Jackie.
Hace unas horas estaba escuchando los gemidos de mi pitufo gruñón, realmente pasamos un momento agradable, lo invité a tomar un baño conmigo y feliz aceptó. Sin duda cada momento lo amo más, yo puedo hacer que él haga lo que nadie ha logrado conseguir, puedo hacerlo sonrojar con sólo acercarme a su rostro, puedo hacerlo enojar con sólo seguirle la contraria, puedo hacerlo reír con sólo darle un abrazo.
Me gusta todo de él.
Compartimos otro lindo momento en el baño, salimos en toallas y me coloqué frente al armario.
—Veamos que te puedo prestar...—Dije mirando toda mi ropa.
Saqué una bermudas negras y una camiseta roja junto con ropa interior. Observé el cuerpo de Ez y luego la ropa dudando si le quedaría ya que es más pequeño. Me acerqué y coloqué el atuendo sobre la cama.
—Esta es la talla más pequeña que guardo, quizás te quede un poco grande...—Dije observándolo.
—Esta bien, gracias—Dijo sonriendo.
Mis mejillas se tiñeron de rojo y me giré para que no me viera, volví al armario y empecé a vestirme, al terminar lo vi vestido con lo que le presté y se veía muy lindo aunque le quedara grande. Lo abracé y me correspondió.
—Bajemos a comer algo, ¿quieres?—Pregunté.
—¡Sí, muero de hambre!—Dijo eufórico.
Lo tomé de la mano y lo arrastré a la cocina, pude ver a Lizy preparando algo dulce y al vernos se sorprendió.
—¡No, no, no, no! ¡¿Por qué no me avisaron?!, ¡Debí de haberme quedado en mi cuarto en vez de hacerle galletas! Así escucharía todo...—Se quejó mientras se lamentaba por su decisión.
—¿D-De qué estas hablando?—Preguntamos al unísono.
—"Ez" no llegó con ese atuendo y sus cabellos siguen húmedos, ¡es obvio que lo hicieron y no pude escucharlos!—Pronunció histérica Lizy.
—Ya ocurrió y no puedes cambiarlo—Dije arrogante y Ez se sonrojaba.
—Hum, sus galletas están en el horno—Mencionó con una mala mirada para irse a su habitación.
Saqué las galletas y nos sentamos en el sofá a comerlas, Ez estaba recostado sobre mi regazo mientras le pasaba las galletas. Mi celular sonó y contesto.
—¿Diga?—Hablo.
—¿Jackie? Soy tu padre—Dijo mi viejo millonario.
—Oh, ¿qué se le ofrece?—Dije cortés.
—Quiero que nos vengas a visitar un rato, tus hermanastros te quieren conocer—Me invitó.
—Eso sería agradable pero ahora tengo una visita, ¿podría ser para otro día? —Dije mientras le quitaba la galleta a Ez.
—¡Jack quiero mis galletas!—Dijo Ez después de comerse la que le había dado.
—Ya veo, estas con él... Pues entonces que el muchacho también venga. El chofer ya debería estar llegando, los espero—Dijo mi padre y como por arte de magia una bocina sonaba fuera de la casa.
Abro la puerta y era el mismo hombre que me llevó la otra ocasión, no podía negarme así que tomé mis cosas y a Ez diciéndole que entrara al auto.
—Jack, ¿a dónde vamos y quién es él? —Preguntó.
—Es el chofer de mi padre y vamos a visitarlo...—Pronuncié tranquilo, luego recordé que el no sabía sobre mi verdadero padre.
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¿Un Chico En Mi Vida? |ChicoxChico||Yaoi|
أدب الهواةJackie Peck, un chico pelinegro de 16 años, al tener una vida un poco agitada debido a sus padres ingresa en un nuevo instituto, con nuevas personas, algunas buenas y otras malas, nuevos problemas, nuevos romances, nuevos sentimientos y nuevas decis...