Seis Horas De Marte

Capitulo 20 (final)

Marte:
Ema me demuestra; que al fin y al cabo, la frágil Lizzie pudo dejar de lado su sed de muerte, una sed que solo podía saciar yo, tristemente fui su amigo durante mucho tiempo.
La muerte es amistosa y comprensiva cuando el mundo se derrumba sobre tí. O eso era lo mejor que podía entregarle a una niña tan rota y bonita.

Lizzie vivió toda su vida cargando con sueños rotos, tratando de arreglarlos, ella entregaba trozos de sus sueños y su alma por salvar al mundo.

Pero su mama vivía en otro mundo y su papá era cruel e ignorante porque creia solamente que existia su mundo y no el de los demás.

Lizzie estaba muy sola, ella solo quería irse a otro lugar, no soportaba un minuto más sufriendo por sus seres queridos y dejando todo su dolor para lo ultimo; al final del día, nadie se acordaba que Elizabeth existía y sufría por todo aquello que presenciaba, por todo ese afecto que jamás tuvo, por esos padres que nunca supieron tratar con ella. Ella se alejo de los niños de su edad y se rodeo de otros universos, viajaba con los libros y era quien deseara en internet.
Pero aquello jamás era suficiente, no podía evadir la realidad por completo. Ignorada en la escuela y ensordecida por gritos que había en su casa. La pequeña Elizabeth cada vez escapaba mas lejos de los ojos de la realidad, cada vez se adentraba mas en hacer viajes galácticos conmigo.

Jamás quise llevarme con más ansías a tal pequeña, ella no merecía nada de esto, podía estar mejor recorriendo el cosmos, pero me apenaba quitarle la vida a tan corta edad.

Por tanto vacilar si debía llevarla o no; enviaron una guardiana, el  cosmos decidió que merecía más amigos que la muerte.

Esa guardiana es Ema. Su misión no consistía en solo alejarla de mí, consístia en hacerla fuerte, en mantenerla de pie frente a las situaciones que presenta el mundo.

Ema, es una excelente guardina, tan excelente que se enamoró de su protegida y viceversa.

El mundo es hostil, pero si no levantas la vista del libro que ya acabaste, jamás verás la biblioteca llena de conocimientos que tienes frente a tus narices.
Me alegra que Lizzie lo haya logrado.
Ella me mantiene consigo, oculto en el fondo de su corazón, porque las cicatrices siempre duelen aunque hayan sanado, pero ella se levantó, levantó ante el dolor, más fuerte que nunca.

Elizabeth ya no está muerta, no más, ella renació de sus propias cenizas.
~~~~~~~~~~~~~~~~~
Acá se acaba el viaje, viajeros galácticos.
Estoy contenta de que hayan leído y quisiera saber sus opiniones, pueden dejarlas en los comentarios si gustan.
Saludos, Ivy.