Capitulo 8

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MARATÓN 1/3

Capitulo 8: Mark

Me monto en el coche agotada. Holly's acaba de cerrar y solo me apetece irme a casa y darme un bañito relajante. Aunque antes debo recoger a Lottie de casa de Mark, espero que no se la haya quemado o algo asi, mi niña a veces es un poco trasto.

Arranco el coche y pongo la calefacción, a estas horas hace un frío que pela. El disco de Bruno Mars empieza a sonar. Yo me pongo a cantar las canciones mientras conduzco, aunque se traben cada dos por tres. El disco ya tiene sus añitos, me lo regaló Zayn... Sacudo la cabeza para detener los recuerdos y aparco frente a la casa del rubio.

Llamo al timbre y un Mark sonriente me abre la puerta. Tiene la cara manchada de blanco y también la camiseta. Yo le miro alzando una ceja divertida.

-Un problemilla con la harina -dice riendo.

-¿Harina?

-Mamii -Lottie viene corriendo hacia mi feliz y me abraza.

Esta manchada de blanco, al igual que Mark, y lleva un delantal más grande que ella con manchas de chocolate. Río al verla así.

-¿Que habeis estado haciendo?

-Hemos decidido hacer la cena y Lottie ha tenido la idea de preparar un pastel -contesta él y yo niego con la cabeza divertida por la situación -Podemos ir cenando mientras se termina de hacer.

-No hacia falta que te molestaras Mark.

-Te recuerdo que tu me debías una cena.

Yo sonrío y asiento.

-Es verdad, es verdad.

Lottie me coge de la mano y tira de mí hasta la cocina. La mesa esta puesta con tres platos y hay un delicioso olor a chocolate en el ambiente. Yo me siento en una de las sillas, Mark enfrente mía, y Lottie entre los dos.

-Umm, tienen buena pinta -digo fijándome en los filetes con patatas asadas y guisantes que han preparado.

Mark me sonrie con su típica sonrisa seductora y los tres nos ponemos a comer. Hay uno de esos silencios incómodos en los que no sabes que decir. Noto la mirada del oji-azul posasa en mí pero prefiero no levantar la vista del plato.

-¿Sabeis qué? Mi profe nuevo es muy guay -comenta mi hija con la boca llena.

-Lottie, ¿Qué te tengo dicho?

-Lo siento -se disculpa tragando.

-¿Qué decías de tu profe? -Le dice Mark mirándola.

-Que es genial. Hemos hecho muchos juegos y se llama...

El horno empieza a pitar interrumpiéndola.

-Parece que ya está el pastel -dice Mark dirigiéndose al horno y abriéndolo con cuidado -Nos ha quedado perfecto, pequeña.

-Ya lo se, soy la mejor cocinante del mundo.

-Cocinera -la corrijo sonriente.

Mark saca el pastel y lo pone en un plato. El olor que desprende es tan delicioso... Tengo que reconocerlo, el chocolate me puede. Terminamos de cenar mientras el pastel se enfría un poco.

-Ya verás cuando pruebes mi pastel, te vas a requetechupetear los dedos -dice Lottie orgullosa.

-Seguro cariño -le contesto abrazándola.

-Vamos al salón -dice el rubio cogiendo la tarta y un cuchillo.

Asentimos y los tres vamos a sentarnos en el sofá. Lottie en seguida coje el mando de la tele antes que nosotros y pone Disney Channel. Yo voy a regañarla cuando Mark me detiene.

-Dejalá -dice sonriéndome -Que vea lo que quiera.

Él posa la tarta en la mesa, corta tres trozos y los pone en platitos. Me pasa uno y pruebo un poco de pastel con la cuchara.

-Umm esto está buenísimo -digo abriendo mucho los ojos.

Mark suelta una carcajada.

-¿No te había contado lo buen cocinero que soy?

-Creído -digo rodando los ojos.

-¿Ah, si?

Coje chocolate con el dedo y me mancha la mejilla mientras sigue riendo. Yo le miro seria y se la devuelvo. Comenzamos una pequeña guerra de chocolate mientras mi pequeña se sienta en la alfombra viendo la tele concentrada.

-Quieres pelea, ¿eh?

Mark me ataca en mi punto debil, las cosquillas. Río sin parar tirada en el sofá. La escena tiene que ser graciosa, tirados en el sofá con las caras manchadas enteras de chocolate y riendo a carcajadas. Entonces él para de hacerme cosquillas y ambos nos quedamos quietos, mirándonos. El rubio me dedica una sonrisa seductora y se acerca más a mi hasta que puedo sentir su respiración.

Un escalofrío me recorre. ¿Vamos a besarnos? ¿En serio esto esta ocurriendo? Nuestras narices se rozan mientras nuestras miradas siguen en conexión. Mi cabeza me repite una y otra vez que esto no esta bien, pero mi corazón martilleante opina lo contrario. Nos acercamos aún más y cuando a penas queda distancia entre nuestros labios la risa de Lottie me sobresalta.

Giro la cabeza y la veo mirando la tele mientras se come su trozo de pastel de chocolate. Carraspeo un poco y Mark me deja espacio para incorporarme, igual de shockeado que yo. Mi corazón va tan acelerado que creo que se me va a salir del pecho. Cojo una servilleta y me limpio con ella la cara.

-E-es tarde -le digo a Lottie -Deberíamos irnos ya.

-Cinco minutos más, porfa -dice sin apartar la mirada de la tele.

Mark me observa con una mirada que no puedo descifrar.

-Llevate un trozo de tarta -dice levantándose -no me la voy a comer toda yo solo.

-Vale -asientó.

Coge la tarta y se la lleva a la cocina mientras yo me quedo sentada mirándo la tele fijamente sin prestarle mucha atención. Una pregunta me viene a la cabeza, ¿realmente quería besarle? ¿Eso significa que me gusta? Pienso en sus labios rojos acercándose a los mios, su respiración mezclándose con la mía, sus ojos mirándome fijamente...

-Kath.

-Em, ¿qué? -Contesto sobresaltada.

-Toma -dice dándome un tupper con la tarta.

-Ah, si, gracias.

-¿Te pasa algo?

Yo niego con la cabeza y le pongo una sonrisa forzada. Cojo mi abrigo, el de mi hija y mi bolso.

-Vamos Lot.

Ella se levanta y apaga la tele, fastidiada por tener que irse. Se acerca a Mark y le da un fuerte abrazo. Él se lo devuelve cogiéndola en brazos.

-Adiós enana -dice dándole un beso en la mejilla.

-¿Vas a venir a recogerme mañana? -pregunta ella poníendole ojitos de cachorrito.

-No puede cariño, otro día os veis, ¿vale? -Le contesto yo.

-Jo -dice bajándose de los brazos del rubio -adiós Mark.

Él le sonríe y le acaricia el pelo. Después me mira a mí.

-Hasta mañana, Kath.

-Hasta mañana.

Sostenemos nuestras miradas por un segundo pero yo la aparto y cojo a mi hija de la mano para salir por la puerta. Le pongo el abrigo mientras salimos y después la monto en el coche. Conduzco hasta mi casa sin dejar de pensar en lo ocurrido. Mañana hablaré con Audrey sobre ello.

Cuando llegamos todo está apagado, mi amiga aún no debe haber venido. Entramos y subimos a la planta de arriba. Ayudo a Lottie a ponerse el pijama y la acuesto en su cama. Después me dirijo al baño y me doy una ducha relajante. Realmente la necesitaba. Me pongo el pijama y me acuesto agotada en la cama, cayendo pronto rendida en los brazos de morfeo.

Beautiful MistakeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora