La Caida

Capitulo 62

Lo miré y cerré los ojos. Se acercó hasta mí.

Lali: Ya hablamos de esto, Peter.-Sentí como su respiración se mezclaba con la mía.-

Peter: Lali, intentémoslo. Por favor.-Se acercó todavía más.-

Lali: ¿Y si nos lastimamos?-Abrí mis ojos y me encontré con dos ojos verde avellana mirándome.-

Peter: Nunca te lastimaría.-Cerré mis ojos y no dije nada.-Intentémoslo.-Me acarició la cara y posó sus labios sobre los míos. Dejé caer algunas lágrimas y abrí mis ojos.-No llores.-Me limpió las lágrimas.-No te voy a lastimar.-Lo miré a los ojos.-Te lo prometo.-Me acerqué y él me besó de nuevo. Esta vez, yo también participé en el beso. Nos besamos hasta que nos quedamos sin aire. Después nos volvimos a besar y yo puse mis manos en su nuca. El movió su mano y me solté porque movió el suero y me lo clavó más. No se imaginan lo que dolió.-

Lali: ¡Ay!-Me acomodé el suero con dolor e impresión. Me recorrió un escalofrío por todo el cuerpo.-

Peter: Perdón.-Negué con la cabeza.-

Lali: Esta todo bien.-Él asintió y se rascó su nariz. Nos miramos y se acercó de nuevo. Otra vez nos besamos, pero esta vez se fijó en el cable del suero para no lastimarme. Cuando el beso terminó, me acarició la cara mientras nos mirábamos.-

Peter: Gracias por darme una oportunidad, La.-Sonreí y él me sonrió de vuelta.-Amo tu sonrisa.-Me susurró sobre mis labios y yo me sonrojé.-Amo cuando te sonrojas.-Me puse mucho más roja.-

Lali: Me haces sonrojar, tonto.-Él se rió sobre mis labios.-

Peter: Gracias.-Lo besé y él me agarró los cachetes con sus dos manos.-Sos muy linda.-Sonreí.-

Lali: ¿Sabes si me falta mucho para salir de acá?-Él levantó sus hombros.-

Peter: Pero te averiguo, ¿dale?-Asentí y el sonrió.-

Lali: ¿Qué sonreís?-Le pregunté riéndome.-

Peter: De que entré, discutimos y después terminé pudiendo besar a la mujer más linda del mundo.-Fruncí mi ceño.-Vos.-Me susurró y yo sonreí.-

Lali: ¿Sabías que?-Él negó como un nene.-Tenes unos ojos realmente... perfectos.-Él sonrió.-Amo ver tus ojos.-Él mantuvo su sonrisa y yo sonreí.-

Peter: Y yo amo verte a vos.-Sonreí y bajé la cabeza.-Que no te dé vergüenza, porque sos la mujer más linda del mundo.-Me levantó la cabeza.-

Lali: Gracias, Peter.-Él me sonrió.-

Peter: No hay nada que agradecer.-Me aferré a él. Me envolvió con sus brazos y siempre tuvo cuidado con el suero.-

Lali: ¿Y qué seríamos nosotros?-Le pregunté hundida en el calor de Peter.-

Peter: Lo que vos quieras. ¿Queres ser mi novia? ¿O preferís que vayamos lento y te lo proponga como lo mereces?-Me asomé y lo miré.-

Lali: ¿Vas a estar siempre conmigo?-Él me miró todavía abrazándome.-

Peter: Siempre, te lo prometo.-Me hundí en sus brazos.-

Lali: Entonces no necesito que hagas nada especial.-Susurré contra su pecho.-

Peter: Vos te lo mereces.-Negué con la cabeza.-

Lali: Ni siquiera te merezco a vos.-Él me miró, pero yo me quedé tratando de marcar a fuego su olor en mi mente.-

Peter: Vos te mereces el mundo entero y más.-Me abrazó con fuerza, como si pensara que todo esto es un sueño.-

Lali: Esto es real.-Le susurré cambiando de tema drásticamente.-

Peter: Es que no lo puedo creer.-Sonreí y salí del abrazo para poder tocar su cara.-

Lali: Entonces hacelo, porque yo estoy acá con vos, que sos mi novio.-Cuando escuchó que dije "Mi novio" sonrió ampliamente y apoyó su frente contra la mía.-

Peter: Sos tan...-No terminó la frase.-

Lali: ¿Empalagosa?-Le pregunté y él negó.-

Peter: Perfecta.-Sonreí y nos volvimos a besar.-

Lali: ¿Te vas a quedar acá?-Él levantó sus hombros.-Que lastima, porque siempre me siento sola y mi camilla es muy grande. Por hay puedo llamar al médico que viene a la noche a cambiar el suero.-Me miró frunciendo el ceño.-

Peter: ¿Perdón? ¿Qué médico? Decime ya que le pongo los puntos.-Me reí suavemente y lo abracé.-

Lali: Es mentira, no hay ningún médico. Cecilia me cambia el suero.-Él suspiró.-

Peter: Menos mal, no quería lastimar a nadie.-Me reí levemente y él también.-

Lali: ¿Te quedas conmigo?-Él me miró y asintió. Me corrí y le dejé un espacio. Subió y yo me acomodé sobre él para poder escuchar su corazón latir. Su corazón latía con desesperación.-Me encanta escuchar como late tu corazón.-Lo miré.-

Peter: Late por vos.-Lo abracé.-

Lali: Sos muy tierno, Peter.-Él sonrió.-

Peter: Soy tu tierno.-Asentí y me aferré a él. Peter apoyó su mentón en mi cabeza haciendo más cómodo el abrazo.-

Me quedé ahí. En ese momento. Todo era perfecto. No me importaba estar en un hospital. No me importaba tener un cable conectado en mi brazo y tampoco estar en la misma camilla en donde ya muchos días dormí. Sólo me importaba ese momento. Tal vez salgamos lastimados después. Seguramente esto sea más de lo que yo merezco, pero esto es ahora, ¿no? Tal vez mañana yo no pueda disfrutar estos momentos. Tal vez nunca recupere del todo la memoria, pero poco me importaba si él iba a estar así a mi lado. Podía escuchar que me susurraba cosas. Su voz era música para mí. Me relajaba. Me traía paz y me hacía estar lejos de las voces. Lejos del dolor. Después de estar un rato escuchando sus susurros, me quedé dormida sobre su pecho cubierto por su remera roja. Podía sentir sus manos en mi panza. Abrazándome. Como soltaba aire y lo respiraba de vuelta. Sentía cada uno de sus gestos. Los sentía o los soñaba. Una de dos, pero poco me importaba, porque me encantaba. Era totalmente tranquilizante saber que estaba ahí todavía. Abrazándome y cuidándome. Llenando un poco el vacío que tenía en mi interior. Era reconfortante tenerlo conmigo. Sé que lo quise alejar, pero al mismo tiempo, agradezco que él haya sido tan insistente con estar cerca mío. No sé si fui muy egoísta. O si lo estoy siendo al aceptar ser su novia, pero quiero conocerlo de nuevo. Empezar de cero.