KenDoll ( con Harry Styles)

Capítulo 15: "El otro uso de la biblioteca"

-Bien chicos, lo que haremos es lo siguiente; Todos pasaran ordenadamente a la biblioteca, tomarán el libro que más les guste, uno que hayan leído, cuando vuelvan explicarán por qué les gusta el libro. ¿Alguna pregunta? –Harry levantó la mano- ¿Si, Styles?

-¿Cualquier libro?

-Cualquier libro, mientras lo hayan leído y esté en la biblioteca. Pueden salir, ordenadamente, recuerden –Eché mi silla hacia atrás y salí de mi escritorio. De camino a la biblioteca, Louis y yo hablábamos sobre la temporada de fútbol, apoyábamos al mismo equipo, lo cual era bueno. Sentí una fuerte palmada en el trasero, antes de poder reaccionar, Harry pasó de prisa frente a mí. Bla, bla, bla… mucha basura literal. Tomé un libro cualquiera leí el prólogo, unas cuantas líneas y el final, y ya tenía mi explicación preparada. Devuelta al salón, convencí a la maestra con mi resumen. No me interesó escuchar ningún otro, porquerías cursis ¡Y la descarada tonta enamorada tiene el atrevimiento de hablar de cursis! Zayn se puso de pie, Romeo y Julieta no era el tipo de novelas que el leía.

-Señor Malik…

-Sólo Zayn, Elizabeth, el señor Malik es mi padre –reímos, menos la maestra.

-Joven Malik, ¿Cuál es el libro que escogió usted?

-Cincuenta sombras de Grey, de E.L James –reí.

-No estoy segura que eso haya estado en la biblioteca –dijo la maestra frunciendo el ceño.

-Sí, lo estaba –Sí lo estaba, pero los nómadas fueron los que lo pusieron allí, junto otros libros explícitos. Eso fue cuando estábamos empezando el tercer año.

-No…

-Maestra, podría dejar de interrumpirme, quisiera hacer esto de una vez por todas. Cuando alguien habla usted debe guardar silencio, ¿recuerda? –reí.

-¿Perdón? –dijo indignada.

-Disculpada –volví a reír- Este libro es mi favorito, debido al misterio o, como el mismo protagonista dice, sombras que rodean al mismo. El conjunto de suceso por el que los personajes principales pasan, solo para demostrar hasta qué punto…–reí en voz alta por su manera de hablar y su cara de soquete.

-Dilo, te gusta porque es un libro erótico y hace que te vuele el cohete–dije riendo y provoqué la risa de los demás en la clase.

-También –me guiñó un ojo.

-Su turno ya pasó, señorita Morris, sí tiene algún comentario, espere a que el parlante termine y levante su mano.

-Ya ni tengo ganas de hablar –me encogí de hombros.

-Styles.

-¿Qué?

-¿Qué? –la maestra levantó una ceja y miró por encima de sus anteojos.

-¿Qué? –volvió a decir el idiota.

-¿Por qué me responde con un qué?

-Perdón, ¿Qué se le ofrece señora Collell?

-Si digo su nombre es porque es su turno de hablar.

-Pero no he terminado -dijo Zayn, quién estaba sentado en una esquina del escritorio de la profesora.

-Ya fue suficiente, puede tomar asiento. ¿Styles?

-¿Qué? –reímos, menos la profesora, claro.

-Es su turno.

-Entonces debió decirlo desde el principio y evitarnos ésta pérdida de tiempo –se puso de pie, la maestra estaba boquiabierta. Los estudiantes de último año pueden ser agresivos e irrespetuosos. En realidad, solo los nómadas, excluyendo a Liam.