Aprendiendo a Amar

Capitulo 44

Por fin llegamos a España, son las 5AM, y no creo que mi padre esté despierto.

Por suerte, aún reservo las llaves de la casa, así que cuidadosamente entramos a la casa, y acomodamos todas las maletas en mi antigua habitación.

Vamos hacia la cocina, y preparamos unos cafés, no tengo sueño, porque la mayor parte del viaje me la he pasado durmiendo, pero Harry debe de estar agotado.

-Harry, deberías echarte a dormir- El toma su café.

-Sí, me echaré a dormir, ¿Tu vas a quedarte despierta?- Asiento y acaricio su mejilla.

-Descansa, cariño- Le doy un dulce beso,y antes de marcharse se vuelve a acercar.

-Yo quiero dormir contigo- Hace un puchero con la cara y empiezo a reír.

-Ay, idiota, vete a dormir ya- Los dos reímos, el vuelve a besarme, y entra en la habitación.

Paseo por la casa, termino mi café y respiro profundo el aire, me trae muy buenos recuerdos, el estar aquí de nuevo, el volver, es como volver a mi adolescencia una vez más, dónde todo comenzó.

Oigo como alguien abre la puerta con las llaves, ¿Quién será a estás horas?.

Me acerco a la puerta, y Connor aparece dando tumbos, casi sin saber dónde se encuentra, no me puedo creer que se haya pasado bebiendo la noche, ¿Lo habrá echo mas veces?, ¿Por qué lo hace?, ¿Que me he perdido al alejarme?

-Va...Valeria...- Dice cerrando la puerta y tambaleandose.

-Connor, ¿Que cojones haces?- El se encoje de hombros.

-Voy...Voy...a la...cama- Dice pasando por delante de mi, entra a su habitación y cierra la puerta.

¿Tanto me he perdido?, ¿Estará mal con Laura, su novia?

Estoy ansiosa porque todos se despierten y pueda darles la sorpresa de que estoy aquí, y el primero en hacerlo es mi padre Thomas.

Entra a la cocina y abre los ojos de par en par, y en menos de un segundo me encuentro rodeada por sus brazos.

-Oh cariño, ¡ Que sorpresa que estés aquí !, te necesitábamos en casa- Le miro sonriente, y veo como una pequeña lagrima recorre su mejilla.

-¿Todo está bien papá?- El mueve la cabeza de un lado a otro.

-Connor llega todas las noches bebido a casa, lo peor es que al día siguiente, no recuerda casi nada, solo que bebió y que no llego en condiciones a casa, no sabemos que le está pasando.- Le miro y suspiro, nunca debí de haberme alejado de ellos.

-Hablaré con el papá, pero no he venido para pasarla mal, recuerda que me quedo muy poco tiempo, y quiero aprobecharlo al máximo- El sonríe y vuelve a abrazarme.

-Tienes razón cariño, iré a despertar a Niall, no ha parado de hablar de ti desde que le dije que venías- Sale por la puerta, y a los cinco minutos unos pequeños pasitos retumban por el pasillo.

-¡Tataaaaaa!- Grita Niall corriendo hasta mis brazos, yo me agacho y lo subo hasta mi pecho.

-¡Hola cariño!, cuantas ganas tenía de verte- Digo besándo su frente.

El baja de mis brazos y corre de nuevo hasta la habitacion gritando.

-¡Maaaamaaaaaaaaaa!- Yo empiezo a reír y Thomas prepara su café.

-Papá, no he venido sola- El se gira sorprendido.

-¿Vino Harry?- Asiento, y el aplaude.- Genial, lo pasaremos genial cariño.- Le miro y me acerco a el.

-Papá, tengo que contarte algo- El me mira, y después mira mi mano.

-¡Oh dios mío!, ¡Valeria!, ¡Me alegro muchísimo!- El me rodea con sus brazos, y varias lagrimas circulan por su rostro.

-Aún no quiero decirles nada a Rebecca y a Connor, esperaré unos días- El asiente y termina su café.

-Tu secreto está a salvo conmigo- Yo sonrío.

Toda la familia está despierta, Harry ya ha saludado a mi padre y a Rebecca, y por fin a conocido a Niall, la unica persona que aún no se ha despertado es Connor, y estoy muy muy enojada con el, tanto, que cuando se despierte le haré el vacio completamente.

Mientras Harry se duchaba yo me senté en el bater a contarle lo de la noche anterior, cuando Connor llegó a casa, el esta seguro de que tal vez tuvo un mal día, le dije lo que mi padre me había contado, y me dijo que tratase de hablar con el.

Ahora me encuentro sentada en el sofá con Niall en mi regazo, mientras abre los regalos Harry graba un vídeo.

-¡un toche!- Grita, todos reímos por su forma de hablar.

Niall está muy contento jugando con sus juguetes, Rebecca Thomas Harry y yo nos reunimos en la cocina mientras tomamos unos refrescos.

-Me alegro de que hayas venido Harry, es un honor tenerte aquí- El ríe y Rebecca acaricia su pelo.- Eres uno mas de la familia.

-Rebecca, debo decirte algo- Le digo, miro a mi padre y el asiente.- Voy a casarme con Harry- Y le enseño mi anillo.

Rebecca no para de dar saltos y reír, no la había visto tan nerviosa y contenta desde el día de su boda con Thomas, cuando todo esta más calmado y la familia se ha dispersado por la casa, Harry y yo nos salimos al porche a tomar algo.

-¿Le dirás algo?- Niego.

-Voy a ignorarle, mi padre estaba llorando mientras me lo contaba Harry...- El suspira.- Nunca tuve que alejarme de ellos...- Ahogo el llanto.

-Lo siento mucho Valeria, sé que fue culpa mía, culpa de mis celos- Yo niego y sonrío.

-Te amo igual.- Beso sus labios, y la puerta de la casa se abre.

Los dos nos giramos hacia atrás y Connor aparece casi sin poder andar.

-Buenos días, me alegro de que estéis aquí- Dice mirándome fijamente, dudo mucho que no recuerde lo que pasó anoche.

-Nos alegramos de estar aquí Connor, me alegro de verte- Dice Harry abrazandole.

Yo ni siquiera me levanto de mi silla para ir a saludarle, sin embargo Connor se acerca y besa mi mejilla, no doy respuesta, ni la daré.

Rebecca termina de preparar la mesa y nos sentamos todos a comer.

Hablamos de temas de la vida, de como nos ha ido todo este tiempo, y el único que parece no tener lengua es Connor, porque no ha abierto la boca en todo el rato.

Recojo la mesa con Rebecca, y mientras ellos, Niall y Harry duermen la siesta me quedo en el salón con Connor.

-Valeria, lo de anoche...

-Sht- Digo antes de que termine.- No me apetece escucharte.

-Deberías- Niego.

-Se que no es la primera vez que lo haces, me prometiste que me llamarías si algo iba mal, y no lo has echo, y es evidente que muy bien no deben de ir las cosas- El suspira.

-Me siento fatal, no me gusta que me veas en ese estado.- Levanto el labio haciendo una mueca y me alejo de el.

-no solo me has echo daño a mi, también se lo estás haciendo a los que te mantienen en casa y a los que están contigo todos los días- Digo antes de entrar a la habitación y tumbarme en la cama con Harry.

Enrollo mis piernas en su abdomen y me agarro a el.

-Te amo- Susurra.

-Yo más- Y tras eso, beso su frente.