La hija de Tony Stark II

Capitulo 30

*Narra Peter*

Extrañamente no estaba asustado ni nervioso, ni nada. No había ninguna emoción en mi cuando entro eso volando.

Se que Regina y Diana me advirtieron y no les quise creer. Tal vez puede detenerlo antes, tal vez no.

- Todos ustedes han oído hablar de Spider-man - dijo sea quien sea que este detrás de la mascara de duende horrible.

Nadie habló pero asentimos.  Tenía que seguir el juego de todos o me descubriría, mire de reojo a Harry que seguía con Amy, ellos también asintieron.

- ¿Donde esta?  - gritó. De nuevo, nadie contestó.

Descendió hasta casi tocar el suelo y tomo a una chica del cuello, yo estaba a punto de correr y ayudarla, pero me contuve y aprete los puños. Comencé a buscar una salida para ponerme el traje o hacer algo sin ser visto.

- Sueltame!! - gritaba la chica mientras intentaba soltarse

- ¿Donde esta?  - gritó de nuevo. Entonces mire a Coulson quien parecía tener un plan. Movió la cabeza hacia la derecha y yo mire hacia esa dirección, era el guante que hice con Leo. Yo asentí.

Conté hasta tres mentalmente y entonces corri mientras Coulson le disparaba al duende, no lo mataría, pero captaria su atención y soltaría a la chica.

Salí del gimnasio y me puse el traje lo más rápido que pude.

- Me buscabas - entre heroicamente por las puertas principales

- Sácalo de aquí!  Ya! - dijo Amy en mi mente

- Tu!  - me señaló enojado, o al menos creo que estaba enojado.

- Si me quieres, atrápame - dije y volvi a salir del gimnasio, esta vez, con el duende pisandome los talones.

El volaba y yo me columpiaba por los pasillos. Estaba demasiado cerca de mi. Tanto que pudo jalarme el brazo. Perdi el equilibrio y caí al suelo pegandome en la cabeza mientras rodaba por el suelo a causa de la velocidad que llevaba.

- Ahh!  - gemi cuando intente pararme, no lo logre

- No eres tan fuerte como aparentas - dijo detrás de la mascara

- Tu tampoco lo serias si te golpeo la cabeza - repliqué. El solo rio

- No hagas esto tan difícil - habló - Solo quiero tu sangre

- Pensé que eras un duende no un vampiro - dije parándome e intentado recobrar el equilibrio

- Inútil - dijo entre dientes

- ¿Quien eres?  - pregunto alguien tras el duende, cuando este se volteo pude ver quien era. Harry. Tenía una pistola entre las manos, ve tu a saber de donde la saco.

- Baja eso - dijo el duende. Pero Harry de veía decidido a disparar

- ¿Quien eres?  - repitió. Estaba temblando, yo lo podía notar, seguro el duende también - ¿Quien eres?  - grito más fuerte para que su voz no se quebrara.

El duende se acercó a el y yo di unos pasos al frente.

- Alejate de el!  - grité. El duende me miro, pero no me tomó importancia y siguió con Harry.  Este en ningún momento dejo de apuntarle al tipo.

Y entonces el tipo se quito la máscara, yo no podía ver quien era, pero la reacción de Harry me lo confirmó, el soltó la pistola y se quedó paralizado. Seguro el lo presentía pero quería verlo con sus propios ojos.

- No pasa nada - susurro Norman -Es algo personal Harry, sigo siendo papá.

Harry no hizo nada, luego se recargó en los casilleros y se empezó a resbalar poco poco sin expresión alguna en el rostro.

- Harry - susurre. Pero de un momento a otro, mi pena se convirtió en odio y eso en un deseo de venganza.

Corri hacia el duende para golpearlo por detrás, pero este de volteo como si lo supiera y me golpeó en el estómago y luego en la cara. No podía respirar y mientras tanto el se escapaba.

*Narra Amy*

Sali del gimnasio después de asegurarme que la chica estuviera bien. Cuando sali, Harry estaba en el suelo mirando a Peter,  sin expresión alguna, que se retorcía en el suelo. Corri hacia el.

- No!  - exclamé. Me arrodillé junto a el y le quite la mascara, tenía sangre en la nariz y estaba intentando respirar. - Escúchame! - le grite llamando su atención. No es que no pudiera respirar, estaba entrando en pánico además de que el dolor lo atormentaba, aún no estaba de el todo curado de lo de Flash. - Oye oye...  - llame su atención de nuevo y tome sus manos - Relájate - entre a su mente intentando calmarlo y esas cosas rojas aparecieron entre nuestras manos entrelazadas,  como pasaba cada que nos conectamos. El cerró los ojos y comenzó a respirar como si hubiera corrido un maratón y seguía gimiendo

- El...  - intento explicar, pero aun no recuperaba el aliento

- Lo se - hable tranquilamente y realmente sabía de que hablaba, aún estaba en su mente. Luego dirigió su mirada a Harry y yo lo seguí.

Harry seguía temblando y las lágrimas rodaban por sus mejillas, ya no veía a Peter, ahora veía el arma tirada en el suelo.

- Harry - lo llamé, pero no reaccionó

- El lo vio - habló  Pet que ya estaba mejor

- Era mi papá - hablo Harry con la mirada perdida en el suelo

- Harry.... Escuchame - dijo Pet intentando levantarse y se acercó a el. - Vamos a poder con esto. Harry lo miro con los ojos cristalizados

- No puedo... - susurro - El es mi papá