No ha habido día en el que no haya ido a visitar a Yoongi con la esperanza de que despierte. No he podido parar de llorar mientras lo observaba sin quitarle ojo y mientras estaba sin él. ¿Por qué él? ¿Por qué le tuvo que ocurrir algo así?
Todos están muy preocupados, desde su familia, sus amigos, compañeros, hasta sus fans. Le he implorado muchas veces que vuelva, que absolutamente todos lo necesitamos. Que queremos volver a ver a ese perezoso Yoongi, a ese Yoongi que nos robaba sonrisas y por el que sentimos muchísimo amor.- Debes descansar. No puedes estar aquí siempre que no estás en el trabajo. Tienes que preocuparte por ti también, Lily. No queremos que tú también te pongas mal.
- Pero... ¿y si despierta mientras yo no estoy aquí?
- Serás inmediatamente avisada - Jungkook coloca su mano en mi hombro - Si despierta no querrás que te vea así...
- ¿Así? ¿Cómo?
- Tan solo mírate. ¿Cuántos días llevas sin dormir?
- Bueno, es que...
- Sé que lo estás pasando muy mal y también sé que las pesadillas no te dejan descansar. Pero debes tranquilizarte. Él despertará. Lo hará, porque tú se lo has pedido varias veces. Como dijo Namjoon, él te prometió que volverían a estar juntos y que serían muy felices. Él siempre cumple su palabra, entonces ten por seguro de que lo hará. Confía en él y ten fe. Dentro de poco tiempo lo tendrás contigo y pondrán hacer todo lo que has estado planeando mientras hablabas con él en esta habitación.
- ¿Me has escuchado?
- Sí. No pude evitarlo. Seguro que es feliz escuchando todo lo que tienes planeado para los dos en cuanto él mejore. Pero seguro que también le gustaría que descansaras un poco y que no estés tan triste.
- Tienes razón - Miro a Yoongi - Volveré pronto cariño.Me acerco a él y le doy un beso en la frente. Acerco mis labios a su oído y le vuelvo a susurrar cuánto lo quiero.
Me despido de Jungkook y salgo de la habitación. Busco las llaves del coche en el bolso y de repente me choco con alguien.- Perdón - Decimos a la vez.
Esa voz me suena... Levanto la cabeza para comprobar quién es.
- Hola, Lily. Cuánto tiempo...
- Ho... Hola Jooheon. ¿Qué haces aquí?
- Vengo a... visitar a Yoongi.
- Oh...
- Me gustaría decirle muchas cosas y pedirle perdón por otras. Y, además, le he traído estas flores.
- Ah... Perdona, es que se me hace un poco extraño que estés aquí.
- ¿Debería irme?
- No, no digo eso. Es solo que...
- Lo estás pasando muy mal, ¿verdad?
- Sí...
- Llevas el uniforme del trabajo, tienes cara de cansancio. Claramente se ve que llevas días sin dormir.
- No puedo engañarte...
- ¿Te gustaría que hablemos? Podemos ir a una cafetería. Puedes desahogarte todo lo que quieras.
- Ahora iba a casa a descansar un poco... - Observo a Jooheon - Pero claro que podría sacar un poco de tiempo para hablar. Me vendrá bien despejarme un poco.
- Genial. Vamos.Sigo a Jooheon por el pasillo del hospital. En cuanto salimos nos dirigimos a la cafetería más próxima al hospital, sin pronunciar una sola palabra. Pedimos nuestras bebidas y tomamos asiento.
- Yo... Siento mucho todo esto.
- ¿Por qué? Tú no tienes la culpa.
- No, pero... Me siento mal por haberte hablado de mala manera en ciertos momentos, tanto a ti como a Yoongi, no os lo he puesto fácil... entrometiéndose entre los dos. Creo que si yo no hubiera aparecido hubieras estado juntos desde mucho antes y, a lo mejor, ahora él no se encontraría en este estado.
- Nadie puede escapar de su destino, Jooheon. Pero en serio que tú no tienes la culpa de nada. Las cosas sucedieron así y punto. No llegamos a nada si empezamos a lamentarnos.
- Sí, bueno... Tienes razón. Pero necesitaba decirlo.Tomo un sorbo de mi café y miro hacia la ventana.
- Lily.
- Dime - Respondo dirigiendo mi mirada hacia él.
- Si Yoongi se recupera, ¿vas a casarte con él?
- ¿Eh? - Su pregunta me sorprende un poco. - No lo sé... No hemos hablado sobre ello. Depende de cómo vayan las cosas... Supongo. No lo sé. ¿Por qué preguntas eso?
- Por nada... Curiosidad, supongo. ¿Está muy grave?
- Pues estoy a su lado en cada momento que me es posible, con la esperanza de que despierte y que todo se encuentre bien en él.
- Lo quieres mucho, ¿verdad?
- Como a nadie he querido en toda mi vida.
- Wow. Eso me ha dolido un poco...
- Lo siento.Jooheon sonríe diciendo que no pasa nada. Acerca lentamente su mano a la mía y la agarra con suavidad.
- Tengo, tengo que irme.
- Perdón - Dice soltándome inmediatamente.
- Hablamos otro día, ¿vale?Cojo mi bolso y salgo de la cafetería. Miro hacia el hospital y tomo la dirección contraria para ir a casa.