Adoptada Por Youtubers. (EDITANDO)

17

Han pasado días después de lo sucedido y Oliver estaba mejor que nunca. Hoy desperté e hice la rutina de siempre.

—Buenos días Alejandra, ¿quieres desayunar?— preguntó Frank al verme.

—Si, por favor— respondí sentándome en la mesa junto a los demás —hace tiempo no hablabamos, guapo— le guiñe a Frank y este se incomodó.

—¡Hey mocosa! Calma tus hormonas— gritó Alex molesto.

—No te pregunté.

—¡Alejandra!, debes de probar lo que cocinó Frank, cocina diez veces mejor que Rubius— gritó Mangel emocionado.

—Mangel baja la voz, Rubius te escuchará— respondió Willy.

—Alcancé a escuchar algo— respondió Rubius en la puerta de la cocina, haciendo que todos se asustaran.

—Mangel, estas re muerto— dije.

—Con razón ya olía a podrido— se burló Alex.

—¡Enano de mierda!— Mangel se molestó y siguió a Alex por toda la cocina.

—Yo no voy a pagar el funeral— dijo Samuel al ver como iban las cosas.

Probé el desayuno de Frank.

—¡Es verdad, Frank cocina mejor!— grité llamando la atención de Rubius.

—¡La traición!— se enojó Rubius —Déjame probar— Rubius me quitó mi tenedor y probó lo que Frank había preparado— sabe re bien, no lo niego— luego de eso Rubius sonrió y me empujó para comer más.

—¡Samuel!, nadie morirá aquí— respondió Frank riéndose a carcajadas.

—Perfección— dije observando a Frank.

Esta vez, Samuel me llevo a la preparatoria, baje del auto y voltee a verlo para agitar mi mano diciéndole adiós.

Camine hacia la entrada, pero sin darme cuenta me tope con un chico.

—¡Lo lamento!— respondí al verlo.

Alto, no lograba ver bien su tez ni su cabello, su ropa era completamente negra y no dejaba distinguirlo. Al parecer tenia prisa, salió corriendo.

Sentí una curiosidad enorme.

Entre a mi aula. Me senté en mi lugar y mire el banco de Oliver vacío, ¿llegara tarde hoy?
Saque un libro y me puse a leer hasta que comenzaran las clases.

Al terminar las clases salí corriendo, miré él auto de Willy, corrí hacia el y me subí, cerré la puerta luego me coloque el cinturón de seguridad. Willy arranco sin decir nada, voltee a verlo, estaba molesto muy molesto.

—Willy, ¿qué sucede?— lo llame para que me mirara, el me negó y mire como sus ojos se cristalizaban.

Esto iba en serio, algo realmente malo había sucedido.

—Samuel... —susurró limpiando sus lágrimas.

—¿Qué sucede con Samuel?— pregunté confundida y asustada.

—Esta en él hospital— respondió sin apartar la mirada de enfrente.

—¡¿Porqué?!— grité asombrada.

—Tenía dos heridas en el estómago, al parecer le encajaron una navaja dos veces, el solo salió a la tienda sin avisar, hasta que la vecina tocó nuestra puerta y nos dijo que Samuel estaba inconsciente en la calle pero ya había llegado ayuda, todos salimos corriendo, pero al llegar ya había sido llevando en una ambulancia— explico.

—¡Quiero verlo! Por favor llevame con él— alce la voz.

-No podemos verlo, hasta mañana se podrán hacer visitas— explicó.

—Aun así, llevame— respondí.

Willy asintió y nos dirigimos al hospital. Al llegar bajé corriendo del auto y Willy fue detrás de mi.

Mire a Rubius, tenia sus dos manos en los ojos, Mangel jugaba con sus dedos nervioso, Alex lloraba mientras abrazaba a Frank y había un chico más que abrazaba a Lana, era Luzu, supongo ya había regresado de su viaje.

Lana me miro y me hizo una seña de que fuera con ella, fui y me senté a un lado suyo. Estuvimos platicando ella, yo y Luzu.

Seguíamos en la sala de espera. Willy me abrazaba, estaba a punto de dormirme pero escuchamos la voz del doctor.

—Familiares de Samuel.

Willy se puso de pie y Frank se sentó a un lado mio para abrazarme.

—¿Él estará bien?— pregunto Rubius.