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Queridos Hermione y Ron,
Primero que nada quiero saludarlos y felicitarlos porque Rose haya entrado en Gryffindor, estoy muy entusiasmado de poder enseñarle algo a la hija de dos de mis mejores amigos. Pero el motivo de mi carta es realmente otro y muy distinto de una felicitación propiamente dicha, no sé cómo decírselos sin que regañen a la pequeña (yo ya tomé cartas en el asunto en ésa cuestión).
Rose Weasley sin duda es hija de ambos, heredó muchas cosas de ustedes, especialmente la atracción para los problemas.
¿Recuerdan aquella noche en nuestro primer año cuando Draco Malfoy había retado a un duelo nocturno a Harry y por obras del destino terminamos yendo los cuatro a un encuentro pactado por nuestro ex compañero y Argus Filch? Bueno, algo similar sucedió ésta noche. Lamento informarles que Rose y Albus se han visto envueltos en una pelea en plena madrugada en los corredores del Castillo con un par de sus compañeros de Slytherin, por suerte nadie resultó gravemente herido. Harry y Ginny ya están al tanto de la situación.
Es mi deber como Jefe de la Casa de Gryffindor informar a los padres de las medidas disciplinarias que debemos aplicarles a sus hijos cuando estos rompen las reglas (Ginny ya está familiarizada con mis cartas). Tanto Albus y Rose, como su otro amigo de Gryffindor y los chicos de Slytherin,pasaran dos fines de semana ayudando al viejo Filch a limpiar las mazmorras y la Sala de Trofeos, sin magia.
Dejando de lado las formalidades, quiero advertirles de un hecho sumamente curioso y que en lo personal me parece gracioso (diría que el karma hizo de las suyas). Sé que Ron no compartirá mi opinión, es más, Hermione creo que será necesario que lo petrifiques e impidas que venga a Hogwarts. El hecho del que hablo es la amistad que parecen haber formado Rose y Albus con éste compañero de Gryffindor, verlos a los tres juntos esta noche me recordó en cierta forma a Harry y a ustedes.
¿Quién es el chico en cuestión? Esta es la parte graciosa, y realmente no sé cómo escribirlo sin imaginarme sus rostros ante la noticia. El nuevo amigo de Rose y Albus no es otro más que Scorpius Hyperion Malfoy.
¿Sorpresa? Ya lo creo, yo tampoco podía creerlo. Pero es tan cierto como que los tres se sientan juntos en todas las clases (deben saber que Rose y el pequeño Malfoy tienen una especie de competitividad, por lo que he podido charlar con mis pares los dos son hasta ahora los mejores candidatos a "futuro prometedor" en cada una de las materias) y que, por primera vez en siglos, un Malfoy es seleccionado en Gryffindor.
Ron, amigo, no hagas nada estúpido, créeme que le doy al pequeño hurón el beneficio de la duda, después de todo entró en Gryffindor, algo que a Lucius Malfoy le disgustó por completo (lo sé porque el pobre chico recibió un howler en medio del Gran Comedor la mañana siguiente de su llegada a Hogwarts), realmente siento cierta empatía por el chico, muchos alumnos están siendo crueles y prejuiciosos, jamás en el tiempo que llevo en Hogwarts (y ya van para diez años) he visto que a un alumno lo desprecien tanto como lo hacen con éste pequeño. Creo que es como si todo lo que su padre hubiera hecho mal, se lo estén cobrando a él.
