Diez pasos para enamorar a Ashton Irwin [1era. Temporada]

Capítulo 5

❝POV Ashton ❞

Los pensamientos en mi cabeza no dejaban de rondar, era demasiado pedir que la chica que me gusta se fijara en mí, pero claro, para pedir eso debería saber quién es la dueña de mis pensamientos. Y aquí era dónde me preguntaba, ¿será Keyla la chica correcta? O será….

-Joven Irwin – escuche esa voz que me hizo salir de mis pensamientos. Mostré mi rostro en una confusión total.

-¿Sí? – pregunté al ver que toda la clase me observaba 

-Me haría el favor de retirarse del salón si no pondrá su atención en mí. – dijo la maestra. 

No podía negar su petición realmente quería alejarme de ahí. Salí del salón no sin antes recibir una pequeña risa de mi mejor amigo, y salí, pensé que sería lo mejor pero no fue así o ¿sí? Podía visualizar a Annel, sentada a lado de unos casilleros con la vista caída pero al escuchar el cerrar de la puerta levantó su rostro, y fue cuando pude ver sus hermosos ojos, definitivamente, había descubierto algo nuevo en mí, me tragué mis miedos y me acerque.

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Él se acercaba a mí de una manera lenta y seductora al mismo tiempo, podía sentir como mis mejillas empezaban a arder de solo en pensar que él era demasiado seductor. 

-Hola – dijo, un simple hola, pero para mí significa el canto de un ángel. 

-Ho…hola- tartamudeé, más inepta no podía ser.

-¿te encuentras bien? – preguntó tomando un lugar frente al mío. 

-Sí, ¿por qué no lo estaría? – dije con una sonrisa, es que él solo tenerlo frente a mí, me hacía feliz. 

-bueno porque estas fueras de clases – dijo soltando una pequeña risa, por dios, era el mejor canto de un ángel. 

-no, lo que pasa es que llegue tarde y no me dejaron pasar, pero ¿Qué hay de ti?- dije

-Oh, ya veo, bueno, realmente no quería estar ahí y la maestra se dio cuenta y literal me corrió del salón. – dijo

-Vaya, tu primer día y ya eres un rebelde – dije con una risa pequeña. Pude notar como su sonrisa incremento y soltó una pequeña risa.

-¿Annel? – dijo él en un tono algo nervioso

-¿Sí? – aún seguía con una sonrisa en mis rostro

-¿Quieres ir por un helado? – lo escuche bien, ¿me estaba invitando a salir?
Entonces recordé el paso número 2. 
Paso número 2. “
¿Encontraste al chico? Si tu respuesta es sí, entonces este chico no solo eleva tus sueños y te provoca las aquellas llamadas mariposas, este chico podría ser el indicado. En el paso anterior te recomendamos que te acercaras al chico, si tu tiempo con el fueron risas y sonrisas y alguna otra miradita, entonces podemos decir que tú también le mueves el tapete. ¡OJO! No decimos que le gustes, pero llamas la atención que necesitamos para seguir con este paso. Si en alguna pequeña conversación entre ustedes surge el que él te invite a salir, ACEPTA. Será el momento indicado para conocerse en un sentido más personal, recuerda, se discreta pero divertida, pues esta es su primera cita. 

-Yo…. Yo – estaba demasiado nerviosa para formular una pregunta, por lo cual asentí con la cabeza, Ashton sonrió y tomo de mi mano. ¿Él acababa de tomar mi mano? Y así fue como salimos del pasillo para dirigirnos a la tienda de helados. 

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❝POV Calum❞

Mis ojos no lo querían creer, la chica de mis sueños, se alejaba de mis manos y si eso fuera poco, e sentía como un idiota porque ni siquiera me había atrevido a invitarla a salir una sola vez. Con la cabeza baja y con una mirada perdida tomé lugar en el salón de clases.

-¿Qué te ocurre? – dijo Michael, lo ignore - ¿es Keyla? – asentí. - ¿Qué fue ahora? – pregunto, suspiré y conteste. 

-Creo que le gusta Ashton. – dije

-¿Cómo sabes?- preguntó

-Porque ella le sonreía de la manera en que me miraba a mí. – dije, Michael iba a hablar pero una presencia nos interrumpió. 

-Hola chicos – era ella, Keyla

-Hola- dijo Michael, ella me miro

-¿Calum? – levanté mi vista a su rostro y la ignoré. Keyla se enojó con una confusión en su rostro, lo podía notar. 

-¿Y eso que fue? – preguntó Michael negando con la cabeza, tal vez tenía razón, ya era momento de que me olvidara de ella.

La clase transcurrió y el tiempo dio a su fin, todos se levantaban de sus lugares, intenté imitar sus acciones pero algo me lo impedía. 

-¿Keyla? ¿Qué ocurre? – pregunté al ver como su cuerpo obstruía mi camino. 

-¿Qué ocurre? Te diré que ocurre, he estado esperando por meses que me invites a salir, pero no lo haces, así que me harte de esperar y lo diré de una vez, Calum ¿quieres salir conmigo?
Este si era una gran vuelta.