Los enormes cúmulos de nubes negras ocultaron al sol, dejando al día con un tono grisáceo y macabro, lo que significaba solo una cosa: Fútbol americano. Me encontraba en el salón de química junto a mi compañero, Niall, a quién se le ocurrió la estúpida idea de comerse un sándwich. Algunas migajas cayeron en la probeta, mezclándose con los químicos, como habíamos hecho mal el compuesto químico, provocó una holeada de humo en el laboratorio.
-¿Por qué tan tarde? –preguntó Liam mientras Niall y yo nos tomábamos asiento en la mesa.
-Tuvimos que quedarnos a limpiar el laboratorio.
-¿Fueron ustedes los que causaron todo el desorden en química?
-Yo no, fue el glotón de Niall. Como soy su compañera, me embarraron su desastre.
-Mira el lado bueno, no tomaremos las horas de matemáticas –dijo Niall excusándose.
-Aún no terminamos, pero tengo hambre –dí una mordida a mi hamburguesa.
-Puedo ayudarlos, no tengo ganas de tomar la clase de Psicología -dijo Liam ofreciendonos su ayuda.
-Como eres un cerebrito al que todos los maestros aman, inventaras un excusa para que yo también pueda salvarme de esa clase –dijo Zayn, Liam levantó una ceja- Vamos, soy tu amigo –ladeo la cabeza un poco, agudizando su ceño- veinte cinco euros, es todo lo que tengo.
-Hecho –dijo Liam riendo. Zayn y Liam nos ayudaron a terminar de limpiar el laboratorio. Luego hicimos una mini fiesta, con la música del ipod de Zayn. El subdirector interrumpió nuestro momento de ocio, le quitó el ipod a Zayn, nos echó del laboratorio y nos exigió volver al salón de clases. Pero por favor, somos seniors, no le hacemos caso al lame botas del sub. Fuimos al campo de fútbol a jugar. A penas caían unas gotas de agua, pero pronto se desbordarían las nubes. Algunos chicos se nos unían a medida que salían de sus clases. Tomé el balón en mis manos mientras organizábamos los equipos, pero alguien me lo arrebató.
-¡Oye! –ocultó el balón detrás de sí.
-No vas a jugar.
-¿Por qué?
-Ya sabes lo que pasó la última vez.
-Fue un insignificante resfriado.
-No vas a jugar y punto.
-No eres mi padre, ni siquiera le obedezco a él. Por qué no te vas a jugar a la hora del té con tu muñequita, y dejas a los seniors jugar fútbol, ricitos de oro –los chicos rieron, Harry se enojó. A mí me vale.
-Me iré a jugar con mi muñequita luego de dejarte en tu casa.
-No me fastidies –intenté quitarle el balón.
-Si no lo haces por las buenas… –soltó el balón y me cargó en su hombro, dejándome pompas arriba.
-Bájame idiota –pataleé- Zayn ¿Podrías echarme una mano?
-Todas las que quieras, donde quieras, pero no me meto en problemas de pareja.
-Jódete, narcisista de mierda –le levanté mi dedo medio, el me lanzó un beso. Harry me tiró dentro del auto, como un saco de papas- Idiota impulsivo.
-No permitiré que caigas en cama otra vez.
-De todos modos caeré en cama, pero del aburrimiento. O tal vez caeré en cama de Malik –Si, esa fue buena.
-Esto no es gracioso –me miró enojado y luego volvió su vista al camino. Ya había comenzado a llover. Yo aquí discutiendo con el imbécil y los chicos divirtiéndose en el lodo.
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KenDoll ( con Harry Styles)
RomanceMuere lentamente quien se transforma en esclavo de los hábitos, quien no se arriesga, quien evita una pasión, quien no arriesga lo cierto por lo incierto, quien abandona antes de empezar, quien se queja de su mala suerte, quien no viaja, ni lee, ni...