Levanto la cabeza y la beso. - ¿Cuando nos vamos?
-Pues... Ya. Me han dicho que vayamos cuanto podamos para arreglar los vuelos.
Un par de horas después
-Tengo una buena y una mala noticia. ¿Cual quieres primero?- Dice cuando se acerca a mí.
-La buena.
-Me han dado los billetes, salimos en media hora y llegaremos al anochecer.
-¿Y la mala?
-Tenemos vuelos separados.
-¿Qué? P-Pero no...
-Lo sé, he intentado que nos den el mismo vuelo pero no pueden. No te preocupes, he llamado a los chicos. Estarán allí esperándote hasta que mi avión llegue.
Pasamos el control.
-¿Quien sale primero?
-Tú. El mío sale en una hora.- La abrazo.
-Te esperare en la terminal de llegadas.- Le digo.- E iremos a ver esa película.
Ella asiente y me sonríe.
-¿Recuerdas cuando Ana y Joshua volvieron de Canadá?- Rio al recordarlo.
-En cuanto esos dos vieron a Max y a Mark gritaron y se tiraron encima con todo el equipaje.- Digo riendo.
-Gritaban tanto que les echaron del aeropuerto.- Recuerda Alessa riendo también.
Los altavoces dicen algo en ruso.
-Bueno. Es la hora.- Dice Alessa. Me acompaña hasta que los de seguridad no la dejan pasar.
-Te veo en la terminal.- Ella asiente.- Prepárate porque me voy a tirar encima tuyo. - Le digo sacándole una sonrisa.
-Pienso gritar hasta que nos echen.
-No te atreverías. - Digo sonriendo.
-¿Apostamos? - Dice tendiéndome la mano.- Si lo hago, me haces un Striptease.
Miro alrededor nerviosa, hasta que recuerdo que no pueden entendernos.
-Si no, me lo haces tú a mi.- Le digo mirándola desafiante y agarrando su mano.
-Estoy deseando llegar.- Dice sonriendo pícaramente.
El guardia le dice algo a Alessa, parece impaciente. Alessa me abraza y yo me mezclo con la gente.
En el avión me toca ventana así que miro las nubes. Me aburro sin tener a Alessa conmigo pero me divierto un poco imaginando el Striptease que me va a hacer, pensando eso se me viene a la cabeza como me ato las manos a la cortina mientras jugaba con mi cuerpo. Aparto ese pensamiento de mi mente, esto no es lugar para pensar esas cosas. Cojo el móvil y pongo algo de música mientras leo unos fanfics que tengo descargados.
Un par de horas después
Bajo emocionada, quiero decirle a Vero sobre la apuesta para que lo grabe. Cuando salgo de la terminal todo está en silencio, veo a Vero y a Dani junto a Ana, Mark, Joshua y Max. Todos miran al suelo, salvo Vero que tiene la mano en la boca. Dani me mira con pena y automáticamente baja la mirada. Siento como si se me callera el alma a los pies. Me acerco cautelosamente, mi pulso se acelera a medida que acorto distancia. No son solo ellos, todas las personas del aeropuerto tienen la misma mirada perdida y fija en el suelo.
-¡Sara!- Oigo la voz ahogada de Vero. Sale de su trance y corre hacia mí. Solloza en mi hombro y me aprieta con fuerza.
-Lo siento.- Dice entre lágrimas. Yo intento sacar una sonrisa.
-Vero tranquila. - Digo mirándola a los ojos, ella mira a todas partes menos a mi.- Respira.
Ella coge aire con fuerza.
-¿Qué ocurre?
Veo por el rabillo del ojo como Ana busca consuelo en Max y un poco más allá un hombre vomita en el suelo.
-El aeropuerto.- Dice Vero entre lágrimas.- Ha sufrido un atentado.
-¿E-El aeropuerto? - Digo atropelladamente. -¿Y el avión? ¿Q-Que pasa con el otro avión?- Digo prácticamente gritando. No no no no nononono... ¡NO! Es lo único en lo que puedo pensar, como si lo pensara demasiado se hiciera realidad.
-Los periódicos rusos acaban de publicar algo.- Dice Mark. Lee rápido con los ojos.
-¿Qué dice?- Le digo impaciente.
-Cuando a ocurrido el atentado el avión llevaba media hora de vuelo.- Vero sonríe, pero Mark no lo hace.
-¿Pero?
-Pero... Los terroristas han enviado a un par de suicidas... Han hecho algo en los motores aun no se sabe el que. Han visto estrellarse el avión en el pacífico.
Mi mente automáticamente busca excusas, esperando que todo esto sea una broma pesada.
-Pero el avión no pasa por el pacifico.- Digo desesperada por que sea otro avión.
-Se habrá desviado, probablemente cuándo los motores dejaron de funcionar se desviaron del camin...- Mark deja de hablar cuando Joshua le tapa la boca.
-Es suficiente.- Dice Joshua.
Vero me abraza de nuevo, igual que Ana. Yo despierto de mi shock.
-¡P-pero si han caído al océano se estará ahogando!- Grito.- ¡Tenemos que hacer algo! ¡Tenemos que ayudarla!
Todos notan el pánico en mi voz, yo también pero no me importa. Ana trata de calmarme.
-No podemos ir allí pero podemos buscar algo de información.
Ana consigue que un trabajador de la aerolínea nos diga algo.
-Bueno verán... Yo no quiero que se extienda el pánico...
-Por favor, no vamos a decírselo a nadie.
-E-Esta bien... Bueno la cosa no está muy bien... En principio deberían ir a auxiliar a las víctimas del avión, pero debido al atentado los equipos de rescate no dan a basto...
-¿Debido al atentado? ¿Estás diciendo que nadie ha ido a ayudarles? ¡Por el amor de dios, el avión se ha estrellado hace ya una hora!- Grita Vero.
-Espera. ¿Y nuestros equipos de rescate? - Pregunta Joshua.
-Bueno pertenece a suelo Ruso así que la ley no nos permite intervenir. Lo sien...
-¿Que mierda de ley es esa?- Oigo gritar a Vero.
Una hora... Hace una hora que Alessa se está ahogando en el pacifico. Aunque hubiera nadado, quien sabe a qué distancia estará de tierra firme. ¿Y si alguien ha entrado en pánico y la ha ahogado intentando permanecer a flote? ¿Y si no ha podido quitarse el cinturón? ¿Y si no ha sobrevivido a la caída? Una hora... Hace una hora que el avión de a estrellado y nadie va a ayudarles... Noto como el suelo da vueltas.
-¡Sara!- Gritan cerca de mí. Noto algo frió que choca contra mi cara.- ¡Por favor un medico! ¡Un med...!
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¡Ámame Como Yo te Amo! ¡2! - Diferentes.
De TodoAlessa y Sara por fin están juntas, parece que todo va bien y que los científicos han desaparecido del mapa. Pero nunca se sabe... Un accidente, problemas familiares, unas verdades mal dichas y una tercera persona puede romperlo todo. ¿Podrán seguir...