- La cena estaba muy buena. Es una pena que no hayas probado bocado.
- Lo siento, es que no tenía apetito.
- ¿Te ocurre algo? Desde que hemos salido de casa te noto un poco extraña... como triste, decaída.
- Es que me es imposible estar feliz ahora mismo.
- Pero, ¿por qué? ¿No te gustó venir aquí? Pero si siempre solíamos venir y te encantaba. Perdona si la cena no estuvo bien. Debería de haber pensado en otro sitio. Es aburrido venir siempre al mismo lugar, ¿cierto?
- No es eso, Jooheon.
- ¿Entonces?
- Necesitamos hablar.
- ¿Hablar? ¿Sobre qué?
- Es mejor que lo hagamos fuera, o en otro sitio más tranquilo.
- Está bien.
Pagamos la cuenta del restaurante y salimos de allí. En la calle hace un poco de frío y el cielo está nublado.
- Lloverá - Dice Jooheon mirando hacia el cielo y seguidamente mirando a mi - ¿Deberíamos hablar aquí?
- No creo que esto nos lleve mucho tiempo.
- Me estás empezando a asustar, Lily. Está bien. Hablemos aquí. Dilo rápido.
- ¿Por qué actúas como si nada pasara?
- ¿Perdón?
- Sabes perfectamente de lo que te hablo. He hablado de esto con Yoongi.
- ¿Y...?
- Y que... le dije que me decidí por ti.
- ¿Entonces? ¿Cuál es el problema?
- El problema es que yo pensé que hacer esto sería lo correcto. Pero me he dado cuenta de que no.
- ¿Qué quieres decir? ¿Piensas que has hecho mal decidiéndote por mí?
- No que haya hecho mal... Tú eres el mejor. Me refiero a que, me tratas muy bien y te mereces todo el amor del mundo. Siempre me has demostrado lo que sientes y te agradezco todo este tiempo que hemos pasado juntos. No me arrepiento ni un solo segundo de todo lo que hemos pasado.
- ¿Estás... dejándome?
- Lo que quiero decir es que... Yo no puedo engañar a mi corazón por mucho que lo intente.
- ¿Y quién ocupa tu corazón? Yo... no, ¿verdad?
- De verdad que no te mereces esto.
- Respóndeme, Lily. ¿Me dejarás? ¿Te irás con él?
- Durante la cena no he parado de pensar en Yoongi. Lo siento mucho, de verdad. Esto me duele a mí también. Pero en mi corazón no mando yo.
- Ósea que te vas con él.
- Yo...
- Te deja sola. No te hace caso. Te trató con despreció por un tiempo. Y aún así... ¿Te vas con él? No lo entiendo.
- Pero son mis sentimientos, Jooheon.
- Entonces, ¿debería yo tratarte así para que te quedes conmigo? - Ríe irónicamente con los ojos aguados - ¡No lo entiendo!
- Jooheon. Lo siento mucho.
- Es que entonces te podías haber ido con él desde el principio. ¿Por qué empezaste a salir conmigo?
- Porque realmente me gustabas. Pero no eres la persona a la que realmente amo. Desearía que fueras tú, porque te has comportado de lo mejor conmigo. Pero, ¿para qué engañarnos? Todo lo que viví contigo, todo lo que hice y dije fue totalmente sincero.
Jooheon comienza a caminar de un lado a otro. Parece enfadado y triste a la vez. Se coloca en frente de mí y me busca con la mirada.
- Estaba a punto de perder el control... Es que... no lo entiendo. De verdad que no consigo entender esta situación. Te quiero mucho, Lily. Y que esas palabras hayan salido de tu boca... que me hayas dicho que no soy yo al que realmente amas... Me duele. Joder, si que duele.
- Jooheon, cálmate.
- ¿Cómo puedo calmarme? ¿CÓMO? La chica a la que amo se va con otro. ¡Es imposible que me calme!
- Lo siento mucho, yo solo...
- ¡Deja de disculparte!
- Vale, pero...
La primera gota de lluvia comienza a caer, resbalando por mi frente. Los truenos resuenan a nuestro alrededor y centellea un relámpago. Unas gotas gordas comienzan a caer como si fueran piedras, casi hacen daño al aterrizar.
- Oh, ¡Dios!
- Deberíamos irnos a otro sitio o...
- ¿O qué? ¿O volver cada uno a su casa? No soporto la idea de no poder volverte a ver. ¿Por qué me haces esto a mi?
- Jooheon...
- Eres tan tonta. Te odio.
- Te vas a resfriar...
- Cállate.
- Pero...
Jooheon se acerca a mi con fuerza agarrándome del cuello y besándome con brusquedad. Me agarra del mentón y me lastima.
- Para, por favor.
- Cállate, cállate.
- Me estás haciendo daño, Jooheon.
- Shhh - Coloca su dedo índice en mis labios y su frente junto a la mía - No digas más.
- No puedes evitar la verdad.
- Si puedo, si puedo - Dice repetidas veces con los ojos cerrados - Eres mi todo. No te irás de mi lado así. Me niego.
- Apártate de mi. No te reconozco.
- Cariño, soy yo - Dice comenzando a llorar.
- Jooheon... - Comienzo a llorar yo también.
- No serás feliz junto a él. Decide bien, ¿si?
- Lo tengo muy decidido, Jooheon.
- ¡No! ¡No puedes!
Jooheon comienza a alterarse y me suelta mientras me maldice por mi decisión.
- Tonta. Él no te hará feliz. No lo hará.
- Jooheon. Para de una vez. Vámonos a casa - Le pide Minhyuk, quien ha aparecido hace un par de minutos.
- Recuerda muy bien esto que te digo. No seréis felices nunca por mucho que os améis.
- ¡Cállate y entra al coche!
Minhyuk arrastra prácticamente a Jooheon hasta el coche. Se disculpa conmigo antes de entrar él también al coche y ambos desaparecen.
Me dejo caer, me derrumbo en el suelo mientras la lluvia me baña con fuerza. Me merezco esto por ser tan estúpida.
De repente alguien me tapa con un paraguas, se arrodilla a mi lado, me coloca una mano en la mejilla y me pregunta qué hago. Miro hacia su rostro y descubro quién es. Es Jin.
