Mi Profesora. (Segunda Temporada)

Alejandro, ¿Qué haces aquí?

Cualquiera en su sano juicio se volvería loco por ti.

Santiago de Chile.

Viernes, 13:20pm.

-Sofía-

Estaba preocupada por Amber, no comía y aún se me hacía difícil de creer, no hablaba y a duras penas salía de la habitación pero Porque yo le insistía.

Nos mudamos cerca de la casa de Gérard, no me quise mudar con él porque Alejandro podría encontrarnos, Amber y yo no queríamos saber nada de él por ahora.

Incluso Gérard me dijo que, él estuvo en su casa preguntando por nosotras, pero como es de esperarse él no le dio ninguna información acerca de dónde estábamos.

Los meses pasaban y no había señales de Alejandro, y mucho menos de Nicolás razones por la cual Amber cada vez se deprimía, pedí un traslado hacia otra escuela, al igual que Amber.

Amber estaba durmiendo en el sofá y yo le acariciaba el cabello, mientras pensaba en una forma de contactar a Nicolás.

-¡Llegó la mejor Psicóloga que puede existir!- Llegó Eleonor, seguida por Liz.

-Y yo la mejor Ingeniera...- Dijo Liz, pero Eleonor la interrumpió.

-La Ingeniera que pronto se le va a explotar el estómago- Reímos, y Liz le goleó el brazo, estas se sentaron.

-¿Cómo sigue?- Preguntó Ele, y yo solo le Sonreí, sabía que no había cambio, las dos de algún modo estábamos pasándola terrible.
-La despertaré- Está se acercó a Amber y comenzó a moverla.
-Nena, te tengo una sorpresa- Amber solo se removió y poco a poco abrió los ojos.

-Solo quiero dormir- Dijo con voz entrecortada.

-Esta sorpresa te va a encantar, lo prometo- Ele le sonrió, y se levantó.
-Pero primero, Liz te va a arreglar- Las dos chicas se fueron hasta su habitación.

-¿Tu como sigues Sofí?- Se sentó a mi lado.

-Bien- Le Sonreí, y esta negó.

-Alejandro ha ido muchas veces a la casa de Gérard pregunta mucho por ti, e incluso las veces que me ha encontrado allá, también me pregunta lo mismo, la está pasando terrible- Hizo una mueca de disgusto al igual que yo.

-Espera, ¿ya tu no vives con él?- Está arqueo una ceja, como si no fuera obvio.

-No cariño, vivo cerca sí, pero no podíamos estar toda la vida viviendo con ustedes- Rio.
-Él va mucho allá, diciendo lo mismo, que quiere que vuelvan, y que te extraña- Sentí algo en el pecho, me lo oprimía, y solo alcancé a sonreír.

-¡Ya está lista!- Gritó Liz, y vi a Amber con otro atuendo, y un poco maquillada, se veía hermosa.

-Gracias- Le susurre a Ele y a Liz le guiñe el ojo.

-Espera y hago unas llamadas nena- Se levantó y salió del apartamento.

-Tía, Ya me quiero descambiar- Dijo triste, y esta negó.
Tardó solo unos segundos y Eleonor entro, esta le dijo a Liz que le cubriera los ojos a Amber.

Ésta emocionada lo hizo, y la niña solo resopló.

Eleonor abrió la puerta y entró Nicolás, le Sonreí ampliamente aunque él estaba un poco nervioso, me acerque a él y lo abracé.