28.Dos Tatuajes y La chica que se ahogó en espuma

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Alice POV

Me muevo en mi cama en busca de comodidad pera de repente siento un ardor en la cadera.

Me tocó con la yema de los dedos y veo que tengo un plástico en la parte baja del abdomen del lado derecho.

Me levanto de la cama y me veo en el espejo. Me bajo un poco la goma del pantalón y veo una cosa de varios colores brillantes en mi piel y cubierto con plástico transparente.

–¡RILEY ELIZABETH SMITH!– grité.–¡DIME QUE NO ES CIERTO!

–¿Que cosa?– dijo pegada a su almohada.

–¡QUE TENGO A UNA PLUMA ARCO IRIS  TATUADA EN MI CADERA!

–Si te dijera eso, te estaría mintiendo, hermana –dijo y soltó una carcajada.

–¿¡Me dejaste hacerme un tatuaje cuando estaba drogada!?

–Mira el lado bueno: Ya no se ve tu horrible cicatríz de la apendicitis.

Bueno, de eso no me puedo quejar.

–¿Se podrían callár? Estoy intentando ver este experimento.

Kate estaba sentada en el escritorio con un montón de productos de diferentes colores. Ella estaba vestida con una bata blanca y unas gafas de laboratorio. Esa mujer tenía gran interés en la ciencia y la química, admito que fue la que fabricó mi shampo.

–Necesito concentrarme. Vayan a quemar un árbol o algo por el estilo. – dijo con desdén, a lo que Riley y yo salimos de la habitación. Ella vestida correctamente y yo... Pues yo traía mi pijama de personajes literarios.

–¿Qué hacemos?

–¿No dijo que quemaramos un árbol? Pues quememos un árbol.

Kate POV

Estaba viendo No tan obvio en Natgeo. De vez en cuando resultaba interesante, específicamente cuando tenía los complementos necesarios.

–Y recuerden, no intenten esto en casa.– dijo el hombre de la televisión.

–Oh, cariño, no estoy en mi casa.

***

–¿Era el azul o el rojo?Bah mejor los dos.

Entonces empezó a producirse espuma, mucha espuma.

¿¡COMO DEMONIOS PARO ESTA ESPUMA!?

Cada vez salía más.

Y Más.

Y MÁS.

Todo el piso se estaba llenando de esa espuma verde.

¿Qué digo piso? Yo estaba hasta la cadera de espuma. E iba aumentando.

Agarré los teléfonos de las chicas y el mío, y los puse en una bolsa con cierre. También el notebook y los frascos de nutella de emergencia.

La espuma ya me llegaba hasta el cuello y era tan espesa que me hacía moverme lentamente.

Listo ya me morí.

Somos unas P.U.T.A.S  (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora