Mi Pequeña Y Perfecta Casualidad

CAPITULO 11

ROMINA.

Pufffsss han pasado 4 meses demasiado rápido y con Liam seguimos indiferentes nos vemos quizás una vez al mes, pero gracias a mi, aún no entiendo como pasó esto, ni si quiera fui mala con él. Cuando cumplimos nuestro primer año, él solo mandó a dejar con uno de sus amigos una pequeña rosa más nada.

Con respecto a Abby la veo todos los días en el colegio pero ella prefiere andar sola, la última vez que cruzamos palabras fue en un proyecto de trabajo hace 2 meses atrás, la mayoría de veces la veo sola muy rara vez que habla con alguien.

Ariela aún sigue con Rahí, Mikky sigue con los estudios y yo... pues sigo con los estudios también hace 2 meses di mi prueba de la universidad y aprobé, no sentía tanta felicidad siempre quise compartir este momento con mis mejores amigas y Liam, cuando me valla supongo que no notará que me fui a Inglaterra, mamá últimamente me da libertad pero prefiero quedarme la mayoría de veces (siempre) en casa, a decir verdad me sorprende muchísimo de ella, papá sigue en su trabajo, Jer esta por graduarse de Abogado y a mi me faltan 2 meses para graduarme y despues 2 semanas para empezar.

—Hey... —Ariela me sacó de mis pensamientos haciendo sonidos con sus dedos. —¿Dónde estás? —Dice en susurro.

— ¿Qué?... —Chillé.

—Presta atención la bruja está que te observa demasiado.

—Cual bru...

—Señoritas Sanders y Saad dentro de mi clase no pueden conversar, por favor pueden retirarse las 2. —La bruja de Fisica últimamente nos odia y nos acaba de sacar de clases, esto era lo que faltaba justo ahora..

Nos quedamos sentadas en el pasillo por horas, no me sentía impotente porque nos sacaran de clases, después de minutos llegó el que menos quería ver en este día.

—Hola señoritas, ¿Cómo están? —Dice con un tono muy engreído.

—Nosotras bien y tu —Respondió Ariela

—Excelente y... ¿porque están fuera de clases?

—Porque nos pillaron conversando.

—Muy mal bellezas, Romina acaso nuevamente se te comieron la lengua los ratones. —Dice cruzandose de brazos y con sonrisa.

—No Jace, sólo no quiero hablarte y mucho menos escucharte me revientas mis oídos.

—Que grosera eres, niñita. —》Niñita otro mas, ja《 tranquila Romina Relájate.

—Gracias. —Force una sonrisa.

—Las dejo preciosas. —Es un tarado más, que bien que se haya ido.

ABBY

Hace 4 meses que me he alejado del mundo completamente, ya no me siento sola como antes, mi pequeñito o pequeñita y yo nos acostumbramos a no necesitar de alguien, aún no se nota mi pancita ya sólo falta una semana para los 5 meses y sabré su sexo, aún nadie sabe de mi embarazo.
La última vez que hablé con Liam fue aquella vez que fui a su casa a discutir sobre el Tema, dijo que quería que abortara, al día siguiente me dejó donde un ginecólogo privado.
Le pedí al médico que me mostrara de favor a mi pequeñín y lo permitio, me dejó escuchar sus latidos y él al verme muy triste no permitió que me hiciera un aborto porque ni él estuvo de acuerdo en eso, el dinero que le dio Liam al ginecólogo me lo devolvió a mi para comprar medicamentos que necesitaría durante mi embarazo.
Es entonces que desde allí nadie sabe de mi embarazo sólo el medico y yo.
Mi vientre no es notable, aún, mamá ciertas veces me pregunta porque no salgo y porque no vienen mis amigas a visitarme. Siempre le digo que estamos muy ocupadas con tareas, proyectos, evaluaciones etc, lo que se me ocurra.