Mi padre y Cruella tuvieron la gran idea de tener una cena ''familiar'' para que Sarah y yo nos conociéramos, obviamente ninguno de los dos sabía que ya nos conocíamos aunque de seguro Sarah no tenía ni idea de que yo sería su hermanastra.
Mi día en la universidad había sido tranquilo, me había cruzado varias veces con mi queridísima hermanastra pero ella no me había prestado atención, también me encontré a Ethan y James varias veces, con Ethan intercambiamos varios besos rápidos y con James solo una pequeña sonrisa en forma de saludo. Intente varias veces poder charlar con Aline y contarle sobre la pesadilla que seria esa cena con Cruella y su pequeña zorra pero no puede hacerlo.
Al llegar las diez de la noche mi padre estaba demasiado nervioso iríamos a cenar a la casa de Jennifer, yo también lo estaba porque preferiría cenar en mi propia casa, mas aún porque podría escapar en cualquier momento incomodo a mi habitación.
-¿Estoy bien? ¿Qué dices? ¿Cambio mi corbata?- Mi padre parecía que estaba por tener su primera cita era desesperante.
-Estas bien papá, no es la primera vez que veras a crue Jennifer, a Jennifer- Mi padre estaba tan absorto en su vestimenta que no se percato de que casi llamo Cruella a Jennifer.
Yo no me había preocupado demasiado por mi atuendo no me interesaba impresionar a nadie, me vestí con el primer vestido que encontré en el armario y unos zapatos que combinaban.
Durante todo el camino hacia la casa de Cruella mi padre no dejo de pestañar repetidamente, cosa que hacia cuando estaba nervioso.
-Jenn me comento que su hija es algo arisca, así que se amable- Tenia ganas de decirle a mi padre que Sarah se podía ir a la mierda, pero ya estaba demasiado nervioso así que solo asentí.
Al llegar a la casa de Cruella el portón eléctrico se abrió y ambos entramos con el auto, la casa era bastante grande y sofisticada, aunque demasiado cuadrada para mi gusto, y muy blanca. Al bajarnos del auto Jennifer salió a recibirnos, vestía un vestido gris con encajes ajustado a su cuerpo y con un gran escote, llevaba su cabello recogido y la misma cara de amargada que recordaba.
-Hola cielo- Dijo dándole un beso a mi padre, cosa que me revolvió el estomago- Hola Ronnie- Dijo luego mirándome y sonriéndome falsamente, tal vez mi padre no lo notaba pero yo si, no la salude solo le sonreí del mismo modo que ella a mi- Pasen por favor- Dijo abriendo la puerta de su casa para dejarnos entrar.
-Bonita casa- Dije sarcásticamente ya que era algo fría, sin color, una casa donde no hay sentimientos, todo era blanco o negro o dorado o gris, no me gustaba, pero al parecer Cruella no entendió mi sarcasmo ya que sonrió satisfecha, luego nos condujo hacia el comedor de la casa y todos nos sentamos.
-Sarah ya llegaron baja por favor- Grito hacia las escaleras de la casa, minutos después la gran zorra bajaba por ellas, casi me río por el atuendo que llevaba, no entendía porque se vestía así, llevaba un conjunto celeste claro, pollera tubo y un saco, era horrendo parecía un look de los años 60.
-Tu debes ser Kyle- Dijo ella saludando a mi padre con un beso y una gran sonrisa, luego se dirigió hacia mi y dejo de sonreír- Te conozco ¿Cómo es que te llamas? ¿Rossie?- Dijo con una mueca mirándome de pies a cabeza.
-Soy Ronnie- Dije lo menos simpática posible.
-Cierto- Dijo golpeando su cabeza y riendo igual de falsa que su madre- Soy muy distraída- Yo solo esboce una sonrisa y mi padre y Cuella nos miraban sin comprender lo que sucedía.
-¿Se conocen?- Pregunto Jennifer.
-Estamos juntas en la clase de Antropología- Conteste.
-¡Eso es genial! pueden pasar tiempo juntas para conocerse mejor o incluso ayudarse si alguna no entiende algo- Dijo mi padre entusiasmado. Cuando nadie contesto Jennifer se puso incomoda y le ordeno a su hija que se sentara para comer, había preparado un pollo relleno y varias ensaladas.
-Cuéntanos algo sobre ti- Pidió mi padre a Sarah, ella dejo de comer y sonrió.
-Soy porrista de la universidad, tengo un promedio de 9 y 10, quiero ser modelo y amo ir de compras- Dijo sonriendo- También me gustan los chicos músicos y si son rubios mucho mejor- Y al decir eso ultimo me miro a los ojos y luego sorbió un trago de la bebida que Cruella nos había servido, estaba segura que lo decía por Ethan, esta zorra quería guerra.
-Lo físico no importa cariño- Dijo Cruella regañándola.
-Tienes razón, lo que importa es que tenga dinero ¿verdad?- Dijo ella muy seria y Jennifer por algún motivo se incomodo y no contesto. Mi padre al ver la situación tensa y sin entender que había sido aquella conversación decidió interferir.
-Ronnie también tiene muy buen promedio, en Indiana era la mejor en todo el instituto- Mi padre estaba revelando mi pasado nerd y eso no podía pasar nadie debía saber de ello.
-No era la mejor del instituto papá exageras- Dije nerviosa y el río.
-La modestia no existe en esta casa querida- Dijo Cruella sonriendo. No entendía porque mi padre se había fijado en ella era egocéntrica y detestable, y mi padre odiaba esa clase de personas.
-¿Y Sarah tienes novio?- Pregunto mi padre tratando de sacar un tema de conversación.
-La verdad es que no, no me gusta estar atada a ningún hombre- Porque eres bien zorra pensé- Creo que debemos divertirnos hay muchos peces en el mar- A mi padre no le gusto mucho lo que Sarah había dicho pero aún así sonrió.
-¿Y tu Ronnie tienes novio?- Pregunto Cruella.
-No- Dije ya que en realidad Ethan no me había pedido formalmente que saliéramos no eramos novios oficiales aún.
-Yo te he visto besándote varias veces con Ethan Miller en los pasillo de la universidad- Dijo Sarah, mi boca se abrió sin saber bien que decir y ella esbozo una maléfica sonrisa.
-No me habías contado nada- Dijo mi padre algo tenso.
-¡Ay lo siento metí la pata! tal vez solo son amigos con derechos y no necesariamente novios, a mi no me agrada ese tipo de relaciones en la que los chicos te usan para tener sexo, pero quien soy yo para juzgar- No podía creer lo que había escuchado, lo estaba haciendo a propósito quería sabotear la cena o hacerme quedar mal, mi padre al oír eso comenzó a ahogarse con el vino que estaba tomando.
-¿¡Qué!? ¡Explícate Ronnie!-
-Tranquilo papá, iba a decírtelo pero no tuve oportunidad- Dudando unos segundos abrí mi boca sin pensar- Ethan y yo estamos saliendo.
-¿Por qué le mientes a tu padre?- Pregunto Cruella simulando que estaba avergonzada.
-¡Tu no te metas!- Le grite sin pensar y mi padre se enfureció.
-¡No le grites a Jennifer Madison!- Mi padre no me llamaba por mi verdadero nombre hace varios años y solo lo utilizaba cuando estaba enfurecido.
-¿Te llamas Madison?- Preguntaron Sarah y su madre al mismo tiempo, ni mi padre ni yo contestamos, solo nos mirábamos enfurecidos el uno al otro, así que decidí levantarme y huir de la casa y como si fuera poco ahora mi horrorosa hermanastra y la bruja de su madre sabían mi verdadero nombre, algo me decía que mi plan de dejar atrás mi vida de Indiana no saldría adelante.
-¡Ven acá Madison!- Gritó mi padre lo que me impuso aún mas a salir corriendo de ese lugar.
Luego de hacer unas tres cuadras corriendo mi padre me alcanzo con su auto.
-Sube- Dijo a través de la ventanilla, pero yo no lo escuche y seguí corriendo.
-Sube ahora Madison- El tono que había usado no me gustó, el nunca se enojaba conmigo, así que subí- Tu y yo al llegar a casa tendremos una larga conversación.
Era increíble como ese par de brujas comenzaron a traer problemas a la relación con mi padre, debía desarme de ellas antes de que crearan mas problemas.
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El chico de al lado.
Teen FictionRonnie Evans decide abandonar su antigua vida de chica nerd y marginada en Indiana e irse a vivir con su padre a New York con la idea de una nueva vida, y un total cambio de imagen y personalidad. Conocerá a Ethan Miller un chico que a primera vista...