𝐏𝐑𝐎𝐇𝐈𝐁𝐈𝐃𝐎 𝐀𝐌𝐀𝐑𝐓𝐄 || 𝐂𝐚𝐫𝐥𝐨𝐬 𝐕𝐞𝐥𝐚

Capitulo Veintidos

El Sabado había llegado al fin con lo que me paso con Carlos no había querido ir ni salir a ningún lado con los demás, apesar de que Andrés y Sandra me trataban de convencer. Me negué cada vez y solo me dediqué a ir al trabajo y regresar a casa.

Los sábados y domingos descansaba y lo que normalmente hacía era recoger el tiradero que tenía. Así que me desperté temprano y me aliste tenia que ir a comprar un bonito vestido unos zapatos que combinaran, llegue al departamento a las 4:30 estaba dejando las bolsas en la barra cuando mi teléfono comenzó a sonar.

"Paso por ti a las 7:30 te veo en poco tiempo. Sebastian".

Ese mensaje sinceramente me agrado, tome las bolsas y camine a mi habitación, deje las bolsas en la cama y saque mi ropa interior y sacando lo necesario para tomar una ducha relajante y comenzar alistarme.

Estaba lista era las 7:25 cuando estaba en la cocina tomando un poco de agua ya preparada para cuando llegara Sebastián por mi, decidí mirarme en el espejo que había junto al teléfono cerca de la puerta, cuando alguien tocó a la puerta. Me acerqué y ahí estaba Miguel, Jonathan y Giovani.

—Valla a donde vas tan arreglada—pregunto Giovani.

—Voy a una reunión de la empresa.

—¿Con Quien? —quiso saber.

—No te importa.

—Va con el hermano de Mery —dijo Miguel restándole importancia o metiendo su cucharita como siempre.

—¿A que se dedica? ¿Qué edad tiene? —pregunto Jonathan.

—Estas peor que Miguel y Carlos al menos ellos no me preguntaron nada.

—No pero te acompañare hasta afuera para ver cual es el carro que trae El Niño y anotar las placas —dijo Miguel apuntándome con su dedo índice.

—Basta chicos dejen a Brianda —dijo Giovani después miro a Miguel y susurro— aunque no es mala idea lo de las placas —dijo riendo mientras yo lo veía— solo bromeo Brianda, tranquila eres lo bastante mayor para tomar tus decisiones.

—Gracias Giovani.

—Pero lo de las placas si las anotare por si las dudas —dijo en un susurro a Miguel.

—Mejor cállense que ya no deben tardar en llegar por mi... iré por mi bolsa —dije saliendo de la vista de ellos, y pude escuchar un grito de Jonathan diciendo que no era un vestido muy apropiado y que me cambiara.

Salí de la habitación con mi bolso en la mano e ignorándolos me salí del departamento, baje las escaleras cuando él ya se encontraba parado en la puerta para abrirla.

—Hola

—Hola que linda te ves Bri

—Gracias tu no te ves nada mal Millar—dije tratando de devolverle el cumplido.

Cuando los dos nos encontrábamos en el auto note como Carlos me veía desde un auto estacionado enfrente del edificio y lo único que hice fue ignorarlo.

Pase una noche increíble con Sebastián recordando viejos tiempos que pasamos el, Vicky y yo, antes de la graduación. Ya pasado la media noche, entramos al edificio y subimos las escaleras hasta llegar a mi departamento, al llegar lo mire y me despedí de él, él se quedo un momento ahí parado sin decir nada hasta que se acercó a mi y puso su mano en mi mejilla.

—No te invite porque fuera aburrido estar en esas reuniones, te invite porque quería estar contigo.

— ¿Y porque no lo dijiste?