevaba de respuesta un rotundo "No", era de las pocas cosas de las que aún podía estar segura.

Un chico y una chica comenzaron a animar todo. Cantaban canciones graciosas que los demás seguíamos y tomaban a algunos chicos despistados para que cantarán con ellos dos.

Mi ánimo subió gracias a eso pero lamentablemente no duró mucho.

Eran ya las 7:50 pm, si llegaba puntual y él no estaba tendría una excusa para dejarlo plantado.

Me levanté y me dirigí al bosque intentando no llamar la atención. Me adentré para buscar el punto de encuentro.

Repite profundamente al recordar ese día y comencé mi caminata. Para las 8:02 pm ya estaba en el lugar y observaba mi reloj intentando normalizar mi pulso.

- No sabes cuánto significa para mí que aceptarás venir.