Capítulo 2

2.4K 165 158
                                    

Algo debía estar mal, ya que mi pastelito dijo que tardaría unos días. Y sólo durmió dos noches fuera de casa. Aún así me gustó que hubiera vuelto.

Nos quedamos toda la mañana en la cama abrazados, disfrutando del aroma de otro por un tiempo.
Mientras pasaba el tiempo él cerró los ojos, y yo aproveché para observarlo como nunca antes pude, ya que a Mr J no le gustaba que lo hiciera.

Observé su rostro: Su brillante y reluciente cabello verde que se puede distinguir a unas cuadras. Sus labios suaves y húmedos - hubieran estado secos de no ser porque nos habíamos besado - , esos carnosos labios que me gustaba tanto besar. Observé sus tatuajes - de su pecho y su cara - y los acaricié. Creo que a Puddin le gustó porque sentí esa electricidad rara que él me irradió. De pronto abrió los ojos y me sonrió. Observé su sonrisa, era la misma sonrisa que me había enamorado, y sin pensar lo besé nuevamente, y él me correspondió.

Es Perfecto.

— Harley... — dijo cuando nos habíamos separado — Creo que ya es hora de levantarse — Dijo levantándose de la cama. Yo me quedé estática, viendo como se dirigía al baño.

— Puddin...

— ¿Si, Harls? — Se giró.

Y lo noté. Noté en su mirada que estaba demasiado cansado como para mis caprichos de niña.

— Nada, puedes... - Y fué cuando también noté la sangre que le corría por la pierna — ¡PUDDIN! ¿Qué te pasó? — Él al parecer no quería que lo supiera, y resopló. Pero se acercó a mí y se sacó el pantalón quedando sólo en bóxer.

— Ahh... Es sólo un corte — Dijo sin molestia alguna.

— Pero, espera.

Fui al baño a por un botiquín y cuando salí Puddin ya me esperaba en la cama, esperando que lo atienda.

Aww, es tan lindo.

— Veamos...

Me puse de cunclillas y proseguí a desinfectar la herida: Quité un poco de sangre con un paño y luego puse un poco de alcohol en la herida. Puddin regañó un poco pero ya se le pasará. Luego le puse una gran venda blanca para que le cubriera la herida. Intentaba concentrarme pero "su cosa" estaba al frente mío. La miraba de vez en cuando y esperaba que no me descubriera.

Es muy grande, que puedo decir.

Cuando terminé el me cogió de la cintura y me besó agradeciéndome — No creas que no sé qué estabas mirando mi ametralladora — Susurró y se me erizó la piel — Si quieres, puedes probar. Descuida, no muerdo Harls.

Él y su lado pervertido. Lo amo tanto.

— Quizás otro día, — mi miró triste y decepcionado — ahora necesitas descansar.

— Vamos Harley, ¿Segura que no quieres esto? — Se levantó y apuntó hacia la parte de su cuerpo que me desconcentraba todo el tiempo.

No mires Harley Quinn, sé fuerte.

Miré a su entrepierna.

Rayos Harley, perdiste.

— No. Mañana quizás. Ahora necesitas descansar.

— Como tu digas — Cayó rendido a la cama nuevamente. — Pero mañana lo haremos si o si, que ya me dieron ganas.

— Como tu digas amorcito... — Le dí un corto beso en los labios y salí de ahí dejando dormir a Puddin por al menos un día. Pobrecito, su vida cansa.

Para sorprenderlo decidí hacer unas galletas. No soy muy buena repostera pero intentaré. Espero que no se me quemen.

[...]

Ya pasaron cinco horas desde que dejé a Puddin durmiendo. Duerme como un tronco.

Creo que ya es hora de que despierte.

Cogí una bandeja de plástico y puse unas seis galletas y un vaso de jugo de naranja. Subí las escaleras y entré en la habitación, pero me encontré con la cama hecha y no habían rastros de Puddin adentro. Un segundo después encontré la ventana abierta.

Oh no.

Puddin me abandonó.

Comenzé a llorar descontroladamente y me tumbé sobre la cama, dejando las galletas y el jugo sobre la mesa de noche. "PUDDIN ME ABANDONÓ" Esas palabras se repetían en mi mente sucesivamente y cada vez iba llorando más. No había caso, él me había dejado. Nunca me amó. Y yo lo dí todo por él.

¿Por qué? Eso no puede suceder. Él me ama y nunca me dejaría por otra, Esperen ¿Y si hay otra?

Todas esas preguntas y muchas más se repetían. Ya no había forma de calmarme. Estaba gritando su nombre por si es que me respondía. Me levanté y me asomé a la ventana.

— ¡PUDDIN! — Gritaba con todas mis fuerzas — ¿¡ POR QUÉ!? ¡PUDDIN! ¡PUDDIN NO! ¡PUDDIN NO ME DEJES! — No pude más y caí al suelo, todavía mirando por la ventana como podía. No paraba de llorar hasta que un ruido me sacó de mis pensamientos. Giré y al lado de la puerta se encontraba Puddin con sólo una toalla envolviendo de su cintura para abajo.

— Harley, ¿por qué... — No lo dejé terminar y fuí a su alcance a abrazarlo con todas mis fuerzas, aferrándome a él, a su cuerpo.

— Creí... creí que te habías ido y me habías dejado sola. — Las lágrimas salieron nuevamente ya que había recordado como me sentí al pensar eso: Me sentía como un cuerpo sin vida.

Él es mi vida.

Sólo tomaba una ducha Harls, no... — No terminó la oración porque lo besé en sus labios descontroladamente, anhelando sus caricias.

— Nunca más, por favor, no lo vuelvas a hacer... — Dije cuando paré de besarlo. Mis ojos estaban cristalizados y los de él mostraban preocupación. Mi cara estaba roja debido a tanto llorar.

Me tomó en brazos y me dejó en la cama, se puso unos bóxers - puesto que no traía nada debajo - y se subió con cuidado sobre mí. Sujetó mi cara entre sus manos y me miró directamente a los ojos.

— Escucha, nuca te dejaría Harls. Te amo demasiado como para dejarte. No te asustes, por favor... — Sus ojos estaban  comenzando a cristalizarse y los sequé con mi manga de la sudadera. Tragó saliva — Harley, promete que nunca volverás a pensar eso, pase lo que pase, por favor....

— Lo prometo. — Suspiré y le dí un corto beso en sus labios temblorosos. — Te Amo.

Él también suspiró. — Yo también te amo.

Se sentó en la cama y lo abrazé. Nos quedamos así un rato hasta que dejamos de sollozar y le mostré mis galletas con forma de "H" y "A", él las probó y dudé por un momento de que le hubieran gustado pero siguió comiendo y se me fué esa idea.

Mientras lo observaba comer pensaba en todo lo que me dijo.

"Nunca te dejaría Harls. Te amo demasiado como para dejarte."
"Promete que nunca volverás a pensar eso."
"Yo también te amo."

A pesar de que le dije que nunca pensaría más en eso, no puedo cumplirlo. Es como mis pesadillas, nunca se irán.

Es una pesadilla. Mi pesadilla.

No importa. Intentaré expulsar esos pensamientos, porque en el fondo él y yo sabemos que nos amamos. Y que nuestro amor perdurará hasta el final de los tiempos, y mientras que eso pase intentaremos ser felices juntos. Intentaré amar por más tiempo al hombre que se llevó mi vida. Al hombre que se robó mi corazón.

Nota:

Holaaaaa, actualizé seguido, ¿ven?
Lloré un poco con este capítulo. Espero que ustedes no me maten por mi imaginativa mente xD
Había editado varias veces esto pero al final logré reducirlo.
¿Qué les pareció? ¿Creen que la historia va muy adelantada? O ¿está bien? Diganme.

No olviden votar y comentar, ayudaría mucho.

Las quiere, Cony ♥

Miss_HarleyQuinn ❤❤❤

Bad Romance© [Harley Quinn & Joker] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora