¿Sigueme O Te Sigo?

nervios parte I

se reía escandalosamente mientras yo la mirada directamente con un deje de diversión que ocultaba con una cara de indiferencia- fueras visto su cara- decía animadamente mientras saltaba sentada sobre el colchón de la cama- solo le mostré mi pierna derecha y ya se me quería lanzar encima- suspiraba como una niña que había ganado una medalla por hacer algo perfectamente elaborado- menos mal que te pudimos sacar de ahí con éxito Luis... pero tenemos que tener cuidado ya que mi hermano está echo una furia y yo soy por supuesto la sospechosa Nº1, menos mal que estamos en otro país- me mira guiñándome un ojo mientras yo estaba acostado en la cama matrimonial, habíamos llegado exactamente 5 días y me había recuperado lo suficiente, sigo estando a la defensiva, pero cada vez me suelto más con las chicas que me rescataron.

-no dudo de tus dotes chacha, pero que tenemos que estar pendientes de todo lo que pasa con ese maltratador- mira por la ventana de la habitación la chica de cabellos rojos que acababa de entrar en la habitación en modo silencioso, mientras se quedaba viendo hacia las afueras de esta, pasando unos ligeros cinco minutos se volvió dirigir hacia mi, y sonrió como ya era costumbre- estoy tan contenta de que por lo menos a ti, te hallamos rescatado- mira tristemente a la persona que se encontraba al lado de mis pies y se sentó en la silla mecedora que estaba al frente de nosotros.  

- no podemos hacer nada perla- hubo un silencio pesado 

-¿habían otros como yo?- pregunto tenso de lo recuerdos tan vivos e impactantes que había tenido 

- si, claro- responde perla, la chica de cabellos negros largo 

-¿ y les hacían lo mismo que a mi?- sigo curioseando, sabiendo las respuestas 

- pues no lo sabemos por que no estaban en ese departamento, tu eres el único al que logramos ver, pero sabemos por unas conversaciones intercambiadas por los chicos que hay mas personas que son secuestradas, encarceladas o vendidas...- un largo suspiro surgió de la boca de perla- no se como a ese bobo no le da sentimiento todo esto que hace...

-¿sera por que no tiene corazón?-ironizo mientras me acuesto a ver el techo 

-no te pon...-

-chicas vengan a comer, además tienen visitas- grita una señora desde la plata baja interrumpiendo la conversación

-¿visitas?¿nosotras?- se mira de una a la otra esperando algún comentario pero solo llegaban a intercambiarse miradas desesperantes.

-¿podrían bajar?, no queremos que suba nadie para luego ser descubiertos y meternos en u buen lió- sugiero mientras me paraba y me metía debajo de las sabanas anchas, nadie sabía que me encontraba aquí.

- tenes razón pequeño bribón- me abrazan y guiñan un ojo las dos, para luego irse de la habitación dejándome completamente solo.

Ya habían pasado dos horas y las chicas aun no subían, con un poco de hambre y cuidado me levanto de la cama sin hacer ruido y salgo de la habitación, pegado a la pared y viendo constantemente hacia adelante y hacia atrás mientras mas avanzaba al primer escalón de bajada, se oían voces y yo solo podía pensar en una cosa 

escuchar lo que decían

bajando de uno en uno sin hacer rechinar la madera que aveces crujía bajo mis pies, me acerque a la primera puerta abierta que es donde provenían el intercambio de palabras 

-¿donde lo estás escondiendo perla?- preguntaba en voz baja un hombre de voz no muy profunda pero ronca.

-no se de que me hablas manuel, llevamos horas en este mismos circulo vicioso y no terminamos nunca, tú sigues insistiendo y te sigo respondiendo lo mismo, no se a donde se fue el perro de garel 

- pero que sospechoso que a la misma vez que ustedes se van, el desaparece...-me asomo un poco y veo que esta despaldas de mi, por lo que no me puede ver, se que les está haciendo caras severas a las chicas por como asienten- díganme la verdad, si el jefe se entera, no pisarán su casa y el castigo de ese pobre chico será ... no quiero imaginarlo, saben como es el. 

- lo sabemos, pero no te podemos decir algo que no...-marian me mira al momento y se sorprende de verme ahí, a pocos centímetros del enemigo- ...sabemos- termino un poco mas bajo de lo que había comenzado aun viéndome sorprendida 

el chico se le quedo viendo por un momento con cara ceñuda- ¿que miras tanto marian?- se voltea rápidamente a mi dirección, pero me oculto lo suficientemente ágil para que no me viera-¿que tanto mirabas para allá?- preguntaba e insistía el otro, en unos cuantos parpadeos empezó a oír pasos que venían hacia mi, alarmado por que iba hacer descubierto me preparo para lo peor, no era capaz de moverme ya que cualquier sonido podía hacer que la acción de aquel sujeto mas rápida. 

-¿para donde vas manu?, estas hablando conmigo- perla lo agarra en el último momento de salir de la habitación  y lo vuelve a meter a donde estaban- es de mala educación dejar hablando a la gente sola- lo agarra fuertemente del brazo.

sin hacer ruido nuevamente me encamino a la habitación, al entrar lo primero que hago es sentarme en la cama y cerrar poco a poco los ojos mientras me dejaba caer en la cama.

-¿seguro que va a funcionar chicas?- es arriesgado lo que están haciendo, ayudándome a escapar...

- ya lo habíamos decidido...¿tú estás listo? mira que con esas heridas de broma podes caminar, menos mal que las medicinas han ayudado un poco- suspira aliviada marian 

caminábamos por el pasillo  en modo silencioso - ¿como haremos con el guardia?- pregunto después de que vemos una silueta en la puerta de la salida 

-¿te acuerdas de que somos mujeres no? tenemos el poder, tu solo observa, va a salir mejor que el primer intento ya que tenemos la ayuda de perla... acuérdate de todas las fases del escape Luis, son muy importantes, la primera cual es?- me pregunta mientras nos paramos atrás de una pared lejos de los guardias de la puerta- seducción- respondo como grabadora, me lo hacia recordar cada cinco minutos- muy bien Luis, y ¿la segunda?- espera impaciente, se que se acababa el tiempo - esconderse- la miro y ella sonríe- muy bien tu solo espera aquí, que ya traemos donde te vas a esconder, me guiña un ojo- vamos perla nos queda media hora para que los bobos de los guardias de la puerta de Luis despierten del suero que les dimo- me mira- sin hacer ruido- susurra, me apunta con un dedo  y luego se van a donde estaban aquellos sujetos ....