Tiene la cara hecha un desastre. Pero, ¿cómo puede seguir teniendo ese rostro tan luminoso y perfecto? Es tan precioso...
Abre los ojos poco a poco. Me mira y sonríe.- Es agradable que seas lo primero que vea nada más despertar. ¿Has estado toda la noche allí sentada agarrándome de la mano?
Suelto su mano con delicadeza. Pero él me la vuelve a agarrar.
- Me gusta mucho que me cuides así, aunque no me lo merezca después de todo.
- Después de todo fuiste tú quien evitó que me pegaran.
- ¿Cómo se te ocurre quedarte allí parada en vez de evitarlo? Te enseñaré a pelear.El estómago de Yoongi comienza a rugir.
- ¿Quieres comer? Voy a hacer una llamada para que traigan algo.
- Vale. Por cierto - Se sienta sobre la cama - ¿dónde estamos?
- En mi habitación del hotel - Digo marcando el teléfono.
- Qué atrevida. ¿Qué pensabas hacerme aquí?
- Igualarte el otro ojo.Yoongi comienza a reír pero enseguida para debido al dolor que le produce el golpe del estómago.
- Veo que me guardas rencor.
- Bueno, no olvido fácilmente.
- ¿A pesar de que te salvé? ¿No soy como una especie de superhéroe ahora?
- No tienes mucha pinta de superhéroe.
- Tienes razón - Sonríe.Mientras hago la orden de comida observo como Yoongi se levanta de la cama y comienza a quitarse la camiseta. Me doy la vuelta aunque, a pesar de ello, sigo viéndolo por el espejo. Esta vez se está quitando el pantalón. La señora al teléfono me pide que espere unos segundos, así que aprovecho para dirigirme a Yoongi. Me doy la vuelta.
- ¿Qué pretendes?
- No cierres los ojos. ¡No hay nada nuevo! Todo te lo tienes muy visto - Ríe - Voy a darme una ducha. ¿Te unes?
- Yo ya me he duchado - Me sonrojo.
- ¿Podemos recoger la comida en el restaurante?
- Claro.
- Está bien. Voy a ducharme.Yoongi entra al baño. Saco ropa nueva de una bolsa. Aproveché mientras dormía para comprarle algo. Conociéndolo, seguramente que no ha traído ni una sola maleta con ropa. Se la coloco encima de la cama y doblo la ropa que llevaba puesta. Habrá que ir a lavarla, tiene sangre por todos lados.
Mientras espero a Yoongi recuerdo los días en los que estuvimos en el hotel en Jeju. Eran similares a ese momento. Yo sentada sobre la cama buscando algo que ver mientras esperaba a que él saliera de la ducha para salir a dar una vuelta, a pesar que él solo quería quedarse en la habitación del hotel haciendo otras cosas. Sonrío.- ¿Y esa sonrisita? - Dice secándose el pelo con la toalla. La otra toalla la lleva sobre la cadera.
- Nada - Digo evitando mirarlo - Te he dejado ropa sobre la cama. Iré fuera un momento.
- ¿A dónde vas?
- Pues... A esperarte fuera. Cámbiate rápido.
- ¿Compraste tú la ropa? - Dice observándola mientras la agarra con las manos.
- Sí, ¿no te gusta?
- Claro que me gusta. Es totalmente tu estilo. Como la ropa que compramos para mí en Jeju. Me gusta mucho.
- Me alegro... Te espero fuera, ¿vale?
- ¿Para qué? Si ya me estoy cambiando de ropa delante tuyo. Siempre ha sido así, ¿de qué te avergüenzas? Como te he dicho, esto lo tienes muy visto ya. De arriba a abajo, sin perderte nada.
- Para.
- ¿Debería?Yoongi se acerca a mí y me agarra con un brazo sobre la cadera pegándome a él. A pesar de que lleva el pantalón puesto, aún no se ha puesto la camiseta y su torso sigue algo mojado.
- No deberíamos estar tan cerca...
- ¿Tienes miedo? - Dice con una media sonrisa.
- ¿De qué tendría miedo?
- No sé... De que te bese hasta el punto de tirarte a esa cama y...
- Creo que llevas mucho tiempo sin comer. Ponte la camiseta y vámonos.
- Podríamos hacerlo ahora. Luego tendrás tiempo para dejar a tu novio. Yo no soy celoso.
- ¿Qué no lo eres? - Río - Date prisa, anda.
- ¿Qué me dé prisa con qué?
- Cambiándote. ¿Qué más va a ser?
- Podría ser... - Sonríe - Nada. Acabaré arreglándome.