¿Un Chico En Mi Vida? |ChicoxChico||Yaoi|

XXIII

Esteban.

—¡Mamá soy gay!—Grité con todas mis fuerzas.

Esperaba que igualmente me gritara pero todo estaba en silencio, no sé cuántas personas pudieron haberme escuchado pero lo único que sentí fue un cosquilleo intenso en mi mejilla. Me había abofeteado sin más.

—Volvamos a casa—No pude ver su rostro pero sus palabras daban miedo, eran frías y sin sentimiento.

Vi su espalda tensarse y sus pasos retumbaba en todo el lugar. Con la mirada en el suelo la sigo pero sin darme cuenta ya Samuel había colocado su mano en mi hombro tratando de transmitir su apoyo incondicional de hermano mayor.

(...)

Cuando llegamos a casa vimos a papá preparando algo de comer a escondidas de mamá como siempre lo hace y al vernos se sobresaltó, pero mamá en vez de regañarle lo ignoró, y todos sabemos el porqué.

—Tendremos una reunión familiar ahora mismo—Dictó seria llamando la atención de todos.

—¿Ocurrió algo? Eso lo hacemos cuando es un tema muy importante—Preguntó mi padre terminando de comerse todo y recogiendo el desorden.

—Esteban, ya no saldrá de casa una vez que llegue del instituto, no se contactará con sus ''amigos'' y está castigado de por vida, y si me replica tomará clases de baloncesto—Mencionó mi madre cruzada de brazos mientras me miraba con decepción.

—¿Ahora qué has hecho?, chico—Preguntó papá con fastidio. Antes de que pudiera decir algo, la mano se Samuel se volvió a colocar en mi hombro, pero mamá fue la que respondió.

—Esteban dice ser gay...Él está defraudando la familia nuevamente—Frunció su ceño.

—¿Q-Qué? ¿ahora él? Diablos...¿Eso es cierto? ¿no es una broma?—Se sorprendió al principio pero su expresión cambió a decepción, pero al menos ha sido más suave que mamá.

—S-Sí, lo siento papá—Respondí en voz baja.

—...¿Qué hicimos mal al criarlos? No, ¡¿Qué hice mal como hombre para que ustedes sean así?!. Samuel ha recuperado el camino pero tú, ¡dime qué hice mal!...Desde que naciste has manchado el nombre de esta familia. Primero las peleas en la primaria, las fiestas, borrachera, e incluso las drogas con tus amigos delincuentes y ahora marica. ¿Qué es lo que sigue?, ¿ladrón de bancos?, ¿asesino?...por favor ya para—Se lamentaba mi padre ya sentado en el sofá con sus manos en su cabeza mirando el suelo.

—Papá, por favor escuchame primero...

—¡No! ¿Quieres que escuche como te enorgulleces de chupar pollas y que te las metan por el culo?. Mejor no digas nada. Tu madre tiene razón—Se adelantó antes de que terminara.

—¡Escuchame primero! Sé que he sido el peor hijo pero he cambiado, de unos años para acá he pensado en sus palabras pero no podía salir tan fácil de los vicios, pero cuando me trasladaron de instituto conocí a personas nuevas, lo conocí a él y me di cuenta que esa no era la vida que quería, yo quería vivir en paz, feliz, estar a su lado. Me enamoré de él profundamente. No por ser un hombre y que tenga pene sino por haber comprendido mis sentimientos, mi forma de ser, por guiarme y sacarme de ese mundo oscuro. No espero que me perdonen por lo que hice en el pasado pero sí que comprendan el presente, el nuevo yo, sólo soy una persona que ama a otra persona, y esa persona está necesitando mi apoyo, es mi turno de ayudarlo—Dije firme, nunca me había sentido tan emotivo al expresar mis sentimientos a mis padres de esta manera y en estas circunstancias.

Dentro de mi sentía un cosquilleo que recorría todo mi cuerpo, no sé si eran ganar de ir al baño o era los nervios, pero creo que eran ambos. Hubo un silencio en toda la habitación, los dos mostraban pensar en mis palabras pero sus miradas se cruzaron.