No estoy enfadada, tan solo decepcionada, no pensé que Louis era ese tipo de chicos que cornean a sus novias en una fiesta.
Está imagen me ha recordado a cuándo encontré a Harry en aquella habitación, me sabe mal, muy mal, no por mi, si no por su novia, ella es una buena chica, y quiere mucho a Louis aunque se vean poco, ya que ella estudia en California.
Toda la casa me observa, omito lo que voy a decir por que no quiero dejar en evidencia a mi mejor amigo, ni tampoco quiero que Yess le de una bofetada en la cara, al enterarse de que tiene novia.
Ella tampoco es de esas tías que van arrebatando los novios.
Noto como unas manos cálidas agarran mi brazo, y me sacan de la casa, la música empieza a sonar de nuevo, y sigue la fiesta.
-Tranquilizate Valeria- Dylan me da aire.
-No estoy nerviosa por mi, si no por el daño que pueda causarle a su novia, además Louis no es así, y sé que no lo hace a drede- Le digo a Dylan moviendome de un lado a otro.
Louis sale corriendo de la casa hasta encontrarse conmigo.
-Valeria, no te enfades...yo...no sé que acaba de pasar- Le miro muy enojada.
-Apestas a alcohol Louis, jamás pense que eras ese tipo de chicos, estaba muy confundida-Digo dándome la vuelta.
-Yo ni siquiera me he dado cuenta de lo que hacia hasta que he escuchado tu voz- Le miro de brazos cruzados.
-Todos somos conscientes de lo que hacemos a cada momento, a no ser que te hayas...¿Te has drogado?- El niega.
-¡No!, ¡Claro que no!, ¡Volvamos al hotel, te lo explicare!- Niego.
-No pienso volver contigo al hotel en esas condiciones, deberías dormir hoy aquí, y mañana recogerme en la WCU, pasare allí la noche, ¿Te importa Dylan?- El nieta patidifuso.
-No claro que no, puedes dormir en mi habitacion, yo dormire abajo- Miro hacia la puerta, Yess sale muy atorada.
-¿Valeria?,¿Que ha pasado?- Niego, y miro a Louis, esta desconcertado.
-Nada, solo estoy cansada, y me vuelvo a la WCU con Dylan, mañana nos vemos- Ella asiente, y agarra del brazo a Louis.
-¡Vamos Louis, entra!- Le dice ella.
-Si está bien, entra,ya nos vemos- Digo agarrando el brazo de Dylan y alejandonos de la casa de fraternidad.
Todo esto ha sido un auténtico caos, sabia que algo malo iba a pasar.
-¿Estás segura de que quieres pasar la noche en la WCU?, puedo llevarte al hotel si quieres.
-No, no te haré conducir a las cuatro de la madrugada, después de una fiesta, sería ir a la boca de el lobo- El asiente.
-Bueno...¿Por qué te has enfadado tanto con Louis?- Le miro.
-Porque el siempre hablo mal de esos chicos que corneaban a sus novias en las fiestas después de un par de copas, además el siempre mostró ser diferente, y repito, que no es por mi, si no por su novia, que está muy unida a él-Dylan mete sus manos en los bolsillos, y yo empiezo a temblar del frío.
Dylan se quita su cazadora y me la hecha por los hombros.
-Gracias- El sonríe.
-Es problema de el si quiere hacerle eso a su novia, tampoco ella tendría por que enterarse- Le miro confusa.
-No se trata de eso, se trata de que llevan mas de dos años y pronto van a casarse, aún no hay fecha, ni están prometidos, pero Louis ya me ha sugerido varias veces el tema- Dylan mira al frente soltando vapor por sus labios.
-Aún así, sigue siendo problema suyo, no deberias de preocuparte- asiento.
-Tienes razón, bueno, cambiemos de tema, he visto como mirabas a Yess, ¿Te gusta?- El niega.
-Claro que no, solo es mi amiga, lo ha pasado muy mal...imagino que no te habra dicho nada aún, pero no quiero que le de ninguno de sus bajones, por eso siempre trato de animarla a todo lo que proponga- Miro a Dylan extrañada.
-Me estas asustando, que ha pasado- El suspira.
-Creo que yo no soy quien para contartelo, debería contartelo ella, eres su mejor amiga, y si le preguntas confiara en ti, solo te pido que la apoyes en sus desiciones te gusten o no,por lo menos hasta que pasen un par de meses- Estoy preocupada y intrigada.
-Si está bien, gracias por...adelantarme algo, hablaré con ella mañana, o quizás pasado, así podre contarle sobre la boda de mi padre- El asiente.
Ya estamos en la WCU subimos las escaleras hasta el tercer pasillo, y la primera puerta a la izquierda, habitación 100.
-Aquí es, yo entrare a coger alguna manta y almohada y dormire abajo, en el salón- Asiento entrando tras el, la habitación no es gran cosa pero está bien para pasar la noche, recuerdo que la mía era algo mas grande.
-No te preocupes, aún no tengo sueño- El sonríe.
Abre el armario y saca una manta, junto con una almohada.
-Voy a entrar al baño a ponerme algo más comodo, puedes coger algo de la nevera si te apetece, o no se, como si estuvieses en casa- Asiento satisfecha y el se entra al baño.
Oigo sonar la ducha, abro la ventana, una corriente de aire frío inunda la habitación.
Me siento sobre la cama, lo cierto es que es muy comoda, pero tampoco quiero que Dylan duerma abajo en el salón, tal vez si cogemos varias mantas...sí, ya se lo que haremos.
Al rato Dylan sale con su pelo mojado, y con un pijama de cuadros de manga larga.
-Oye, ¿No tienes saco de dormir?- El asiente.
-Si creo que mi madre me trajo uno para la acampada- Empieza a rebuscar en el armario hasta que lo encuentra.-Aquí esta.
-Podrías dormir aqui...si quieres...tampoco es...bueno no se...me refiero a que...- El me mira.
-Está bien, dormire en el saco, es cómodo- Asiento, me he puesto muy nerviosa por un momento.-Toma he cogido este pijama que se dejo aquí Yess hace un par de semanas, podrías ponertelo- ¿Yess y Dylan habran tenido sexo?
-Oh gracias, voy a cambiarme.
Entro al baño, me desnudo, y me pongo el pijama, me queda un poco largo, pero apenas se nota.
Salgo de la habitación y Dylan prepara su saco.
-Bueno, he destapado tu cama- Asiento satisfecha, y me tumbo, el apaga la luz y se mete en el saco.
-Buenas noches Dylan- El suspira.
-Buenas noches Valeria- Sonrío.
Me da pena dejarlo ahí, en el suelo, después de todas las veces que dormimos juntos, y se que mi consciencia no va a quedarse tranquila.
-¿Dylan?
-¿Si?
-Ven aquí- El ríe, y rápidamente se acurruca a mis espaldas rodeandome con sus brazos.-Buenas noches.
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Aprendiendo a Amar
RandomTodo comenzó en el fallecimiento de mi madre, todo era genial, yo vivía en Estados Unidos, mi padre era un hombre viudo pero capaz de todo, hasta que en un viaje a España conoció a una mujer, que le hizo colgar sus zapatos, todo seria genial, con un...