Miedo al amor

Capitulo 43. Sin interrupciones

Los ojos de samuel y andrea estaban como si se fueran a salir de sus olvidas por la impresión, no sabían que hacer, tenían una excitación contenida que los estaba volviendo locos, en ese momento samuel le daban ganas de poseer a andrea de una vez por todas, pero la insistencia de Regina en la puerta definitivamente no dejaba concentrarlo, no podía simplemente ignorarla

Regina: papi! Se que estas despierto, ábreme por favor, tengo miedo! -dijo desde afuera-

Samuel se quitó de ensima de andrea y fue rápido al baño haciendo rabieta como si fuera niño chiquito

Andrea sin embargo tomo sus bragas y se la puso con rapides y luego la camisa que samuel se había quitando, le llegaba un poco más abajo del trasero, le tapaba lo necesesario

Regina seguía afuera insistiendo y samuel desde el baños gruño pidiéndole a andrea que la dejara entrar

Andrea: que pasa mi amor?

Regina: andy? Que hace aquí y con la camisa de mi papi? -preguntó con su tan típica inocencia-

Andrea: pues tu papi me invito a dormir porque ya era muy tarde para ir a casa y pues... Me presto su camisa para que estuviera más cómoda -decía mientras trataba de controlar su respiración-

Regina: estabas haciendo ejercicio -dijo al verla agitada-

Andrea: algo parecido, mi amor -dijo un poco nerviosa- anda, vamos a la cama

Regina: y mi papi?

Dijo pero un grito de samuel le dio repuesta a su pregunta "ahh!! Maldita sea" gritaba desde el baño mientras pataleaba con fuerza dentro de la ducha

Regina: que le pasa a mi papi? Esta enojado? -dijo preocupada-

Andrea: no amor... Es sólo que se está dando un baño de agua fría -dijo y tuvo que ahogar una risa, no podía imaginarse la frustración de samuel en ese momento-

Regina: por que?

Andrea: porque hace calor, mi tesoro -dijo mientras arropaba a Regina con la manta-

Y pensar que en esa misma cama, sobre esas mismas sábana hace alguno minutos estuvo a punto de pasar la mejor demostración de amor entre un hombre y una mujer

Regina: no es cierto, hace mucho frío

Andrea: ya... Deja de preguntar y venga para acá a dormirse

Andrea la acercó a su pecho y la abrazo

Regina: andy, ya que estas de nuevo con mi papi y que seguro pronto van a casarse... Ya puedo llamarte mami? -preguntó con tanta ternura-

Andrea: sabes que me puedes decir como quiera mi amor, pero ese "mami" en especial me encanta

Regina: siii!! -dijo emocionada- buenas noches mami -dijo y cerró sus ojos-

Andrea sabía lo enojado que podría estar samuel y lo preocupada que podría estar su familia, pero estar con aquella pequeña entre sus brazos y aún después de interrumpir aquel increíble momento, estar con ella le quitaba toda las preocupación que debería haber sobre sus hombro. Acomodó un poco más a Regina en su pecho y de inmediato se quedo dormida

Samuel duro aproximadamente 20 minuto en el baño tratando de deshacerse de aquella erección que le había provocado andrea, definitivamente la próxima vez que fuera a estar con ella pretendía llevársela lo más lejos que pueda

Samuel: maldita sea -decía para si mismo mientras salía helado del baño- Regina mi amor... Yo te amo con toda mi alma, pero esto, esto definitivamente no te lo perdono -la frustración de samuel era tal que aún no sabía que hacer con todo ese enojo, pero en cuanto salió y se encontró con una de las escena más hermosa del mundo, de inmediato el enojo y frustración se fue-