Desperté quejandome por el sonido de mi celular. Tarde en encontrarlo ya que mis ojos tardaban en acostumbrarse a tanta claridad.
-¿Hola? –respondí con voz ronca, de mala gana.
-¿Te desperté? -dijo una voz masculina conocida.
-¿Nalgas? -escuche su risa a través del cel.
-Sí, soy yo.
-Sí, me despertaste. ¿Cómo rayos conseguiste mi número?
-Estoy en el equipo de fútbol con todos tus amigos, no fue difícil.
-¿Que quieres? –Tengo sueño imbécil, habla rápido.
-Saber cómo amaneciste. Y disculparme por arruinar tu vestido.
-Primero, amanecí acostada y con los ojos cerrados, y segundo, te dije que no importa. Ni siquiera pensaba ponérmelo otra vez, además el dinero salió de los bolsillos de Harry.
-Primero, que graciosa. Segundo, me alegro, aunque te quedaba muy bien el vestido.
Bufé- Todo lo que me pongo me queda bien.
-De eso no hay duda... Bueno, te veo luego. Solo llamaba para escucharte.
-Ya me escuchaste suficiente. Bye -colgué. Nalgas tienes una voz muy sexy.
-¿Con quién hablabas? -brinque del susto.
-Harold me asustaste -reí- Con Nalgas.
-¿Hablas con otro chico mientras estas conmigo en la cama? -puso cara de ofendido.
-Estoy en la cama junto a ti, no contigo. Y si.
-Es lo mismo, Puta -comenzó a hacerme cosquillas.
-Suéltame inútil -dije entre risas, lo empuje con mi pie.
-Chico, con respecto a lo de un novio, conozco una página de citas...
-¿Estás loco?
-Puedes conocer a muchos chicos, tal vez encuentres a tu príncipe azul -hizo una vocecita gay. Ni siquiera sé por qué le dije lo de un novio, yo no quiero uno, yo no necesito uno. Tengo a Zayn, que es mi juguetito, eso es suficiente.
-Yo no quiero un príncipe azul. Y por esas páginas hay muchos acosadores.
-Tienes razón... mejor no. Eso es solo para chicos –estaba acostado sobre su espalda, mirando hacia el techo, una mano sobre su pecho desnudo y otra sobre el edredón. Yo estaba acostada sobre mi torso, apoyando ambos codos en el colchón. Observando a Harry, lo cual no era aburrido.
-¿Acosas chicas por internet? –el levanto su cabeza para mirarme graciosamente.
-No, ellas se ofrecen solas.
-¿Has tenido sexo con chicas que conociste por internet? -puse cara de asco.
-No -rio- ellas lo hacen solas por Skype.
-Qué asco –moví mi cabeza varias veces- Tengo hambre, ve y prepárame algo de comer.
-No soy tu sirviente –se sentó.
-Eres mi esclavo sexual.
-Eso quisieras -dijo mientras salía de la habitación, aproveche para ver su espalda bien esculpida. Oh Harold, me gusta tu amistad, me puedo aprovechar de ti. Me acosté de nuevo, pero no cerré bien los ojos cuando Harry entro.
-Ve a ducharte antes de desayunar.
-En seguida jefe -dije y arrastre los pies hasta el baño.
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KenDoll ( con Harry Styles)
RomanceMuere lentamente quien se transforma en esclavo de los hábitos, quien no se arriesga, quien evita una pasión, quien no arriesga lo cierto por lo incierto, quien abandona antes de empezar, quien se queja de su mala suerte, quien no viaja, ni lee, ni...