Y tú ¿Qué harias por un amigo? X-over Harry Potter Y Crepusculo

CAPITULO 4 LA SANGRE DE UN MAGO

Desde aquella pelea ya habían transcurrido 3 largos y dolorosos días. Era la mañana de un sábado tan común y corriente como todos, a excepción que era el cumpleaños número 19 de Hermione Granger, aquella castaña no tenía ganas de levantarse de su cama, solo quería estar sola en su propio mundo, esos tres días habían sido los peores, Harry y Ron la ignoraban pir completo, parecía como si ella no existiera... se sentía un fantasma vagando por los pasillos de ese antiguo castillo, quería salir corriendo llegar a lado de sus padres y tomar el primer vuelo a Australia... Si no hubiera sido por el apoyo que le brindo Andrew Sullivan y Camyl Diggory ella hubiera huido. La Castaña decidió levantarse, era su cumpleaños y tenía que pasarla bien, aunque no fuera a lado de sus dos mejores amigos, llego al gran comedor para desayunar y ahí sus amigas Luna Lovegood, Ginny Weasley, Camyl Diggory y por supuesto Draco Malfoy, le entregaron regalos y un pequeño pastel, aparentaba estar feliz mientras buscaba a sus amigos, tenía la esperanza de que llegaran con un gran regalo y que le dijeran "borrón y cuenta nueva"... se decía fácil pero difícil en la realidad, después de muchos abrazos y felicitaciones por parte de varios alumnos y sin la presencia de Harry y Ron, salió del Gran comedor con las manos llenas de regalos para ir a ver a Hagrid.
En uno de los pasillos vio a dos alumnos corriendo los cuales chocaron con una joven, a causa de el golpe la chica cayo junto con los libros que llevaba, y ni siquiera se tomaron la molestia de ayudarle a recogerlos, Hermione de inmediato corrió para ayudarle dejando en el piso sus regalos
-¿Estas bien?-pregunto la castaña,-son unos mal educados-dijo muy molesta la cumpleañera, la joven aparentaba 15 años de edad tenía el pelo corto hasta los hombros de color dorado, sus ojos eran color miel, y su piel blanca como la nieva, suave y tersa como la seda y el algodón Hermione al verla, se sorprendió mucho con la belleza de aquella niña.
-Gracias por ayudarme-respondió, su voz era como una melodía, dulce y tenue que te envuelve para arrullarte, la castaña solo le sonrió, la niña observaba los regalos de la castaña, y le pregunto-hoy ¿Es tu cumpleaños?-Hermione asintio al mismo tiempo que recogía sus regalos y ambas empezaron a caminar
-Me llamo...-iba a decir su nombre pero la pequeña la interrumpio.
-Si, eres Hermione Granger, todo en Hogwarts te conoce, y yo... se podría decir que soy Fan de Hermione Jane Granger-la castaña se sintió muy alagada con las palabras de la niña, ella nunca había tenido fans los únicos que recibían el crédito por haber combatido a Voldemort eran Harry y Ron.
-Gracias- Respondió sonrrojada - ¿Cuál es tu nombre?
-Natalie McDonald- Respondio- Curso el quinto año y estoy en Gryffindor.
-Soy tan distraída que nunca te había visto-dijo muy apenada.
-No te preocupes no eres la única persona que no se percata de mi presencia-dijo Natalie-Ten un bonito Cumpleaños- Felicito con una gran sonrisa.
-Gracias, pero segura ¿que estas bien?-Hermione seguía muy preocupada por Natalie ya que el golpe fue duro.
-Si, tranquila- Se despidió y se fue en sentido contrario al camino de la castaña.
Hermione aun seguía impactada con la forma de ser de Natalie McDonald. Siguió su camino hasta la cabaña de Hagrid, el semigigante se encontraba tocando la flauta sentado en los escalones de la entrada de su casa y al verla inmediatamente la dejo a un lado y le dio un fuerte abrazo a su amiga
-Hermione ¡Feliz Cumpleaños!-exclamo muy contento.
-Gracias Hagrid-dijo muy sonriente- Pero cuidado con los regalos, porque si se arruinan Ginny y Luna me cuelgan.
-Lo siento- pero siéntate por favor-La castaña se sentó en un escalón-Esto es para ti lo hornee con mis propias manos, espero te guste- Era un pequeño pastel con las letras Feliz Cumpleaños, Hermione al verlo le dio un fuerte abrazo
-Gracias-volvió a agradecer y dio un gran suspiro y la sonrisa se le borro de los labios, al recordar la pelea con sus amigos.
-No estés triste, pronto se les pasara-dijo para aumentarle los ánimos a su amiga, ella sonrió débilmente.
-Tienes razón, hoy es mi cumpleaños y tengo que estar...¡Feliz!
-Esa es mi Hermione-dijo muy entusiasmado el semigigante
-Pero, quiero caminar-miro al bosque prohibido.
-Entonces vamos-dijo levantándose
-No Hagrid, quiero ir sola, por favor- Hagrid la miro de reojo, no estaba de acuerdo en eso, pero debia darle espacio y ella tenia que despejarse.